Prueba de Sonido: Capital Unity.

Capítulo Nueve: Retrouvaille

"Retrouvaille: la alegría de reencontrarse con alguien después de mucho tiempo."

-"Cuando te veo...Me ahogo" NO. NO. NO.- La voz de Jerome retumbó contra las paredes.

Ezra, Graham y Aiden escuchaban los acordes lentos y poéticos de su amigo desde el departamento de al lado.

-Ya es el segundo día que está así, no podemos ir a ensayar sin cantante una tercera vez.

-¿Alguien sabe que pasó entre él y Zavina?

Zavina también había estado distante desde su parte. La bartender se hubiera metido en dos peleas en el bar si Graham no la hubiese parado.

-Se fue de la nada el otro día ¿Habían arreglado algo que no sabíamos y se olvidó? -Preguntó Aiden dudoso.

-¿Es tu forma de querer echarme la culpa porque estuvo consolandome?- Cuestiono Graham a la defensiva.

-No estoy intentando pelear, Graham, si eso es lo que pasó entonces definitivamente no fue tu culpa.

Graham sonrió, dejando el tema de lado y guardando los puños.

Un sonido de frustración, seguido por un insulto un poco más bajo y más acordes atravesaron la pared que separaba la sala de estar de Jerome y Aiden con la de Ezra y Graham.

-Alguien podría ir a hablar con el. - Sugirió Aiden por lo bajo. - Yo no.

-Pero el es como tu mejor amigo. - Graham le contestó.

-Vos se lo debes,el otro día él te ayudó y es probablemente ese el motivo de que ahora esté así. - Lo contradijo pero automáticamente se dió cuenta de la forma en la que el pelirrojo lo miro. Intentando no armar una discusión, fijo su vista en el otro. - Ezra...

-Yo no voy a ir ¿Por qué debería ser yo, Aiden Ross? Graham tiene razón en que él y vos son prácticamente mejores amigos.

-Porque sos vos, Ezra.- Mantuvo su mirada en él como si lo que decía fuese obvio. Notó como su sonrisa repentinamente había crecido demasiado. Tenía una idea. Un grito de felicidad hizo que ahora también Graham le prestara atención.

-Les prometo que esto va a ser justo para todos. - A medida que empezaba a hablar la mueca en su cara se ensanchaba cada vez más. El entusiasmo que normalmente estaba rodeándolo era ahora mucho más grande. Contagiando la felicidad a sus amigos quienes comenzaban a creer que cualquiera fuese su plan, sería uno muy bueno.

-Deja de darle suspenso a la situación. Jerome está mal ahora. ¿Qué propones?

-No intentes opacar mi momento, Aiden Ross.- Intentó mirarlo mal. - Piedra, papel o tijera. - Los observó expectante. Esperaba muchos tipos de respuestas, pero lo único que los otros dos hicieron fue reír.

-¿De verdad esa es tu gran idea?- preguntó Graham. - Sos mi hermano y sé que tan inteligente sos, pero cualquiera podría haber imaginado eso.

-Sin embargo ninguno de ustedes dos lo hizo. - Les dijo subiendo el pecho orgulloso de él mismo. -¿Se les ocurre algo más, Genios?- El rubio puso su puño sobre su palma esperando a los demás.

-¿Qué más da?- Los tres jugaron tres rondas hasta decidir, de forma justa, quien iba a hablarle al chico de al lado.

-No se vale. Volvamos a hacerlo.

-¡Fue tu plan Ezra!- Graham medio río.

-Sí, pero la idea no era que sea yo.- Los amigos, a los que ya no sabía si seguiría llamando así, empujaron a Ezra fuera de su departamento. Tomó una respiración, arregló la sonrisa en su cara y abrió la puerta que tenía en frente.