''Todas las veces que quieras'' Cap 59

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Apenas atravesamos las puertas de cristal del hospital, corrí hasta la recepción dejando atrás a James y Penélope.

― Buenas tardes señorita― Me dirigí a la enfermera― La habitación del señor León Vargas y Brandon Castillo, por favor

Ella checo una bitácora y luego me miro con una mueca

― En este momento están en quirófano, ambos llegaron con lesiones graves. ¿Qué son de usted?

― El señor León es mi esposo y Brandon Castillo mi hermano― Pase saliva―

― Bien señora Vargas, si gusta esperar a que el médico me entregue el reporte― Me indico un asiento― Yo la hare pasar en cuanto se encuentren estables

― Gracias― Gire sobre mis talones y vi como Karla y James estaban caminando hacia mi

― ¿Y bien? ― Pregunto ella

Yo la ignore y mire hacia otro lado.

― Recuerda que nadie puede saber lo que está pasando― Amenazo― Debes permanecer callada

No le prestaba atención, en esos momentos solo pensaba en León y Brandon.

― ¿Qué tan grave esta tu esposo? ― Pregunto James

― Un poco menos que mi hermano― Respondí con mi vista fija en mis manos que no paraban de temblar

― ¿Tu hermano? ¿Qué tiene que ver tu hermano en todo esto, quién es tu hermano? ― Karla estaba realmente confundida

― Brandon― Ella se quedo boquiabierta― Si Brandon, el mismo Brandon del cual te burlaste― Espeté furiosa

― ¿Brandon Castillo y tu son hermanos? ― Balbuceo

― Si― Fue todo lo que dije

― ¡Violetta! ― Murmuro una voz a mis espaldas.

Di media vuelta y observe a Kendall, que caminaba hacia mí con los brazos abiertos, di unos pasos y me refugié en ellos.

― Tranquila Violetta se pondrá bien― Dijo abrazándome

― Estoy embarazada―

Kendall dibujo una gran sonrisa en su rostro y me abrazo aun más fuerte

― León… ¿ya lo sabe? ― Pregunto tomándome por los brazos

― Si, lo supimos el día de ayer― Dije con una media sonrisa

― Estoy muy feliz por ustedes dos Violetta― Miro hacia atrás― Mi papá fue por un café, será mejor que lo alcance

― Adelante― Asentí―

Después de que Kendall se fue Karla, James y yo salimos al estacionamiento

― Te explicare la mecánica de cómo funcionará el contrato― Dijo ella con una sonrisa de satisfacción ― Apenas León abra los ojos, debes decirle que quieres el divorcio…

― Claro que no― La interrumpí ― Eso puede afectarle y hacerlo recaer. Dame tiempo, al menos una semana, en lo que él se recupera

Karla y James se miraron

― Tienes una semana. No más, solo ese tiempo te daré― Suspiro― Le harás creer que te has enamorado de alguien más.

― No entiendo― Puse los ojos en blanco

― Le dirás que te has rencontrado con un ex novio tuyo, James― Puso su mano sobre el hombro de él― Te diste cuenta de que no has dejado de amarlo y por tanto decidiste iniciar una nueva vida a su lado

― ¡Tienes que estar bromeando! No me prestaré a semejante mentira…

― Firmaste― Hablo golpeado― Ya no puedes retractarte

Tuve que tragarme el coraje que me invadía y asentir.

Estaba desesperada. Habían pasado 3 horas desde que León y Brandon ingresaron al quirófano y hasta el momento no tenía ni una sola noticia de ellos. El caminar de las manecillas del reloj llenaba la sala de espera de un molesto tic-tac. Justo cuando había cerrado los ojos, alguien toco mi hombro

― Señora Vargas, su esposo ha despertado― Dijo la enfermera con una tierna sonrisa en sus labios

― ¿Puedo pasar a verlo? ― Dije con una nota de alegría

― Si, de hecho ha estado susurrando el nombre “Violetta”, supongo que es usted― Asentí― Entonces, adelante

Me levante de la silla y seguí a la enfermera. Después de colocarme una bata y un cubre bocas seguimos nuestro camino a la habitación.

Mi corazón palpito fuertemente cuando vi a León tendido en la cama. Con pasos dudosos me acerqué y tome su mano.

― Supongo que desea un poco de privacidad― Dijo la enfermera― Los dejare a solas.

Escuche como la puerta se cerraba y en la habitación solo quedábamos León y yo. Examine su rostro, tenía unos cuantos raspones y rasguños, al igual que moretones pero aun así seguía luciendo tan atractivo como siempre. Sin soltar su mano acerque una silla y me senté, el movió ligeramente su cabeza. Entreabrió sus ojos y comenzó a susurrar palabras, me incline sobre él y con mucho cuidado acaricie su mejilla.

León no sabía si estaba soñando o simplemente estaba disfrutando de un glorioso momento. Ante él se encontraba su hermosa y adorada Violetta.

―Violetta― Dijo en un tono de voz apenas audible

― Shhh― Acaricie su cabello― No hables, descansa

León sonrió, o al menos eso pareció y cerró sus ojos. En ese momento las lágrimas comenzaron a escapar de mis ojos. Yo no podía alejarme de él, simplemente no podía… sería como estar muerta en vida, el es mi vida. León se ha convertido en mi todo.

Enjuague mis lágrimas y pose mis labios sobre su mejilla que tenía menos heridas, no quería lastimarlo

― Te amo― Dije en su oído― Y siempre te amare

Era difícil ver a León sin expresión alguna, tan quieto, tan lastimado. Lo observe cuidadosamente, tratando de memorizar cada centímetro de él, recordando los mejores momentos de mi vida a su lado ¿cómo iba a decirle lo del divorcio? El solo hecho de pensarlo me atormentaba y me obligaba a llorar sin control.

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León estaba sentado en la cama viendo televisión, yo estaba recostada a un lado y lo miraba. La mayoría de las marcas del accidente ya casi no se notaban, y las lesiones más delicadas habían sido atendidas y curadas. Había pasado un mes desde el accidente, y a pesar de que Karla solamente me había dado una semana para despedirme de León, tuve que rogarle infinidad de veces porque me dejara pasar un mes entero…

León noto que lo miraba y acaricio mi frente

― ¿Cuándo vas a contarme el porqué desapareciste? ― Dijo con una media sonrisa

Yo negué con la cabeza y estire mi mano para tocar su barbilla

― Quiero que me perdones, que no me guardes resentimiento si es que alguna vez llego a lastimarte― Pase saliva― He pasado momentos increíbles a tu lado…

― Hablas como si fueses a irte de mi lado― Paso su dedo índice por mis labios― Pero ambos sabemos que eso jamás sucederá

Brandon había salido del hospital apenas dos semanas atrás. Por las tardes yo iba a visitarlo para asegurarme de que se encontrara bien, sin ninguna molestia. Papá y mamá ya habían regresado de Londres, por lo que Brandon ahora vivía con ellos, al menos hasta que se recuperara por completo.

Por otro lado, toda la familia Vargas y mi familia, ya estaban enterados de mi embarazo y los regalos para el bebé no paraban de llover, eran tantos que seguramente no tendría que preocuparme por comprar algo extra.

― ¿Puedes besarme? ― Mi voz se quebró al final― Por favor

León dibujo una media sonrisa y me tomo por la cintura, acercándome a él.

― Todas las veces que quieras― Rozo mis labios― Ni si quiera necesitas decir por favor

Nuestro Amor Esta Oculto (Leonetta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora