Estado

36 5 0
                                    

"Soy adicto a beberte." Le dije.

"¿Cómo piensas beberme si no soy estado líquido?"

"Es muy fácil: primero me acerco a tus labios
y segrego cada parte de color rojo,
luego mientras clavo mi mirada en tus ojos,
sentirás como te beso hasta que no veas nada
que no sea tu cordura que acabo de beberme."

"Entonces yo también quiero beberte."

"Bébeme entonces, hasta que no quede ni una sola gota de mí en mi cuerpo,
hasta que te hayas bebido mi nombre,
hasta que solo pueda ver el mar mientras
me llamas para que vuelva a tierra firme."

Dedicado a la persona que más estropea la poesía.

Memorias MelancólicasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora