Capítulo 1

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Desde pequeño, siempre he sentido que tengo el deber de proteger a los demás, esa es mi misión, las injusticias son una de las cosas que no puedo tolerar. Decidí ser policía por muchas razones, lo anterior fue una de estas.  Ahora mismo he sido ascendido a agente del gobierno, debido a mi esfuerzo y dedicación por seguir las reglas y hacerlas cumplir, porque así es como se debe vivir y porque ese es su objetivo, traer paz...

- Disculpe señor Fox, ha sido llamado por el superior, al parecer tiene que hablar algo muy importante con usted.

-Gracias, informele que voy en camino.

Cuando llegué a la oficina del superior un grupo de personas, al parecer muy importantes, salieron de ella. 

-Fox, adelante. Por favor cierre la puerta.

Pasé a la oficina y todo se encontraba oscuro, solo una pequeña  luz del sol se podía ver a través de las cortinas. 

-Antes que nada dejeme felicitarlo por su gran paso hacia adelante, y agradecerle por todos los años de esfuerzo y dedicación que le ha ofrecido a esta ciudad.  Esta haciendo un buen trabajo.

- Estoy muy agradecido con usted Superior Meier.

- La misión que le voy a pedir es muy delicada, pero confió que alguien como usted lo podrá hacer eficientemente. Se trata de Antonio Gutierrez, líder del partido político estrella roja, al parecer esta incitando a la revolución en las afueras de la ciudad y  planea hacer un golpe de estado. No podemos hacer nada públicamente debido a que no tenemos pruebas suficientes, si hacemos algo, la gente nos delatará diciendo que estamos violando su libertad de expresión, y así Gutierrez tendrá éxito.

-Entonces, ¿Me pide que lo investigue y encuentre pruebas de lo que esta haciendo?

-Correcto. Gutierrez se escabulle entre el pueblo, nunca se sabe donde hará su siguiente aparición, tiene muchas paginas web que incitan a que lo sigan, pero están bien protegidas y no podemos hacer nada con eso. Sería extremadamente difícil pedirle que lo haga solo, es por eso que le asignaré a alguien para que lo ayude.

- Entendido, ¿En que estación me reuniré con él?

-No es un policía o un agente como usted.

-¿Un investigador privado?

-Lo que va a escuchar y ver es altamente confidencial. - Meier hizo una pausa y alzó la voz - Háganlo pasar.

Delante mió se encontraba un joven con una mirada intensa color café, tez trigueña y cabello oscuro. Estaba esposado y no decía ni una sola palabra.

-Este es "Cero", integrante de la banda 1970, es uno de los mejores hackers de este país. Al parecer ni bien aprendió a hacerlo, eliminó de la base de datos del gobierno toda su información. Le hicimos muchas preguntas acerca de él y su banda, pero siempre esta callado. 

-Son asesinos...

-Él es el único que puede ayudarte, puedes recurrir a la violencia si es necesario, pero por ahora no tenemos otra alternativa. Se le ha depositado chip en la muñeca, en caso quiera escapar el chip botará un veneno que lo lleve lentamente a la muerte.  Puedes activarlo con el reloj que se te va a entregar, o si se resiste puedes darle descargas eléctricas, también puede hacer eso. Si queremos que este país este seguro y no hayan muertes, tenemos que detener a Gutierrez cueste lo que cueste. Absolutamente nadie debe enterarse que Cero esta trabajando contigo. Se quedará en tu casa, te daremos los equipos necesarios para la vigilancia. Eso es todo, puedes retirarte.

Salí de la oficina sin poder terminar de asimilar la idea... Un asesino bajo el mismo techo, tengo que arreglarmelas para que colabore y terminar rápido con esta misión. Me dirigía hacia mi auto  pensativo, tanto así, que no me había dado cuenta de que Cero iba detrás mío y me seguía tomando su distancia. Llegamos al estacionamiento y me senté en el asiento conductor. Le pedí a Cero que se sentara en el asiento copiloto. Entonces emprendimos la ruta hacia mi casa.

-Soy Ethan Fox, puedes llamarme Ethan o Fox cualquiera de los dos...

El silencio se hizo incomodo, pero después de unos minutos respondió

-Llamame Cero.

-Cero, ¿No tienes un nombre o apellido?

-...

-Esta bien, te llamaré Cero.

Cero miraba hacia la ventana con la mirada pérdida, sus delgados brazos reflejaban que no había comido muy bien, su presencia y silencio me intrigaba. No aparentaba ser uno de los criminales mas peligrosos de la ciudad.

-¿Te gustaría comer algo cuando lleguemos? Parece que no la has pasado bien encerrado.

¿Por que estoy siendo amable con él? ¡Cierto! Estamos en una misión, somos un equipo, por eso necesito aprender más de él, tengo que obtener tanta información como es posible para que todo salga bien. 

-...

-Llegamos. Aquí es donde vas a vivir ahora. Dejaré tu pasado a un lado, espero que nos llevemos bien y que terminemos esto cuanto antes. 




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