Esperanzas perdidas.

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-Te quiero.

-No, no me quieres.

-He dicho que te quiero, joder! Porque te cuesta tanto creerlo?

-Porque no es verdad no me quieres. La quieres a ella.

-Ella no es nadie para mi.

-Ella no opina lo mismo.

-Me estas empezando a hartar-dijiste y me agarraste de el cuello.

-Para! Jose Antonio no puedo respirar!

-Me da igual. -me soltaste.

-Y tu dices que me quieres.

-Ana, mira-dijiste irritado, conteniendo tu rabia. Cerraste tus puños con fuerza.

-Dejame en paz-y me fui corriendo, mientras lagrimas se deslizaban por mis mejillas.

Me desperte empapada en sudor, solte un grito ahogado. Todo habia sido un sueño. Un sueño muy real, quizas demasiado. No terminaba de comprenderlo, quien era "Ella"?.

- Ana?- Era Maria, se habia asustado por mi grito.- Estas bien?

-Si, si cariño. No pasa nada, ha sido solo una pesadilla.

-No puedo dormirme.

-No has dormido nada?

-Nada de nada.

-Ven, tumbate aqui.-le hice un hueco en mi cama.-todavia no han llegado los papas?.

-No, creo que es por eso por lo que no puedo dormir.

Al rato vimos que ninguna conciliaba el sueño asi que fuimos al salon y pusimos una peli. Yo hice palomitas y saque una bolsa de chuches que tenia escondida para su cumpleaños, supongo que ya compraria mas otro dia. Al final acabamos las dos dormidas.

A LA MAÑANA SIGUENTE

-Eh, Maria, venga te he preparado el desayuno.- ese dia no habia colegio asi que la deje dormir hasta las 11 de la mañana.

Le habia preparado tortitas, bacon y huevos revueltos. Era lo menos que podia hacer, se quedo dormida sobre las cinco de la madrugada. Debia estar agotada y preocupada.

Yo no comi nada. Estaba agobiada.

De repente mi telefono comenzo a vibrar, lo que lo hcia girar levemente en la mesa. "Aamama", iba a cogerlo pero antes mire a mi hermana, desayunaba tranquila, ni siquiera miro el telefono, era lo mas normal del mundo. Al ver que no lo cogia me miro.

-No lo vas a coger? Debe de ser mamá.-su pequeña y dulce carita se oriento hacia la ventana.-tienen que estar llegando.

LLAMADA

-Mama?Donde estas?

-Estamos en el hospital cariño. Escucha, la enfermedad de Flora ha ido a mas. Esta muy mala, seguramente pasaremos el dia en el hospital, cuida de  Maria. -empezo a llorar silenciosamente y colgo.

FIN DE LLAMADA

El parpadeante pitido del final de la llamada resonaba con fuerza en mi oido. Me habia quedado paralizada. Intente ocultar mis ganas de llorar pero no pude. Mis lagrimas estallaron bajo la mirada fija de mi hermana.

-Se ha muerto?Dime que no se ha muerto, por favor.- y se acurruco a mi lado.

Un pasado erróneoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora