No soy tu zorra [pausada]

Capítulo 8

Sara Mitman.

Sabía lo que me esperaba desde que entramos al auto pero es más complicado de lo que pensé, en cuanto comenzó a hablar solo me vino a la cabeza escapar así que me levante con la excusa de querer ir al baño, esto las desconcertó  pero igual salí de la habitación decidida, abrí la puerta sin avisar y en cuanto lo hice me arrepentí, cerré la puerta otra vez y maldeci por lo bajo.

Pero igual no es algo que no haya visto antes asi que volvi a entrar tratando de mantener mis ojos de su cintura para arriba.

—Señor perdona a este pecador—alce la cabeza con los brazos elevados, volví mi vista a el y me crucé de brazos.

—Satan hablando de pecados—dijo el riendo.

Lo vi ponerse unos boxerses para luego tumbarse en su cama boca arriba.

—¿Que necesitas princesa?—baje la mirada pero luego me obligue a subirla otra vez a sus ojos verdes.

—Necesito hablar contigo—suspiré tomando valor.

—Aquí me tienes—Asentí y me prepare mentalmente para lo que viene.

—Estoy embarazada—solté en un susurro casi inaudible.

—¿Que? Habla más alto—me miró como si hablara en otro idioma que no entiende en lo absoluto.

—Estoy embarazada—hable más alto, el paso una mano por su lindo cabello y me dio una sonrisa triste—De ti—Abrió los ojos sorprendido y se puso de pie sobre su cama y de un momento a otro comenzó a saltar

Si, a saltar.

Pero luego para y me miró fijamente, buscando algún indicio de fuera una broma.

—Si Luke es tuyo—Hizo un baile raro.

 Me indico que me sentara en un sillón para dos personas —¿cuántas semanas tiene ya?-sonreí con ternura, pensaba que iba a reaccionar como en las películas...o libros de Wattpad que leí, que me abandonaria y me dejaria todo a mi pero él no es asi el es... diferente, pero no quita que sea un idiota.

Un idiota muy lindo y tierno.

—4 semanas, pensé en decirte hace unos días pero no pude y realmente no sé si debemos quedarnos con el bebé, estamos muy jovenes, iba a tomar la decisión sola pero Ash me ayudó a entender que esto no lo hice sola, asi que quiero preguntarte si quieres que tengamos este bebe juntos, porque si decides desligarte de él no podre tenerlo, simplemente no podre — no dijo nada solo me miro como pidiendo permiso para tocar mi barriga donde se encuentra la pequeña nuez. asentí dándole la aprobación en puso sus manos allí y sonrió.

—Hola Bebe—susurro—¿no creerás qué seré tan idiota para pedirle a tu madre que no estés con nosotros, verdad?

Al oír eso mi corazón se aceleró, suspire con alivio porque realmente ya me había hecho una ilusión con este bebé, y al el querer estar en esa aventura me daba más fuerza.

—Eres un idiota—bromee 

—Puedes guardar silencio estoy hablando con MI bebe—hizo énfasis en "mí".  rodé los ojos divertida—Disculpa la interrupción de tu madre, a veces es medio descortés, no te dejaré nunca porque tienes un papá muy responsable—Ahogue y él entrecerró los ojos mirándome serio y alce los brazos en rendición—Y nunca te faltara el amor de tu mama y menos el de tu papa, portate bien allí adentro—beso mi panza y morí de ternura.

—Las chicas quieren saber quien es el papa—puse una mano en mi oreja derecha y comencé a acariciarla, hago eso cuando estaba nerviosa.

—Se los diremos mañana o pasado...¿puede ser cuando nazca?—dijo inocente y nervioso a la vez, lo mire con cara de "eres o te haces?"—Bien, bien, mañana le diremos— Asentí y me iba a levantar del sillón pero cogió mi mano y me empujo de nuevo hacia atrás, lo mire confundida y él solo me coloco en su regazo y puso otra vez su mano en mi barriga, la otra alrededor de mi espalda, me acomodo en su pecho y deje que me acariciara, mientras cantaba una canción que desconocía.

—Duérmete bebé, duérmete ya, porque si no viene tu madre y te comerá—Levante la cabeza de su pecho indignada y lo asesine con la mirada, iba a levantarme pero abrazó mi cintura dejándome sin escape—no te vayas princesa, cinco minutos más—Dude pero asentí y me volví a acomodar en su pecho mire su abdomen admirando la vista—¿disfruta la vista señorita?—asentí mordiendo mi labio inferior—¿te dije que tu madre es una pervertida que siempre anda viendo mi cuerpecito? pues te lo digo ahora, ella me acosa.

—Eso es mentira, este es un hablador de los grandes—escuche su risa, levanté la cabeza de su pecho, me sumergí en sus ojos verdes sin poder creer que esto estuviera pasando.

—No te dejare—beso mi frente, luego mi nariz y por ultimo deposito un beso en mis labios—Nunca—susurro contra mis labios.

Me alejé y lo mire apenada.

—Me tengo que ir las chicas me están esperando—asintió con una sonrisa de lado y me hizo una señal con la mano de que podía irme—¿Mañana?—Lo apunte.

—Mañana—Hizo el saludo militar y salí de su habitación, llegué hasta la puerta de Ash y entre a la habitación, me senté otra vez en el piso y no dije ni media palabra.

—Ahora si, ¿quien es?

—Soy yo—mire a Ash y soltó todo lo que tenía en las manos por la sorpresa y su mandíbula estaba literal en el piso, me levante rápido y mire a Luke pidiendo una explicación y el solo se encogió de hombros, miré nuevamente a Ash mi mano ya se encontraba acariciando mi oreja con nerviosismo.

—Gracias señor—tiró un beso al techo, corrió a abrazarnos y di gracias por las amigas que me dieron, Lauren se unió al abrazo y Luke me guiño un ojo-A ver cuéntenos, ¿cómo pasó?—Nos sentamos nuevamente en el suelo e hicimos una ronda.

—Todo empezó...—comenzó a hablar Luke.