Atados

Capitulo 36

Emma llevaba un mes saliendo con Paúl y hasta ahora se daba cuenta que el no era el mismo Paúl paciente del instituto, el ya no quería seguir esperando para meterse entre sus piernas, y ella no quería que alguien diferente a Matias se metiera entre sus piernas. Esto la iba a volver loca, estaba con Paúl porque era atractivo y para darle celos a Matias, y obviamente para poner a su familia furiosa. Se decía que esa mentira no era tan mala, bueno le habían mentido sobre toda su vida, su rabia tendría que ser con sus padres, hasta con su padrino; pero Matias no, el no tenía nada que ver, en realidad hace rato que lo había perdonado y cuando lo perdono le cayó la noticia de que tenía un don. A veces le parecía irreal, raro, extraño y otras veces cuando tocaba aquella navaja que parecía tan común, la hacía sentir tan poderosa. Como es que había pasado toda su vida viviendo como una persona normal, cuando en realidad podía hablar con una persona que vivió hace muchísimos años y que murió, pero en realidad sigue ahí.

Había decidido perdonar a Matias y lo había hecho, se sentía diferente ahora que en realidad lo había perdonado. Las ganas de estar con el estaban al 100% y los celos al verlo con otras chicas estaban al mismo nivel, que significaba eso, que seguía enamorada de el y ahora estar con Paúl se volvía más difícil, a veces cuando lo besaba era como si Matias estuviera ahí y no quería besar a Paúl pensando en Matias. 

¿Ser amiga de Matias? Emma había pensando eso muchas veces, para acercarse más a el, pero era obvio que entre ellos una amistad no resultaría, a menos que fuera con derechos. Ahora se sentaba en la mesa a la que antes el huía. Y había pasado de ser la chica nueva, a ser, la única chica que había logrado bajar los muros de Matias Hall. Porque la gente en esta universidad hablaba tanta mierda y porque de  toda la mierda que hablaban ella siempre, era el blanco. Los últimos dos meses todos los chismes, eran sobre ella. Unos fueron ciertos, que como se habían enterado, no sabia. Pero ya aquí sabían, que el triangulo, que conformaba a Paúl, Emma y Matias, se venía desde el instituto. Que un día en la mañana se acostó con Matias y a la noche con Paúl, Emma se entero el mismo día que todos. Y de ahí hablaron cosas como "para Matias fue más satisfactorio, el se la cogió con todas las energías y el pobre Paúl se la cogió cansada, ya sabes, dicen que Matias da duro" y un montón de cosas que la dejaron como una perra.

Ahora Emma caminaba por los pasillos del comedor y siguió notando las miradas, que le estaban dando hace una semana, que fue cual la bomba se rompió. 

-Pretendes que siga sentándome en esta mesa, se supone que eres mi amiga Kara.-Emma ya alzaba su bandeja y comenzaba a pararse, Kara la sentó de sopetón.

-Todo el mundo sabe que eres mi mejor amiga y si te levantas de esta mesa esperan que yo me vaya contigo, pero sabes que estoy aquí por una razón, solo soporta un poquito más y ya, por mi.-Emma estaba furiosa, Kara no se daba cuenta que Max no le prestaba ni un poquito de atención y Emma ya había intentado muchas cosas, pero Max no cedía y ella ya se había cansado.

-¡Podrías olvidar a Max por un maldito momento!-Emma se dio cuenta que sus palabras no fueron un susurro y que Max las había escuchado perfectamente. Kara se puso roja como un tomate y una lagrimas se asomaron por sus ojos, salió corriendo, lo que no sorprendió a Emma, con Max detrás de ella, que si la sorprendió. Emma se acerco furiosa a Matias.

-Toda esta mierda es por tu culpa, podrías decirle a toda este estúpida y chismosa gente, que nunca me he acostado contigo y con Paúl el mismo día. Claro si se tratara de otra persona nadie hubiese prestado atención pero como se trata de ti, pero no has hecho nada, todos aquí me tienen como la perra y tu sigues como si nada, porque eres Matias Hall ¿cierto? y puedes acostarte con mil en un día y nadie dice nada, mientras que sale un rumor sobre mi y todo el mundo me juzga y mientras que toda la gente me juzga, tu sigues como si nada y yo mientras tanto hasta peleo con mi mejor amiga y todo por tu culpa, porque tu haces las cosas y no te importan las demás personas, porque todo lo que tenga que ver con sexo gira entorno a ti, pedazo de ninfómano.-Emma se calmo cuando escucho su tono de voz, era como si tuviera un micrófono invisible en la garganta, la gente que estaba cerca había hecho un circulo y todos miraban hacia ella. Matias seguía en silencio, se veía intranquilo.