1.- Mala conducta

35 3 2
                                    

—¿Giselle?—

Y aquí estoy de nuevo, en la oficina del director. Cada día llego de la escuela con un regalo para mi tía, si, un reporte de mala conducta.

—Estoy cansada, Giselle, ¿porque me tienes que dar tantos problemas?— mi querida tía inició la conversación, dándome una lección de vida que jamás usaría.

—Nadie te obliga a cuidarme. — Eso es verdad, desde pequeña he querido escapar para llegar a un orfanato donde pueda encontrar a una nueva familia.

—Estás castigada. —

—¿De nuevo?—

—Sube a tu habitación. — contestó una tía enfadada con sus brazos cruzados.

—Bien. —

—Bien.— azote la puerta haciendo que mi gato y mis muebles temblaran.

"He deseado hablar contigo desde que tengo memoria, en un sueño, a una estrella fugaz o incluso mediante una carta pero nada ha funcionado."

Hace muchos años años decidí hablar con las nubes para explicar cada día cómo está mi vida y la de Chispas, mi gato.

Mi nombre es Lia Giselle, me considero aventurera con un solo objetivo, llegar a Londres. Mi desastrosa vida ha pasado por momentos incómodos, inolvidables, fuera de serie o incluso espantosos, como cualquier día desde el accidente que sufrió mi madre pero, ¿He dicho que no es momento de hablar de eso?

Las cosas son extremadamente estrictas en la casa, Giselle limpia tu mesa, Giselle limpia los desechos del gato, Giselle ordena tu cuarto, y muchas menciones a Giselle por toda la casa, jamás he tenido una hermana o compañera, mi tía ha estado conmigo desde tiempos tan lejanos.

Se preguntarán, ¿el fanatismo a visitar Londres?, eso mismo tiene mucho de qué hablar junto a la historia de la muerte de mi madre.

—Listo Chispas. —

Mi gato se quejaba debajo de la maleta que estaba por terminar, una mención de un festival de Halloween era tan admirado que yo misma junte mi maquillaje junto al traje de una marinera para llegar a la casa de mi mejor amiga.

—Ni una palabra de esto, Chispas. —

Sabía que mis calificaciones y los reportes de mala conducta me llevarían al camino de estar castigada. Una madrugada decidí colocar una cuerda donde podría bajar desde mi ventana, un truco viejo de las películas.

—De acuerdo, cruza los dedos, Gato. —

Me coloqué junto a la ventana donde observe las luces y los adornos del festival, donde estaba por iniciar.

                    (...)

—Ya estoy llegando, Lena.—

—Bien, Giselle, te espero. —

"COMPRA UN BOLETO Y TE REGALAMOS UN VIAJE A LONDRES CON TODO INCLUIDO"

—No, Lia, ahora no.— me repetía mil veces la misma palabra para no llegar a hacer la travesura más grande de lo que llevo de mi vida.

—Se que puedo llegar. — Eso haré.

"Tomar un folleto no hace mal a nadie"

Toco el timbre de la puerta de la casa de mi amiga y me recibe con su impresionante vestuario de princesa.

—¿y tú ropa? — pregunta Lena.

—La traigo puesta. — respondí obvia.

—No, es decir tu vestuario. —

Enseñe mi maleta donde llevaba mis utensilios para el festival, Subí las escaleras junto a Lena para llegar a alistarme.

Terminamos en un tiempo récord, obligándonos a despertar al padre de Lena que minutos antes había dormido en el sofá.

—¿Como has llevado tu nueva vida?—

—Como siempre, mi tía se sigue esforzando para que me convierta en una chica obediente. — jamás lo logrará.

—¿Jamás has intentado cambiar?—

—Cambiar es pretender ser alguien que no eres, igual que una goma de mascar cuando es redondo, es mascado por más de una hora y se hace pequeño pero jamás dejó de ser redondo y una goma de mascar. —

—Que sabias palabras. —

El sonido de un celular interrumpió nuestra conversación, mira la pantalla encontrándome con una llamada perdida de mi tía.

—Oh no..— Chispas. —Ese gato me las va a pagar.

—¿Que sucede? —

—Lena, ¿Te nombre que me escape sin un permiso?—

_____________

Ha tomado un camino diferente por lo que decidí crearla de nuevo, espero les guste la nueva idea.

Pregunta🐕:
¿Cuantos años crees que tenga Giselle?

Una carta del pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora