Tus recuerdos atormentan mis pensamientos, no quiero que me atormenten. La culpa no es tuya, es de la sombra que creé pensando en ti: el experimento iba bien, pero una incógnita en mi fórmula hizo que se fuera de mis manos. Yo estoy bien, mi carcasa está genial, pero mi mecanismo está siendo saboteado por tu sombra fuera de control, no sé en qué estaba pensando cuando empecé, supongo que las voces que eché fuera son las que me obligaron a crear aquel monstruo. Aunque hay una cura, no es finalizados. Me la he de ir inyectando por intravenosa cada día para que este monstruo se calme, asombrosamente reacciona a tu presencia, son como unos narcóticos, aunque, como toda droga, tiene efectos secundarios. Uno de ellos es transformar mis rios en océanos, que reaccionan a la marea alta, posiblemente ya no reaccionan como antaño, pero noto el vacío. Cada vez mengua, y me vuelvo menos adicta a tu presencia, pero mi adicción nunca erradicará del todo, no es temporal, es hasta la eternidad, o hasta que alguien ocupe tu lugar.
Desde mi punto de vista no oculto muy bien mis sentimientos, los veo impregnados en la tinta seca, aunque supongo que nadie notaría otra tonalidad que no sea el azul.
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Mis sentimientos plasmados con tinta de lagrimas ensangrentadas.
RandomAquí habrán pequeños One-shots, pequeños fragmentos que escribí en una libreta, en algunos son mis sentimientos más putrid y en otros son historias sin un final, o sin un principio, quién sabe.