Un tio sucio (orian Hot) (adaptada)

Capitulo 23

- ¡oriana, baja que ya nos vamos!- gritó ova desde abajo.

Oriana ni si quiera respondió. Salió de su habitación y bajó las escaleras. Ignoró a su tío pasando de largo a un lado de él y salió junto a su padre y Emilia para subir al auto.

Julian tuvo que hacer un gran esfuerzo por no sufrir una erección cuando oriana se subió al auto, mostrándole así una hermosa vista de su trasero ¡Uf, si! bonito culo. Se aguantó las ganas de querer posar sus manos en ese grande y redondo trasero y ayudarla a subir. En vez de eso, espero a que subiera sola para después seguirla él. En todo el trayecto ninguno de los dos habló, cada uno miraba por la ventana en silencio, mientras que Emilia y ova hablaban animadamente entre sí. Ova aparcó el auto y se bajaron del auto para ser recibidos de inmediato por Paola.

- ¡Emilia!- exclamó una mujer que aparentaba tener unos treinta y ocho años de edad, al parecer, quien era Paola.- ¡Tanto tiempo! Estás... ¿Más morena?

- Si, es que acabo de llegar ayer de Miami junto con mi esposo.- sonrío.- bueno, aquí está ova, mi hermano Julian, y oriana, mi hijastra.- tomó a oriana de los hombros y la posicionó al frente suyo.

- oriana, estás más grande... y guapa, muy guapa.- sonrió y se inclinó para abrazarla.- ¿Cómo has estado?

- Bien, gracias.- dijo tímida.

Juli amaba la timidez de oriana.

- Bueno, pasemos adentro. La cena ya está lista.- dijo emocionada y se giró para caminar.

Todos siguieron a Paola por detrás y al momento de entrar fueron recibidos por David, el esposo de Paola y su hijo Joaquin, quien se acercó a oriana al momento de verla. Educadamente oriana sonrió y lo saludó cortésmente. Todos se sentaron y empezaron a comer, Emilia hablaba con paola, ova con David y por ultimo, Joaquin y oriana.

- Estas muy hermosa hoy, oriana.- dijo Joaquin, en un intento por seducirla, como lo ha estado tratando de hacer los últimos años.- bueno, en verdad siempre lo estás.

En otra ocasión, oriana se hubiera sonrojado por su cumplido. Pero no hoy. Ni siquiera se sintió atraída, simplemente no le importó.

- Gracias.- contestó y siguió comiendo.

Pero Joaquin no se rindió. Siguió hablándole, y de vez en cuando oriana le respondía con palabras cortas y distantes, solamente para parecer amable. De repente, se sintió observada. Miro por todos lados y se cruzó con los ojos de Julian, quien no había dejado de verla desde que se sentó a comer. Su mirada era penetrante y apretaba con fuerza los cubiertos con sus manos. Días atrás, oriana hubiera seguido hablando con Joaquin ya que le encantaban los celos de Julian. Pero en vez de hacer eso, oriana se encogió de hombros y se hundió en la silla.

-oriana.- le dijo Emilia.- ¿Puedes retirar los platos, por favor?

- Si, claro.- se levantó y cogió unos cuantos platos.

- Yo te ayudo.- dijo Joaquin con la intención de levantarse, pero Julian intervino colocando su mano en el pecho de él.

- No, yo lo haré.- su voz era mordaz, por lo que Joaquin no insistió.

Oriana rodó los ojos y caminó hacia la cocina, mientras que Julian la seguía por detrás.