-ASTRO Y TÚ-

ROCKY Y TÚ

Hola lindos panesitos de mi kokoro, les traigo la segunda parte de historias de Astro y tú.

Esta vez es el turno de rocky.

Espero que les gusten, y denle mucho amor a la historia.

☆☆☆☆

Odiaba la lluvia, ultimamente el clima en seul era super frío. Me levante para tomar una ducha, el frío era algo que me encantaba, pero la lluvia no.

(TN): despreciable lluvia- dije tomando mi toalla y caminando al baño.

Estaba aburrida ya que gracias a la lluvia no logre salir, pero el dia era hermosamente frío.

Me recoste en el sofa para mirar desde la ventana, podia ver la lluvia golpear el crital frente a mi.

Un ruido me saco de mis pensamientos; una musica algo alta llamo mi atencion, era el vecino sin rostro.

Desde que ese apartamento fue comprado siempre se escuchan ruidos extraños y algunas veces musica.

(TN): estupido vecino- dije levanntandome- esta vez no lo soportare.

Camine a la puerta y sali para luego llegar frente a la puerta del vecino, hice con mi mi mano un puño y comence a tocar.

(TN): ¡¡buenas...disculpe!!- grite para ser escuchada

Note que la puerta se abrio, un rostro maduro y atractivo se asomo algo confundido.

Rocky: eh... hola?- dijo muy serio

Las palabras no brotaban de mis labios, lo peor es que hace unos minutos estaba por gritarle todas las groserias del mundo hasta en 9 idiomas.

(TN): ehh... yo...

Rocky: ¿tú?

(TN): podrias bajarle a la mu- musica- dije entrecortando las palabras.

Rocky: claro... solo es eso- dijo dando la vuelta y bajandole a la musica.

(TN): muchas gracias- dije algo calmada.

Rocky: ¿eres mi vecina?-dijo curioso

(TN): si.. ¿porque?

Rocky: eres linda- sonrio

Mis mejillas comenzaron a arder

*que carajos me pasa... como solo esa palabrita me pone en estado de idiotes absoluta*

(TN): gracias- dije algo seria- y gracias por bajarle al ruido.

Rocky: descuida linda vecina... cuando este ensayando tratare de no molestarte de nuevo.

Note como sonrio y entro, cerrando la puerta casi frente a mi.

(TN): ¿que acaba de pasarme?- dije caminando a mi apartamento- sal de mi, impulso de idiotes- dije sacudiendo la cabeza.