❀ c a t o r c e ❀

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Sentado frente a su ordenador, Jungkook observaba el retrato de aquel supuesto hombre que inventó una enfermedad ridícula. Había escuchado de Stendhal antes, del escritor francés , pero jamás de aquella enfermedad que nadie conocía.

Recordó lo que le había dicho Lisa el día anterior.

"Stendhal es una fobia producida por la belleza en exceso. Puede referirse a la belleza del arte, así como también a el de una persona, como es tu caso."

Inclusive después de haberlo pensado toda la noche anterior y haberlo hablado con Jimin y Taehyung, seguía pareciendo una broma o un chiste. Sin embargo, también tenía mucho sentido.

Su habitación estaba a oscuras. Aquella mañana, Jungkook no había realizado su rutina diaria, no había reproducido su lista de música ni había corrido las cortinas color vino para que la luz entrara. Simplemente se había quedado ahí frente a su computador, observando a ese tipo al cual comenzaba a odiar.

Su madre llamó a su puerta, pero Jungkook no reaccionó rápidamente.

-Jungkook, cariño- ella asomó su cabeza por la puerta. Parecía preocupada-. Te he llamado varias veces ya para que bajes a desayunar, se te hace tarde para ir a la escuela... Por Dios, ni siquiera te has vestido para irte, ¿qué te pasa?

Jungkook cerró de golpe su ordenador y se puso de pie. Ignoró a su madre, por primera vez en su vida. Se sentía traicionado, confundido y un poco tonto, por comportarse de aquella manera cuando el único culpable de aquello era él. Al final de cuentas, era él quien estaba enfermo, era él quien jamás se podría enamorar sin antes desmayarse un par de miles de veces.

Tomó una ducha rápida y se colocó su uniforme. Estaba agotado, pues no había logrado dormir ni un poco.

En el piso de abajo, todos estaban en silencio también. No había The Beatles, ni Mozart, solo el sonido de los cubiertos golpear contra los platos. Sus padres lo miraban de manera cautelosa. Por lo general, Jungkook siempre estaría hablando de algo, cualquier cosa. Sin embargo, aquella mañana estaba extrañamente callado. Incluso su aspecto era diferente, con pequeñas bolsas bajo sus ojos y el cabello sin peinar.

-Hoy me iré en bicicleta, espero no haya problema en eso- ambos padres se miraron sorprendidos. Ya no sabían qué hacer o decir para saber qué estaba pasando con su hijo aquel día.

-Pero, kookie, ¿ha paso algo en la escuela ayer? ¿te has peleado con Jimin y Taehyung?

Jungkook frunció el ceño y miró a su madre confundido- ¿por qué tendría eso que ver con el hecho de que quiero irme en bicicleta a la escuela hoy?

-Hey- su padre alzó un poco la voz y lo miró con los ojos entrecerrados-, no le hables así a tu madre. Puedes irte en bicicleta si así lo prefieres, no hay nada de malo en eso.

Él asintió lentamente y quedó en silencio todo lo que restó del desayuno.


Yoongi reparó de que había algo extraño en Jungkook desde que lo vio caminando por los pasillos aquella mañana. Iba solo, algo muy extraño en él, porque siempre andaba rodeado de sus amigos. Parecía un poco desorientado y se agarraba fuertemente a su mochila cuando alguien lo empujaba. Intentó hablarle, pero Jungkook huyó en cuanto lo vio.

Luego, cuando llegó a la biblioteca y no lo encontró ahí, todo se le hizo más raro. Lo buscó en la cafetería con sus amigos, pero ellos tampoco lo habían visto desde la mañana, alegando que los había evitado. Los tres decidieron ir a buscarlo por separado y mantenerse en contacto por si alguno lo encontraba.

Yoongi fue directo a la enfermería que estaba cruzando el campus. Algo le decía que Jungkook tal vez estaba enfermo o se sentía mal. Y ahí lo encontró. Estaba sentado en una banca con la mirada agachada y jugando con sus manos. Se veía como un niño pequeño perdido y Yoongi casi se derrite ahí mismo. Caminó hasta él y se sentó a su lado, Jungkook ni siquiera se dio cuenta que él estaba ahí, hasta que Yoongi le tocó un mechón de su cabello sin poder evitarlo.

Al levantar la mirada, Jungkook se sorprendió al verlo ahí y más considerando la distancia que había entre sus rostros. Yoongi sonreía ligeramente y le toco la nariz con su dedo índice.

-Te encontré, souris- su voz era suave, tal como su mirada-, ¿acaso estabas huyendo de mí?

-N-no, solo me dolía un poco la cabeza- murmuró el menor apartando la mirada rápidamente.

-¿Y ya te dieron medicamento?- inquirió preocupado el mayor. Jungkook asintió lentamente-. Bien, entonces vamos. Tus amigos están muy preocupados por ti.

Y sin decir más, Yoongi se levantó de la banca y, tomando a Jungkook de la mano y entrelazando sus dedos, lo llevó de vuelta a la escuela.

Para Jungkook, Yoongi era como un gato. Tenía la mirada de uno, un poco perezoso y era una buena compañía. Pero, sobretodo, porque no importaba las veces que Jungkook se intentara alejar de él, Yoongi siempre lo encontraría.

{...}

ahsjsa que cursi me pongo a veces. omg, abril actualizando dos veces en un día, pidan un deseo woakx por si no entendieron el último párrafo, jk hace referencia a un gato bc "souris" en francés es ratón, entonces como yoongi es una gato y jk un ratón es como que lo puede cazar grr stoi lok, bai

stendhal + yoonkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora