1° Nota Mental

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CUIDADO CON LOS HUMANOS.



-¡Baja tu trasero de ahí arriba Sara!- dije mientras cruzaba mis brazos y la miraba con una mueca que esperaba que pareciera severa.


-No quiero gracias, estoy muy cómoda aquí arriba.- respondió ella con desdén


-¿Desde cuándo los árboles son cómodos?


-Desde que lo decidí yo, ¿por?- puso un tono de voz obvio que me molestó internamente


-¡Sara, te vas a matar!- le dije yo por decimotercera vez.


-Que estoy trabajando...


-¡Deja de hacer el tonto y baja!


Ya me estaba empezando a cansar esta conversación sin sentido. ¿Tan difícil es entender que se puede caer y hacer daño? Yo solo quiero ayudarla, pero no me hace caso


-Calla, que necesito concentración.


-¿Concentración para qué?


-¡Para podar!


-De acuerdo, ¿pero podrías no cortar la rama en la que estás sentada?- intenté que entrara en razón. Si la pasase algo, adiós plan.


-Vale, pero podas tú el árbol tiquismiquis.


-¿Tiquismiquis?


Encima me insulta... ¡Yo solo quiero ayudarla! La mire enfadada. Insolente. Eso era lo que era.


-Déjalo, ¿me lo podas tú?


-¡NO!


-Pues seguiré con lo mío.


-...-Guardé silencio mientras ella seguía en sus trece. Intentando demostrar una despreocupación que no tenía. Pues por dentro me estaba muriendo de los nervios.


-¡Anda pero si la rama se está doblando!- empecé a sudar fríamente. Restregaba mis manos contra mi pantalón, para quitar parte de la humedad.


-¡Te vas a caer!


-¿Y?


-¡Que luego tienes que subir!


-No pasa nada, hago piernas.- me estaba mordiendo las uñas, de forma inconsciente, pero es que... me ponía enferma.

El Hada Del ObjetivoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora