Capítulo 8.

199 9 1
                                    

[Narra Nicole]

El mensaje de Justin me pilló desprevenida, por desgracia no podía quedar con él a las 12, tenía que trabajar duro si quería aprobar las próximas pruebas. Después de contestarle a ese mensaje no llegó nada más a mi móvil, ¿le habría sentado mal? A demás, nos íbamos a ver esa misma mañana, no le di importancia.

Cogí mi portátil blanco, lo encendí  y puse mi dirección de correo que rápidamente se abrió ante mis ojos. Tenía varios nuevo mensajes, comencé a leerlos. Algunos eran de publicidad, otro de Alex (no decía mucho solamente me había enviado unos apuntes) y finalmente uno de un viejo amigo.

 Cerré el ordenador y encendí mi móvil de nuevo, entré en Instagram y tenía una nueva notificación, ¡Justin quería seguirme! No sabía qué hacer, ¿aceptarle o no? Tampoco lo conocía tanto, fueron unos cuantos encuentros inesperados que llevaron a quedar juntos y... Pulsé aceptar.

Comencé a mirar sus fotos y la cantidad de chicas que le comentaban. No pude evitar reírme.

*********

[Narra Justin]

Me levantaron de un tirón seco, en ese momento me desperté y vi a dos policías llevándome hacia el salón de mi propia casa, ¿qué cojones estaba pasando? Entonces recordé la mierda que me había contado Jack, vendrían los policías.

"¿Qué coño hacéis levantándome de esta manera?" Ignoraron mi comentario.

"Señor Bieber siéntese, por favor" Señaló el sillón de mi propio salón.

"Disculpe agente, pero me gustaría desayunar ya que estoy en mi casa" dije con tono sarcástico. Caminé hasta la cocina y cogí mis cereales favoritos. No me molesté en salir rápido, es más, me tomé todo el tiempo del mundo.

"Si ya está preparado, procederemos al interrogatorio" se aclaró la garganta el mismo policía de antes "¿Qué estaba haciendo usted el pasado sábado a las 3 a.m?" Añadió tomando asiento enfrente de mí, apoyó sus brazo sobre la mesa que nos separaba.

Estaba nervioso, no podía negarlo, no era la primera vez que me interrogaban, pero sí la segunda, la otra me salvé por los pelos, gracias a Chaz, uno de mis mejores amigos de Canadá, que miente de miedo. Ahora estaba solo, ni siquiera estaba Jack, ese cabrón me había dejado solo.

"Estaba aquí mismo, en casa." me encogí de hombros.

"Un chico de 20 años permaneció en su casa un sábado por la noche" Apuntó algo en su libreta "Interesante" murmuró. "Y... ¿qué hacía exactamente?"

"Ese día estaban dando una película" Pensé un segundo "'La casa del bosque' creo recordar, ¿la vieron?" dije dirigiéndome hacia los dos policías que me miraban expectantes.

"¿Y Jack Bertow? ¿Qué hacía él a esa hora?" miró a mis ojos, buscando miedo en ellos, pero no lo encontraría. Permanecí firme, fingiendo que no me importaba la situación.

"Yo estaba viendo una película, ¿qué mierda voy a saber que estaba haciendo Jack? Soy un hombre, ¿recuerdan? No sabemos hacer dos cosas a la vez" Escupí. El segundo policía le susurró algo, que el otro apuntó de nuevo en su libreta.

"¿Qué sabe de Charly Fernandez?" Su voz era cortante.

"¿Quién?" Respondí intentando parecer intrigado por el tema. Intentaban ganarme en su juego, pero no saben que las normas las pongo yo.

*****

[Narra Nicole]

Estaba sentada en el banco de ayer esperando a Justin, que llegaría en breves.

Empezaba a retrasarse, 10 minutos, 20, 30... Eso era el colmo. Decidí no esperar más y comencé mi sesión diaria. ¿Cómo pude pensar que un chico que conocí hace dos días cumpliría lo previsto?

Terminada la hora de footing me volví a sentar en el banco, ni rastro de Justin, como era lógico. De repente vi a Eddie, el 'novio' de Alex acercándose hacia mí.

"Hola Nicole, ¿qué haces tan solita?" sonrió.

"Acabo de terminar de hacer ejercicio, ¿no me ves?" Dije señalando mi ropa y mi cara.

"Ah, es verdad, si pareces un tomate" soltó una carcajada, y yo le mandé una mirada asesina. "Que es broma" me uní a su risa.

"Bueno ahora debo irme, tengo academia en un rato y tengo que preparar todo" me levanté del banco "Hasta otra" Nos dimos dos besos en las mejillas y juraría que Eddie me tocó el culo.

Heartbeats.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora