Empeorando. (Katniss & Peeta)

Esta tan cerca y a la vez tan lejos

POV Prim

Siento como mis musculos se despiertan, igual que mi cerebro. Abro los ojos, estoy en una habitacion, lo unico que la ilumina es la luz del sol que pasa por un ventanal mediano, muy parecido al de mi casa, pero este es mas pequeño, intento mover mis piernas para pararme, y lo logro, empiezo a caminar pero algo me ancla, mi pierna izquierda esta esposada, me rindo y me quedo sentada apoyando la cabeza el la pared de cristal que divide en dos la habitacion, el otro lado es muy parecido al mio, pero aun no entiendo en donde estoy y quiero saberlo. Volteo mi cabeza hacia  el ventanal, cuando lo hago siento que un dolor me recorre la espalda entera, suelto un pequeño grito ya que el dolor es muy intenso, lo unico que logro ver antes de obligarme a mi misma a poner la cabeza en mi anterior posicion, es el edificio cede de Los Juegos del Hambre, cuando vine por ultima vez aqui tenia 6 y pasamos por el, mama se mareo cuando lo vio y no me quiso decir porque, le llamaban "Centro de entrenamiento". Estoy en el Capitolio

Intento gritar para que me suelten pero hasta hablar se vuelve doloroso, hace demasiado calor, y tengo demasiada sed, mi garganta se esta quemando y me siento como si mi cuerpo ardiera, no tengo un termometro pero se que tengo la fiebre alta. Quiero llorar, pero no lo hare, llorando no se llega a ningun lado, tengo que buscar como salir de aqui, o al menos parar mi sufrimiento. Estudio todas las posibilidades de escapar pero estoy esposada y la puerta esta blindada. Con cada idea me siento peor asi que me uedan dos opciones: Puedo esperar que me mate la fiebre o ahoracarme con la cadena de la esposa que tiene mi pierna. Recuerdo a mis padres, que deben estar buscandome seria un acto de cobardia suicidarme, si logran llegar aqui no quisiera que me vieran muerta, elimino la idea de mi cabeza. En frente de mi hay un reloj digital (que no habia visto antes), son las 11:45 am y hoy es... No puede ser crei que era mañana... 14 de abril... es mi cumpleaños. A estas alturas ya no me importa, quiero y necesito salir de aqui o almenos tomar agua ayudaria. Me quedo mirando al suelo fijamente, sin pensar en nada. Un ruido me despierta es del otro lado del cristal.

Veo como tiran a un muchacho al suelo, esta sin camisa y su espalda tiene cortes irregulares y marcas, es obvio que le han dado con un latigo, el cristal no es muy grueso asi que logro escuchar sus gritos de dolor, le presto mas atencion a lo que dice, grita palabras.

-¡No les dire nunca nada! ¡Porfavor no le hagan nada a ella!- veo como un latigo de casi dos metros le golpea en la mejilla y el gime, luego la puerta se cierra- ¡Prim! ¡Prim! ¿donde estas?- Grita de nuevo, y lo comprendo, el muchacho es Finn. Lagrimas se asoman por mis ojos, las pocas fuerzas que tengo las uso para golpear e cristal, para que sepa que estoy aqui el mira hacia el cristal y noto un poco de esperanza en sus ojos pero luego gira de nuevo su cabeza con descepcion, como si no me hubiera visto, y lo entiendo. Cuando mis padres y yo vinimos a Capitolio hace unos años, fuimos al "Museo de Cristal", ahi habia un cuarto con dos puertas dividido por un cristal, igual que este, mi papa se metio del lado derecho y yo del lado izquierdo yo lo veia a el pero el no me veia a mi. Quizas el cristal que nos separa a Finn y a mi, yo lo veo pero el no me ve a mi. Tampoco puede escucharme como yo a el. Mi unica solucion es romper el cristal. Noto que lo que une la cadena de la esposa de mi pierna a la pared esta oxidado, alugunos tornillos estan afuera. ¡Eso es! lo halare para romper el cristal con el metal. Halo con fuerza, creo que la adrenalina de poder hacer algo opaca mi dolor y sigo halendo. Los tornillos saltan hasta que solo queda uno, reprimo toda la fuerza hasta que lo logro, lo he arrancado del muro, ahora ya puedo pararme y caminar.

Pongo el pie en direccion al cristal y le doy con la cadena le hago una grieta pero no lo rompo, vuelvo a gorpearlo y esta se derrumba, me cubro con los brazos para no cortarme la cara. Cuando ya esta todo abajo cojeo como puedo hacia Finn que intenta moverse pero no lo logra. Tomo su cara entre mis brazos.

-¡Finn! ¡Finn!, mirame, mirame estoy bien, estoy aqui, tranquilo estoy aqui- No puedo evitar llorar al verlo, esta demacrado y tiene cortado el labio inferior, y uno de sus ojos esta morado. Lo abrazo y el me corresponde

-Prim yo..

-Shhh- le tapo la boca con mi dedo indice- Tenemo que idera como salir de aqui vale?- el asiente levemente. Antes de yo poder hacerlo, veo como los ventanales se cierran y la pequeña luz blanca que iluminaba el salon explota tirando chispas hacia nosotros. Las chispas son la ultima cosa brillante que veo, porque ya no hay luz. En pocas palabras: Estamos ciegos