El olvido.

2.- un raro encuentro.

VÍCTOR

–Víctor, debo irme tengo una junta de trabajo muuuy importante–dice mi padre con autoridad–.

–¿De nuevo?, padre no se si lo recuerdes pero hoy es trece de Octubre.

–¿y eso que?–interroga–.

–hoy son...dos años desde lo de mi madre–digo con vos débil, inmediatamente mis ojos se llenan de lágrimas –.

–¿y a quien le importa?, Víctor ella ya esta muerta, ella no mantendrá viva a esta familia, a nuestro apellido. Si llorarle a un muerto te da dinero, entonces ve y llorale a todo el cementerio. Además mirate ya vas a llorar....otra ves –sonrie burlantemente–.

–¿como puedes decir eso? ¡ella fue tu esposa! ¡tu fuiste quien la eligio!–contesto alzando la vos–.

–Si hubiera sabido que me daría un hijo tan irresponsable, cobarde y despreciable, creeme Víctor que jamas la hubiera elegido a ella, pero mirate, aquí estas tú, con tus constantes molestias. Sabes perfectamente que mi trabajo consta de dar seguridad a las personas y salvar vidas, es lo que elegí y es lo que tu también elegiras.

–¡No! Te equivocas tu trabajo no consta de dar seguridad a la gente, tu trabajo consta de mandar a tus criados a arriesgar su vida para salvar gente, mientras tu descansas en tu oficina. Y de verdad, lamento tanto el que hubieras puesto los ojos en mi difunta madre Esmeralda y que me hayan procreado.–mi vos comienza a quebrarse–.

–llora todo lo que quieras, ya me voy ¡ahhh! Y que sea la ultima ves que me hablas así porque para la otra habrá consecuencias ¿vale?–dicho esto sale por la puerta principal de la casa–.

Las lágrimas se apoderan de mi, él tenia razón todo es mi culpa, el sufrimiento de mi madre antes de morir fue por mi culpa, ella debió haber permitido que ellos me matarán.

Han pasado dos años desde que mi madre, la única mujer que me cuido y defendió de mi padre, muriera. Así es, a ella la perdí a la temprana edad de 8 años. Desde ahí tuve que independizar me y crecer rápido pues el apoyo de mi padre nunca lo obtuve. Es un hombre ocupado pues es líder del ejército de los estados unidos, pero sin razones–aunque el dice tener muchas– me odia y yo lo odio a él. No diré que todo este tiempo he logrado sobrellevar la situación solo mi mejor amigo Richard Parker que es dos años mayor que yo, el ahora tiene 12 años me ha apoyado en todas las situaciones y eso es porque el también a pasado por algo similar a lo mio, solo que el actualmente no tiene ni madre ni padre.
Fue con el con quien comencé a de alguna manera u otra “sobrevivir" aunque eso incluye navajas, drogas y cigarros. Algo raro para muestra edad pero cierto.
De echo fui yo quien lo incito a cortarse por primera ves.

Busco a richard en mis contactos  y le pongo a llamar...

–hola Víctor ¿todo bien?.

–no tanto–sonrio nostálgicamente– ¿podemos vernos?.

–claro. Se para donde va todo esto, hoy es 13...–dice en tono bajo y las lágrimas vuelven a mis ojos–.

–si, ¡maldita sea! me siento mal, me siento sucio, ¡necesito verte!.

–vale, ¿que te parece en la cafetería merry's coffee a las 4?

–si, si me parece genial–respondo llorando–.

–hey, ya no llores ¿okey?

–okey.

Corto la llamada y miro la hora son las 3:20. Únicamente tomo mi sudadera y me marcho de mi casa camino a la cafetería. Quiero llegar primero y pensar las cosas solo, en un lugar que no sea mi asqueroso “hogar".