Un sentimiento de inquietud invadía todo mi cuerpo.
Paseaba por el Templo de Géminis, la angustia había reemplazado mi mascara de cuero y ahora cubría mi rostro.
En vez de cuando me escondía en las sombras de los pilares, con la vista a la entrada del Templo.
Al pendiente de que Aspros cruzara por allí.
Aspros había asistido a una fiesta en Rodorio.
El aspirante a la armadura de Tauro había invitado a su gemelo a dicha fiesta y Aspros no se había negado.
Ya era de madrugada y Aspros no aparecía.
Se sentía preocupado, temía que algo malo le fuera a suceder.
Sabía que su hermano era fuerte, por algo era aspirante a la armadura dorada de Géminis.
Pero no podía evitar el hecho de preocuparse.
Dejo escapar un suspiro hondo.
Normalmente Aspros se negaría a la invitación no queriendo perder el tiempo de esa forma, pero aparentemente su gemelo seguía algo molesto conmigo.
Fruncí el ceño y aprete los labios.
¿Aspros seguiría pensando que soy un depravado?
La palabra le dolía en el alma.
Negue con mi cabeza, quería creer que fue por otra razón la molestia de mi gemelo, pero mientras mas vuelta le daba más me confundía.
-Aspros-
Susurre. Y como si lo hubiera invocado escuche el ruido de unas pisadas en el Templo de Géminis.
A paso apresurado camine a donde la entrada y lo que vi no me gusto nada.
Aspros estaba hebrió.
Su caminar era lento y torpe, no parecía poder mantenerse de pie.
Sus mejillas eran cubridas por un tinte carmin y su cabello azul se encontraba todo desordenado.
Aspros al verme lucía feliz, intento acercarse pero tropezo con sus pies.
Lo atrape sujetandolo de los hombros antes de que cayera al piso.
Él solo solto una carcajada mientras balbuseaba mi nombre.
Su olor llegó a mis fosas nasales, olía a alcohol y a tabaco.
¡También había fumado!
Me sentí molesto.
Con un brazo rodie la espalda de Aspros pasando por su axila, con el otro rodie sus piernas para a continuación levantarlo.
Lo lleve a la habitación escuchandolo hablar sobre hombres con sombreros que vuelan, no entendí a que se refería pero ciertamente llamo mi atención.
Lo acoste en la cama, pero cuando estaba a punto de soltarlo el sujeto mi cuello de forma brusca y junto sus labios a los míos.
Sin duda, mi gemelo sabía a alcohol y a tabaco.
Separe nuestros labios y me libre de su agarre, Aspros se sujeto a mi ropa no queriendo dejarme y me dijo de forma jovial.
-¡Hagamos el amor!-
Quede helado.
Mis ojos se abrieron de golpe.
Me quede sin palabras.
¿Hacer el amor? ¿Aspros y yo?
¿Qué debía responder?
Una mano acariciando mi entre pierna me hizo reaccionar.
Nervioso la aparte causando unas risitas en Aspros.
-n-o-
Fue la rápida respuesta que pude darle a mi gemelo para después huír como todo un cobarde.
Siendos sinceros, la idea me gustaba y el problema en mi entre pierna me delataba pero hacerlo ahora sería aprovecharme de Aspros.
Además, no quería que Aspros me volviera a llamar depravado.
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Hermosos momentos (Saint Seiya: Lost Canvas)
RomanceAspros y Defteros compartieron tantos momentos, unos hermosos momentos. Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Teshigori Shiori.