Harry Potter y la piedra filósofal (Rayita)

Prólogo

"Hola mi nombre es _______ Longbottom, soy hija de Frank y Alice Longbottom. Vivo con mi abuela Augusta Longbottom y mi querido hermano gemelo Neville Longbottom. ¡Al fin! tengo 11 años y empezaré mi primer año en Hogwarts, esperé este día toda mi vida. Por siglo los Longbottom han ido a Hogwarts y para mi es un honor hacerlo, espero conocer a muchas personas ya que aquí no tengo amigos solo a Neville. Hace unos día el tío abuelo, Algie nos regalo unas mascotas por ser aceptados en Hogwarts. A Neville le obsequió un sapo al que le puso Trevor y a mi me obsequió una lechuza a la que le puse Moon ya que es un gris brillante cómo la luna..."

-La abuela dice que te apures que ya vamos a salir.- Apareció Neville en la puerta de mi cuarto. Rápido me volteé para que no se acercara a leer mis cartas, normalmente no se las envío a nadie pero me gusta hacer que si. -Puedes avanzar, no quiero que la abuela se ponga a pelear.-

Neville es un chico de rostro redondo con los dientes un poco grandes, es un poco más alto que yo, también es un poco torpe y tiene una notoria falta de memoria. No nos parecemos en nada, somos polos opuestos pero cómo quiera lo amo.

-Esperé este día toda mi vida ¿sabes?- Dije bajando las escaleras.

-Lo sé.

Cuándo llegamos al Callejón Diagon estaba repleto de Magos y Brujas con sus hijos. Al parecer todo el mundo decidió salir de compras hoy.

-Iremos a comprar los uniformes primero, ya que no está tan lleno el lugar.

-Abuela, luego que compremos los uniformes yo puedo comprar mi varita con mis ahorros. -Hablé entrando a la tienda con Neville a mis espalda, a veces pensaba que a Neville le abochornaba estar con la abuela pero eso no importa.

-No deberías de gastar tus ahorros, pero si lo deseas asi adelante.

Luego de un rato esperando a comprar los uniformes revisé la lista que nos habían enviado con la carta de aceptación.

COLEGIO HOGWARTS DE MAGIA
UNIFORME
Los alumnos de primer año necesitarán:
- Tres túnicas sencillas de trabajo (negras). √
- Un sombrero puntiagudo (negro) para uso diario. √
- Un par de guantes protectores (piel de dragón o semejante). √
- Una capa de invierno (negra, con broches plateados). √
(Todas las prendas de los alumnos deben llevar etiquetas con su nombre.)
LIBROS
Todos los alumnos deben tener un ejemplar de los siguientes libros:
- El libro reglamentario de hechizos (clase 1), Miranda
Goshawk. √
- Una historia de la magia, Bathilda Bagshot. √
- Teoría mágica, Adalbert Waffling. √
- Guía de transformación para principiantes, Emeric Switch. √
- Mil hierbas mágicas y hongos, Phyllida Spore. √
- Filtros y pociones mágicas, Arsenius Jigger. √
- Animales fantásticos y dónde encontrarlos, Newt Scamander. √
- Las Fuerzas Oscuras. Una guía para la autoprotección,
Quentin Trimble. √
RESTO DEL EQUIPO
1 varita.
1 caldero (peltre, medida 2). √
1 juego de redomas de vidrio o cristal.
1 telescopio.
1 balanza de latón. √
Los alumnos también pueden traer una lechuza, un gato o un sapo.
SE RECUERDA A LOS PADRES QUE A LOS DE PRIMER AÑO NO
SE LES PERMITE TENER ESCOBAS PROPIAS.

Los libros ya los tenemos, algunos están un poco viejo pero eso no importa. Lo demás la abuela lo irá a comprar yo solo iré a comprar mi varita.

La última tienda era estrecha y de mal aspecto. Sobre la puerta, en letras doradas, se leía: «Ollivander: fabricantes de excelentes varitas desde el 382 a.C.». En el polvoriento escaparate, sobre un cojín de desteñido color púrpura, se veía una única varita.

Cuando entré, una campanilla resonó en el fondo de la tienda. Era un lugar pequeño y vacío, salvo por una silla larguirucha. Habían miles de estrechas cajas, amontonadas cuidadosamente hasta el techo.

-Buenas tardes. - Dijo el anciano con voz amable, saliendo de atrás de unos estantes.

-Hola.- le respondí amablemente.

-Eres una Longbottom ¿cierto?-

-Si.- sentí un poco incómoda cuándo dijo eso pero rápidamente lo ignore, se que el señor Ollivander es muy buena persona y no le haría daño a nadie.

- Tus padres eran muy buenas personas, lamento lo que ocurrió con ellos. Pero bueno, Longbottom... Déjame ver. -Sacó de su bolsillo una cinta métrica, con marcas plateadas-. ¿Con qué brazo coges la varita?

-Soy diestra -respondí

-Extiende tu brazo. Eso es. -Me midió del hombro al dedo, luego de la muñeca al codo, del hombro al suelo, de la rodilla a la axila y alrededor de mi cabeza.

La verdad no entendía para que me tenia que medir tanto pero el sabe lo que hace.

-¿Cuál es tu nombre pequeña?- Preguntó mirándome a los ojos.

-_______ - Contesté bajando los brazos.

- Bueno ______, sabías que cada varita Ollivander tiene un núcleo central de una poderosa sustancia mágica. Utilizamos pelos de unicornio, plumas de cola de fénix y nervios de corazón de dragón. No hay dos varitas Ollivander iguales, como no hay dos unicornios, dragones o aves fénix iguales. Y, por supuesto, nunca obtendrás tan buenos resultados con la varita de otro mago.-

-¿Y cómo sabré cuál es mi varita ideal?-

-La varita siempre elige al mago, _____- Habló caminando hacía uno de los estantes. -Toma prueba con esta de madera de roble, veintiséis centímetros y el núcleo de cabello de unicornio.

Cuándo tuve la varita en mis manos sentí un calor pero uno placentero. La agité sin saber que hacer.

-Tuvistes suerte está vez, esa es tu varita -Habló tomando la varita y volviendola a poner en la caja.- Son siete galeones de oro. -

Se los dí y el me dió la varita. Salí de la tienda sacando la carta de los materiales para marcas que ya tenia la varita. Cuándo mire hacía arriba para ver si me encontraba a la abuela me encontré de frente con un chico pelinegro y un hombre muy grade y ¿peludo?.

-Hola ¿irás a comprar tu varita?- Pregunté, en otro caso no lo haría pero necesito amigos.

-Emm si- Dijo el chico nervioso mirando al grandulón.

-Asi que cursaras el primer año en Hogwarts al igual que yo. Mi nombre es _____ Longbottom por cierto. -Le estreche la mano.

-¿Eres la hija de Frank y Alice Longbottom?- Se sorprendió el hombre grandulón.

-Esa misma soy- Me emocionó un poco el saber que soy un poco importante para otras personas.

-Ohh lo siento, ¿en dónde están mis modales? Yo soy Hagrid y el Harry Potter. Harry tus padres y los Longbottom eran muy buenos amigos.

-Mucho gusto en conocerlos, Harry espero que seamos buenos amigos cómo tus padres y los mios. - Es bueno saber que muchas personas conocían a mis padres. Les sonreí amablemente ya que no sabía de que hablar. Me despedí de ellos y fui a buscar a la abuela. Algo que me dejó pensando fue que anteriormente había escuchado el nombre Harry Potter en muchos lugares.

-¿Ya comprastes tu varita? -Preguntó la abuela cuándo me acerque a ella.

-Si y conocí a un hombre y un chico

-Niña, que te he dicho de estar hablando con extraños- Me regañó la abuela. La abuela no era tan estricta conmigo pero a veces sus regaños me molestaban. -¿Cómo se llamaban?

-El hombre se llamaba Hagrid y el niño Harry Potter, también van a cursar el mismo año que Neville y yo, es...

-¿El verdadero Harry Potter?- La abuela se veia un poco sorprendida.

-Emmm supongo que si

-Niña, Harry Potter es el niño que sobrevivió. No puede ser que no te hayas dado cuenta.- Sabía que habia escuchado el nombre de ese chico en alguna otra parte. Me da lástima por lo que ha tenido que pasar ese chico, yo pase por eso, la única diferencia es que mis padres están vivos.