Fuego del cielo

Fragmento 3

Durante el viaje que nos hicimos compañía, le pregunte al señor sobre su espada parlante; él me sonrió y contó que fue su maestra quien le regalo la espada luego de que se conocieron, vivieron muchas aventuras juntos, defendieron a su nación al lado de sus amigos y gracias a sus servicios ganaron una humilde mansión con sirvientes donde hicieron su vida de esposos, siempre amándose y peleando ya que la sirvienta personal de ambos era una amiga y competidora por pasar al lado de él.

Me dio curiosidad como hablaba de su esposa y la sirvienta, se notaba que aunque tuvieran sus diferencias eran buenos amigos; bueno, la historia tomo un rumbo lúgubre ya que en una aventura él cayo a un lugar donde fue transportado a otro mundo y así mientras buscaba como volver hasta que llego a la ciudad del imperio, donde le ofrecieron la inmortalidad y a cambio él se quedaría ayudando hasta que encuentre la forma de volver a su tierra junto a su esposa.

En este tiempo habían pasado algunos años y su deseo era poder verla una vez mas, ah me olvidaba, su nombre era Zero, estoy segura que era un nombre clave ya que cuando me indico el nombre de su espada no pude pronunciarla o su nombre real de ese señor.

Las horas pasaron y me desperté bien dormida al lado del señor, me sonroje pidiendo disculpas por incomodarle pero él solo me dedico una sonrisa y me dijo que habíamos llegado para tomar el ultimo transporte; caminamos por una vía de la estación hasta una sala muy grande, con un techo bastante alto, era la zona de teletransporte.

La zona de teletransporte es una habitacion muy grande donde facilita los viajes entre planetas y mundos de todo lo que esta bajo dominio del imperio, debo decir que no todos los planetas cuentan con uno, solo los mas adecuados y seguros, si uno desea llegar a los otros mundos solo debe hacer escalas con diferentes transportes.

Cuando llego nuestro turno, esperamos unos segundos y en un parpadeo estábamos en la ciudad central, nuestro destino; Zero amablemente se ofreció a ser mi guía en la ciudad y me ayudaría a llegar al cuarte general donde era mi destino.

Caminamos por las calles de aquella gran ciudad, tenia hermosos jardines públicos, se podía respirar un aire limpio y con toque a desierto, pregunte el motivo y Zero me explico que las afueras de la ciudad era un desierto enorme; siguiendo nuestro trayecto llegamos al cuartel general y dentro en la sala de recepciones, nos despedimos.

En verdad era enorme el lugar y mientras conversaba con la persona de la recepción, que me pedía mis datos personales y como no disponía de un poder manifiestamente propio debía ir con un especialista en otra área del mismo lugar.

Fue un recorrido algo largo pero me pude guiar por los letreros informativos y preguntando donde debía ir; quizás unos quince minutos a pie y llegaba a una especie de torre de piedra muy bonita y con toques antiguos, al entrar en la torre vi que tendría que subir escaleras, cosa que hice y al poder llegar como a un piso veinte, toque la puerta a lo que me recibió el especialista.

El nombre del especialista o examinador era Julio, sus habilidades psíquicas iban mas allá de leer la mente, podía alcanzar el alma y de esa forma revelaba como la habilidad natural de una persona interactuaba con su portador; me pregunto si estaba conforme con el chequeo, yo acepte sabiendo que vería mis recuerdos y pensamientos, mientras se concentraba y lo hacia, él hablaba:

- "Tu habilidad radica en los sentimientos, pero al parecer solo con aquellos que son muy intensos, el poder es de fuego y si ciertamente se libera de esa forma pero hay maneras de controlarlo, hacer que se libere  voluntad sin estar sintiendo aquello a ese nivel, la forma incorrecta puede traer desgracias, cree en ti misma y te ayudare buscando como podras controlar mejor tu poder ya que no tenemos quien use el fuego como es tu habilidad por otro lado también veo que aprendiste como usar la espada, no hay muchos maestros así, pero justo regreso uno que podría enseñarte mas cosas, solo ten confianza en ti misma y lo lograras"

Al finalizar di las gracias y baje de la torre, volviendo a recepción donde me indicaron que debo ir a la siguiente habitacion, la costumbre era que los maestros vivan al lado de su estudiante por lo que iría a presentarme, por los pasillos veía que el lugar era muy grande ya que todo tenia un mapa de ruta, al menos fue sencillo llegar pero demore algo.

Me quede esperando en la puerta de aquella habitacion ya que seguía con el mensaje de "Sin ocupantes" por lo que me avergonzaba ocasionalmente cuando veía a otras personas verme ahí sentada o de pie al lado de aquella puerta.

Ya por la noche, llego Zero, mi nuevo maestro; era la persona con quien había conversado en aquel viaje de llegada, ahora saludándole como mi maestro y él como tal, me invito a entrar a su habitacion, la cual luego de cerrarse la puerta mostraba un espacio de pintura completamente blanca.

Era una habitacion especial, como todas las del lugar, generaba a pedido el ambiente que uno deseara; para esta ocasión dos cuartos, una sala y cocina comedor se generaron, ademas del espacio del baño; maravillada y contenta pude entrar a mi nuevo cuarto donde acondicione a mi gusto los colores, accesorios y muebles.

Aquella noche disfrute una cena preparada con la misma idea, y quede a cargo de la cocina, no necesitaba hacer mucho, solo saber que ordenar; así mi vida en aquel lugar empezaría...

Continuara~