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Era muy necesario y obvio que llegaría un adiós. Cada vez nos dábamos mas cuenta de que lo que hacíamos ya no era...lo que solía significar.

Estábamos creciendo y ya habíamos tenido varias peleas entre todos. Los acordes, las notas, el tiempo, lo poco o mucho que nos veíamos. Las cosas se volvían cada vez mas y mas que solo compromisos, eran tediosas obligaciones. ¿ Cómo habíamos llegado a eso? No nos dimos cuenta. Al principio solo eramos nosotros tocando un poco de mierda, después ya eramos una banda bien situada con conciertos en Japón y toda la cosa.
Intenté de mil formar cambiar mi exterior para demostrar que mi interior también cambiaba.
Ya no nos reconociamos. Ninguno de nosotros. Nos convertimos  todo lo que prometimos jamás hacer. Seguíamos teniendo los mismos nombres, pero al mirar al espejo por las mañanas era difícil determinar quien estaba al otro lado de la habitación.

Jamas existió un romance, tal vez si lo intentamos pero, es obvio. Ninguna relación podía funcionar con nuestros estados emocionales. Por mas que nos amáramos o quisiéramos. Llenamos los espacio del otro de una manera casi artística, pero no podíamos estar juntos. Entonces dejamos de buscarnos.

Dejamos de hacer música juntos, dejé de escuchar las risas en conjunto. Ya no existía lo que tantos años nos dio todo lo que teníamos.
Era difícil pensar que simplemente había desaparecido pero no quería volver a desempolvar esos uniformes y memorias. Estaba decidido. Todo lo que hice en ese tiempo fue en empeorar a pasos agigantados, ya estaba dispuesto a cambiar.
Ser alguien mas nuevo y mas lleno de energía.

Para esto tuve que decir adiós, y claro que dolió. Pero ya no existía nada mas que hacer. La decisión estaba tomada. Sin importar cuantas lágrimas cayeran; ya fueran mías o no, no iba a regresar.

We Fucking End It (Frerard)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora