Narra Sam:
Otro día nublado en Londres, a veces me asustaba cuando salía el sol, la verdad. Me removí de mi cama y miré el pequeño cuadro que tenía con la foto de mi madre a mi derecha.
Cuanta falta me haces y lo peor del caso es que jamás te conocí —Pensé
Me levanté y me fui a ducharme. Me vestí con unos vaqueros negros, una sudadera amarilla que decía "You Make Me Strong" unas converse amarillas con las agujetas negras y recogí mi pelo en una trenza de 4 para bajar a desayunar.
—Buenos días papá.—Saludé a mi padre quien estaba haciendo tostadas francesas.
—Buenos días cariño ¿Cómo amaneciste?.—dijo mi padre besando mi mejilla
—Bien ¿y tú?.—Dije dándole una sonrisa.
—Bien.—dijo este dándome una sonrisa
—Uhm tostadas, realmente las amo.—dije dándole un mordisco.
—Los Jonhson amamos las tostadas francesas—dijo mi padre riendo... —Hoy iré a llevarles flores a las cenizas de tu madre.—dijo mi padre y el ambiente se puso un poco tenso.
—Está bien, recuérdale que la amo mucho.—dije con un pequeño nudo en la garganta.
La verdad es que cada vez que papá mencionaba a mamá, me ponía triste.
—Está bien. Te amo mucho hija.—dijo mi padre lo que causó que se me saliera una lágrima.
—También te amo papá.—dije dándole una sonrisa.
Mi teléfono empezó a sonar.
—Hola.—dije tomando la llamada
—Hola Sam, soy Mike ¿te desperté?.—contestó Mike.
—No, no lo hiciste ¿Cómo estás?.—dije mientras tomaba otra tostada.
—Estoy bien ¿y tú?.—contestó Mike
—Bien —dije
—Sam, te llamo porque quería saber si quisieras ir conmigo por unos helados al centro comercial.—dijo Mike y hasta pude sentir una pizca de nerviosismo en su voz.
—Sí claro.—dije y sonreí.
—Pasaré esta tarde por ti.—dijo Mike
—Está bien adiós.—dije y cerré la llamada.
—¿Quién era?, Si se puede saber claro.—dijo mi padre recogiendo la mesa.
—Era Mike, me invitó a ir por unos helados al centro comercial en la tarde y acepté.—dije
—Oh, pensé que era Harold. ¿Cómo van las cosas con él?.—preguntó mi padre volviéndose a sentar frente a mi.
—No quiero hablar de eso, lo siento.—dije bajando la cabeza.
—No te preocupes amor, siempre me puedes contar lo que sea siempre y cuando estés dispuesta.—dijo mi padre guiñandome un ojo... —iré por las flores, suerte con Mike.—dijo mi padre saliendo de la cocina
—Te amo pa.—le grité
—Yo más.—contestó.
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Ya en la tarde:
Me empecé a vestir para salir con Mike, opté por una falda rosa clara con rayas café y una camiseta corta con mangas largas que tenía un sol negro con unas Vans, tomé una cartera de tiro largo y mi pelo lo dejé igual.
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Odio Amarte Mejor Amigo
Teen Fiction-Amarte me hace daño.-Susurré mirándolo fijamente