Melanie & Joe

Capítulo 2.

*Melanie

- Ah, claro.- Sonríe.- Entonces hagamos algunos ejercicios y cuando acabemos comparamos respuestas ¿Si? – Asiento en respuesta.

Contestamos algunos problemas de nuestro libro de ejercicios, media hora después él se recarga en su silla y me mira en silencio, supongo que es para avistarme que ya termino, no puedo evitar sentirme nerviosa, me apresuro para contestar los que me faltan y cuando acabo los reviso con la mirada antes de darlos por terminados.

- Ya terminé.- Digo, toma mi libro y comienza a comparar nuestras respuestas.

- Tienes tres mal.- Afirma cuando termina de revisarlos.

- ¿Como lo sabes? Tal vez tú los tienes mal.- Sonríe con arrogancia.

- Los míos están bien, corrige los tuyos.- Acaricio mi frente tratando de ocultar lo mucho que me irrita, vuelvo a revisar mi libro con la mirada, pero aun no sé en donde me equivoque.

- Bien, ¿cuales están mal? – Le pregunto de unos minutos de soportar su atención en mi.

- No te diré, hazlos de nuevo para que veas en que te equivocaste.- Suspiro.

- Esta bien, lo hare.

Siento su mirada en mi mientras verifico cada uno de los 15 ejercicios, al final, lamentablemente él tenia razón, tengo tres mal, corrijo los primeros dos sin dificultades, pero con el último me toma más tiempo, las operaciones que hago no me dan el resultado correcto y gracias a su mirada me pongo más nerviosa.

- ¿Ya los corregiste? - Rompe el silencio.

- Ya casi.

- Ya se acabo la hora.- Reviso mi celular y tiene razón, ya pasan de las 2 de la tarde.

- Puedes irte si quieres.- Respondo sintiendo el ardor en mis mejillas.

- Esperare a que termines.- Ofrece en voz baja, es obvio que quiere sonar tranquilo y amable, pero en el fondo debe estar molesto por hacerlo perder el tiempo, hasta yo me siento molesta por eso.

- No hace falta, el tiempo termino.

- Insisto, termínalo, no te sientas presionada.- Pongo mi atención en el libro y cinco minutos más tarde, cuando ya no se me ocurre que hacer para responder el ejercicio, me rindo.

- No sé cómo responder este.- Señalo el problema y me sonríe, genial, ahora demostré que si necesito su ayuda.

- ¿Quieres que te lo explique? – Asiento, ya perdí mi dignidad, ¿qué más tengo que perder?- En realidad es muy sencillo, lo único que tienes mal es este signo, lo pusiste como negativo, en lugar de positivo, por eso al momento de multiplicar te sale mal el resultado.

- Ya veo.- Malditos signos, borro mis operaciones y las hago de nuevo hasta obtener el verdadero resultado.

- Ahora ya tienes todos bien.- Dice al ver la respuesta.

- Si, gracias.- Respondo mientras comienzo a guardar mis cosas.

Salgo de la biblioteca guardando silencio hasta que Joe comienza a seguirme y camina a mi lado haciéndome sentir incomoda, camino más rápido y él me sigue el paso.

- ¿Llevas prisa? - Pregunta a mitad del pasillo.

- Algo así.

- Podría llevarte a casa, si quieres.- Me detengo para verlo de frente y me imita.

- No es necesario.

- ¿También veras a tu novio hoy? – Rasco mi cabeza con nerviosismo, ¿tiene que ser tan... curioso?