16:Te tengo.

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Capitulos finales.

  Pasaron dos meses desde que ando buscando a Daan, por suerte mi pierna había sanado pero me costaba un poco correr, no dejaba depensar en el infierno que podría estar viviendo Cassie, me sobresalté al escuchar con la puerta era abierta con fuerza, miré en dirección a esta y vi a Martijn correr a mi dirección.

-Encontramos a Daan.-Sonreí mientras me levantaba del asiento.-
-Entonces vamos por el, no podemos perder más tiempo.-Asintió y dio la vuelta para ir con los demás.-

  Suspiré con alegría, al fin vería a Cass nuevamente, pero tendría que dejarla ir, el trato con mi hermana estaba hecho y tendría que alejarme de ella, pero era por su bien, era peligroso si ella seguía conmigo, de todas maneras, es lo mejor, tanto para ella, como para mi.

***

-¡Sueltame imbecil de mierda!.-Vi como Cass forcejeaba contra los brazos de Daan.-
-Calmate fiera, que pronto veras que te va a gustar.-La tiró a la cama y se quitó la chaqueta, miré a Jordy y sentí con la cabeza era hora de entrar.-
-Ni se te ocurra ponerme un dedo encima.-Pateó con fuerza su zona baja.-
-Acéptalo, Julian nunca vendrá por ti, simplemente fuiste un juego para el.-Abrí la puerta de golpe mientras que los otros entraban por las ventanas de la cabaña.-
-¿Que no vendría?, me parece que hablaste algo temprano.-Todos los apuntaron con el rifle, este quedó inmovilizado y maldiciendo en voz baja.-Ahora suelta a Cass y nadie va a disparar.-

  Se hizo a un lado y Cass salió corriendo a mi lado, me abrazó con fuerza, traté de mantener mi semblante serio pero se me hacía difícil tratar de no sonreír, tal vez tengo que aceptarlo, estoy enamorado de ella.

-Te tengo Cass, todo esta bien.-Sonrió y besó mi mejilla.-
-Bien, por lo que veo ahora mi hiciste más fácil el trabajo.-Vi como Daan se puso pálido ante la voz de dicha persona.-
-Tijs, David, Nick, que gusto verlos a los tres aquí.-Sonrió mientras miraba en dirección a esas tres personas, quede boquiabierto al ver que se trataban de los tres miembros más famosos de la mafia holandesa.-
-Debo admitirlo, Julian, tienes un grupo increíble, pero es mejor que se vallan, las cosas aquí se van a poner feas.-Asentí mientras miraba a todo mi grupo.-
-Ya lo escucharon, vamonos.-Asintieron y fueron saliendo poco a poco, estaba por salir mientras ayudaba a caminar a Cassie pero la voz de uno de los tres me detuvo.-
-Oye Julian.-Miré al grupo y me dí cuenta que el moreno de cabello negro era quien me había llamado.-Tienes valor, eso es algo que respeto.-Sonreí mientras que este proseguía a  darme la espalda y yo comenzar a caminar junto a Cass.-
-¿Te violó?.-Susurré mientras que el aire frío golpeaba nuestros rostros.-
-Para nada, yo siempre lo golpeaba, creo que incluso lo dejé estéril.-Reí suavemente y de improvisto la cargue.-
-Es hora de llevarte devuelta a casa.-Sonreí mientras caminaba con dirección a la camioneta.-
-Julian, si te soy sincera no quiero volver a casa.-La miré confundido.-
-¿Por que no?.-Ella suspiró y recargó su cabeza en mi hombro.-
-Porque quiero quedarme contigo.-Negué con la cabeza.-
-No es seguro para ti que sigas conmigo Cass, lo mejor es que vuelvas a tu casa y vivas la vida que yo desearía tener, la vida de una persona normal.-Abrí la puerta del auto y entré en este con ella dejando que se sentara en mis piernas.-

  Ella intentó decir algo pero inmediatamente cerró la boca y se acomodó sobre mi pecho, no podía dejar que ella viviera tanto peligro, era mejor que siguiera su vida por su parte y yo por mi parte, no quiero que algo como esto vuelva a ocurrir.

  Pasaron las horas y Cass se había dormido en mi pecho, el silencio reinaba en la camioneta mientras que cada vez nos acercabamos más a la casa de Cass, por suerte no tenía marcas de golpes o rasguños, supongo que Daan no le hizo nada, o al menos en este mes.

  Cuando por fin llegamos a su casa me bajé del auto y caminé a la casa de mi hermana, si intentaba dejarla en su habitación lo más probable es que despierte y me retenga con ella, pero a partir de ahora no podía acercarme a ella, soy hombre de palabra y prefería verla con alguien más que verla a punto de morir por mi culpa.

  Toqué el timbre varias veces haciendo que una luz en el interior se encendiera, suspiré y cerré los ojos, pero los abrí al oír como la puerta era abierta por mi hermana que tenía cara de cansancio, al ver el cuerpo dormido de Cassie en mis brazos llevó ambas manos a su boca.

-Te lo dije, soy un hombre de palabra.-Le sonreí de lado y ella se hizo a un lado.-¿Donde la dejo?.-Pregunté mientras me giraba para verla.-
-Sígueme.-Hice caso a lo que ella me había dicho y comenzamos a caminar hasta llegar a una habitación.-Déjala ahí.-Asentí mientras en silencio me acercaba a la cama y deposité el cuerpo de Cass en esta.-
-Un trato es un trato, pero antes de irme, no quiero que le digas que hice esto porque no la quiero, sino por su bien, también quiero que le des esto.-Saqué del bolsillo de mi pantalón un anillo de plata.-Ponselo en el dedo anular, no le estoy pidiendo matrimonio porque ni siquiera somos novios, pero dile que es un último regalo de mi parte.-Asintió mientras le entregaba el anillo.-Adiós Daya.-Miré por última vez a Cassie y comencé a caminar hasta la salida.-
Hiciste esto por su bien Julian, era lo correcto.-Murmuré al salir de la casa de mi hermana.-

***

  Nuevamente deje que el móvil sonara, no iba a contestar, porque si lo hacía me quedaría hablando con ella por horas y me pediría explicaciones de mis decisiones, pero no podía decirle, pues me haría cambiar de opinión y volver con ella.

-Martijn.-Este me miró esperando a que siguiera hablando.-Necesito que me ayudes a falsificar mi muerte.-Me miró confundido ante mis palabras.-
-¿Por qué?.-Suspiré y me senté a su lado.-
-Ya no quiero seguir con esto, es muy... Agotador.-Me miró mientras que yo entrelazaba mis manos.-
-Hagas lo que hagas te apoyaré en la decisión que quieras.-Sonreí de lado y palmeó mi hombro.-
-Eres un buen amigo Garritas.-Sonreí y este carcajeó ante su antiguo apodo.-
-Por algo somos hermanos de otra madre, ¿no?.-Asentí y Sonrió.-
-Voy a extrañarte Martijn, tal vez venga a visitarlos a cada uno de ustedes.-Miré a los hermanos, a Scott y a Jack que estaban en la piscina.-
-Yo igual Julian.

-Pero quiero que mantengas esto entre nosotros, luego yo se los diré.-Asintió mientras que pasaba una mano por su cabello.-

-Claro Demonio.-Negué con la cabeza.-
-Otra cosa más, no me llames así.-Pedí, pues si iba a morir para tener una vida normal, Demonio también debe morir.-
-Oh, claro, esta bien.-Sonrió para luego levantarse y correr para tirarse ala piscina.-

  Sin duda alguna, esta es una familia, a pesar que no sea de sangre, es mi familia.

Angels & Demons (Julian Jordan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora