Ya era tarde. Emelie ha propuesto que salgamos de fiesta, y no, no he podido negarme.
Me enfundo en mi vestido blanco de flores, y me pongo los tacones. Voy al baño y retoco mi maquillaje, hasta que aporrean mi puerta efusivamente y acabo con una larga raya negra en mitad de la cara.Corro hacia la puerta y abro.
-¡Joder Yas!¡Esta manía tu... ¡Ups! ¡Perdona Mikel! ¿Que querías?
Mikel se ríe.
-Perdona que te haya interrumpido, solo venía a decirte que mañana te recogería a las 10.
-¿Como?¿Para que?.- digo sorprendida.
-¿No te lo ha dicho Emelie?
-¿El que?
-¡Oh! Me pidió que te llevase al masajista, me dijo que te dio un tirón muy fuerte en el antebrazo dura te la clase de Aquagym.
-¡Oh! Bueno...vale. Pues nos vemos a las diez ¿En el vestíbulo?
- ¡Claro!.-sonrio.
Mientras se iba no pude evitar que mis ojos se clavasen en su cuerpo. Para ser sincera... Estaba muy bien hecho, brazos corpulentos, en el derecho tenia un tatuaje, le cubría medio brazo, era alto, morenazo, y con un culito prieto que derritiria a cualquier chica.
De pronto se gira y mi me mira. Noto como el color me sube por las mejillas, y casi no puedo contener el aire cuando me giña un ojo y gira la esquina.
Mal, Rebeca, mal...
Antes de cerrar la puerta del todo, unas manos la empujan y caigo de espaldas.
-¡Yas!¡Eres muy bruta!¿¡Porque no haces la puerta giratoria de una patada y acabas antes!?
-Venga tía ¡No te pongas a si!.
Me ayuda a lavantarme y me estruja entre sus brazos.
-¡Tia!¡Estas cañón!
-¡Yas! Dime lo que quieres y acabemos de una vez.- la digo riéndome.
- Tía, estoy notando cosas raras...
-¿A que te refieres?
-A Emelie, creo que está tramando algo.
-¡Vamos, Yas! ¡No seas paranoica!
-Vale, vale, yo te he avisado.
-Venga, mueve ese culito y vamos para abajo, que nos espera una larga noche muñeca.
La empujo para que salga del cuarto.
Mientras andamos hasta el ascensor, la idea de Yas me ronda la cabeza.¿Tendra razón?
Salimos del ascensor y hay está Dereck... con Emelie.
Me acerco a el y le besó.-Estas preciosa nena.- me susurra al oído.
Beso sus labios y entrelazamos las manos.
Salimos del hotel y para mi sorpresa me encuentro con una gran limusina negra ante mis ojos.
-Perdonad el atrevimiento pero pensé que estaríamos más cómodos.- comenta Emelie.
No le doy importancia, sonrió y me dirigo hasta la puerta de la limusina. El trayecto fue ameno, pero no pude dejar de darle vueltas a lo que me había contado Yas.
Cuando llegamos entramos en una gran sala, la verdad, no parecía un pub normal. En el interior había unas 15 personas que no conocía.
-Es una fiesta de negocios de mi padre, nos ha invitado y no he podido decirle que no.- Emelie se encoje de hombros.
Había unas 5 mujeres y diez hombres trajeados. Me encoji.
Emelie nos trae una copa. Es tan increíble. A pesar de ser invidente se maneja sorprendentemente bien.
De pronto Emelie tira del brazo de Dereck y salen corriendo. Miro a Yas desconcertada.
-Ha dicho que le iba a presentar a gente interesada en el proyecto de Dereck.
Les miro fijamente, tan juntos, me sube una rabia por el interior que me quema la piel. De pronto me siento aturdida. Y agarro a Yas para salir fuera. Llevándome a varias personas por delante.
-¿Te encuentras bien?
Levanto la mirada para ponerle cara a esa voz tan familiar.
-¡Mikel!¿¡Que haces aquí!?.-le grito sin darme cuenta.
-Perdona, Emelie me invitó.
Yas golpea mis costillas y del impulso caigo sobre Mikel. El me sujeta entre sus brazos. Estamos demasiado cerca. Puedo sentir su respiración. Su corazón que la te a mil por hora...
-¡Rebeca!
Cuando giro la cara, me encuentro con la de Dereck, que me mira con incredulidad y sale disparado de allí.
Intento salir tras el. Pero mis piernas me lo impiden. Me tambaleo y Mikel me vuelve a coger.Finalmente pierdo el conocimiento.
{DEReCK}
Salgo corriendo de allí, solo verla en los brazos de ese muñeco inchable me saca de quicio.
Me siento en la acera. Intento pensar colocarlo todo en mi cabeza, pero me siento aturdido. Un bastón golpea mi costado izquierdo.-¡Ah!¡Estas aquí! ¿¡Que ha pasado!?
Froto mi cabeza con las manos. Sinceramente, no tengo muy claro...
- He pillado a Rebeca abrazada a Mikel, estaban tan cerca... Si llego a aparecer dos minutos después les hubiese pillado besándose.
-No creo que Rebeca hiciese eso, debe de haber sido una confusión.-dice tan segura, que casi me lo creo.
-No hay confusión posible Emelie, lo vi con mis propios ojos.
-Habla con ella Dereck. Las cosas se solucionan hablando.
Apoyo mi cabeza en su hombro. No quiero pensar.
ESTÁS LEYENDO
Como siempre y como nunca [SEGUNDA PARTE DE "SI FUERAS MIA"]
RomanceEl viaje a California va a cambiar su vida. Rebeca deja New York para viaja junto, en un principio, a su mejor amiga durante todo el verano. Después de aquel accidente su vida se a vuelto del revés. Y hará lo imposible por volver a la tranquilidad...