Mi promesa pendiente (Sailor Moon)

Capítulo 1: Premonición

NOTA: Los personajes no me pertenecen, son creación de Naoko Takeuchi <3 pero la historia es mía :)

Han pasado dos meses desde la agotadora y terrible batalla contra Sailor Galaxia, ahora la paz reina en la Tierra.

Las Senshis planean un viaje para descansar y pasar un rato agradable juntas. Minako había sugerido viajar a las montañas, a unas aguas termales. Así que cuando el resto de las chicas aceptó la idea, se encargó de comprar los pasajes en tren, de elegir el lugar de hospedaje, y preparar todo tipo de actividades para realizar con sus queridas amigas.

— ¡Aquellas termas son las mejores! No solo recuperaremos nuestra energía, también tendremos la posibilidad de conocer los alrededores... escuché que hacen unas fiestas increíbles —decía Minako a sus amigas, mientras caminaban hacia sus casas, luego de una jornada de estudio.

— Parece que te esforzaste mucho por encontrar ese lugar, Minako —comentó Makoto sonriendo.

— Claro que sí, es un lugar concurrido, pero como la gran Minako tiene algunos contactos, he logrado obtener habitaciones de lujo —explicó Minako orgullosa de su logro.

— Yo tengo mi bolso listo, debo ir a casa a cambiarme para que nos juntemos en la estación de trenes. Llevo algunos libros para estudiar también, el aire de las montañas hace muy bien para la concentración y si bien debemos relajarnos, no debemos olvidar lo cerca que estamos de nuestros exámenes finales —recordó Ami.

— No, Ami... no quiero estudiar este fin de semana, solo quiero relajarme, ya hemos pasado por mucho: La batalla con Galaxia, el adiós de Chibi-Chibi, la despedida de los Kou... ¡es demasiado! Aún no puedo creer que no volveré a ver a Yaten —dijo Minako dramáticamente.

— ¡Minako! No es bueno hablar sobre "ese tema" —murmuró Makoto.

— L-Lo siento... Usagi, ¿estás bien? —preguntó Minako a la joven rubia de los odangos que caminaba junto a ellas en silencio.

— ¿Yo? Por supuesto que sí, no pasa nada —respondió fingiendo una sonrisa.

— No has hablado en todo el camino. ¿Segura que quieres ir con nosotras a las termas? —preguntó Makoto.

Usagi asintió con la cabeza enérgicamente.

— ¿Segura? Mamoru acaba de volver, ¿no prefieres quedarte con él? —preguntó Ami muy comprensiva.

— Quiero ir con ustedes —aseguró Usagi—. Nos vemos en un par de horas en la estación de trenes.

Usagi se despidió de sus amigas con una fingida sonrisa. Las demás chicas quedaron algo preocupadas, la actitud de su amiga Usagi había cambiado desde hace un tiempo, ella ya no era la chica alegre de siempre, sus ojos mostraban una gran tristeza. Apuró el paso dejando atrás a sus amigas. ¿Qué podía hacer? No había forma de explicarles que estaba evitando estar a solas con su novio, porque Mamoru no solo era eso, era también su amor de otra época, su destino y el futuro padre de su hija. No podía cambiar el futuro por el bien de la humanidad. Debía reinar a su lado. No era que no sintiera nada por él, solo habían nacido otros sentimientos en su corazón, sentimientos que debía olvidar, omitir, ignorar... pero, ¿cómo? Sentía que la única manera de poder seguir con su vida, era sincerándose con aquella persona que la tenía así de confundida, pero él ya no regresaría, es más, Seiya Kou había dejado de existir para siempre, se había marchado para convertirse en Sailor Fighter, ya no había vuelta atrás.