(Realidad Alterna en la que Sirius y Remus son novios)
Narrador Omnisciente
Sirius Black corrí por los pasillos esquivando, mejor dicho, atropellando personas.
La noche anterior había sido Luna Llena y no pudo ver a su lobito esa noche ya que tenía un castigo con Minnie, como el le decía.
Pero gracias a su mejor amiga, Lis, se había enterado que esa noche Remus había tenido heridas muy graves y estaba en la enfermería dormido pero le darían de alta cuando se despertara.
Cuando llegó a la puerta de la enfermería, la abrió sin importarle el estruendo que causó después.
- ¡Señor Black necesitamos que esté fuera de la enfermería! - Dijo la señora Pomfrey demandante.
- ¡Quiero ver a mi novio! - Demandó de la misma manera.
Ambos se fulminaron con la mirada hasta que Pomfrey cedió rodando los ojos.
- En la quinta camilla, está estable. Cuando despierte debe tomar del frasco al lado de la cama y luego puede irse - Dijo y entró de nuevo en su despacho.
Sirius estaba muy angustiado, él debía de haber estado ahí para su novio, tal vez hubiera evitado que se hiciera tanto daño.
Caminó hasta la camilla y retiró las cortinas quedando frente a su novio.
Tenía dos cortadas más en su cara, una en la frente y otra en su mejilla izquierda, en los brazos tenía raspones hechos obviamente por sus largas garras, en su muslo había un gran corte con la herida todavía abierta y seguramente tendría más cicatrices en su abdomen, las cuales era tapadas por una fina capa de ropa.
Sirius se acercó a su novio, tratando de no causarle mucho daño acarició su cabello miel mientras tomaba asiento a su lado.
- ¿Sirius eres tú? - Preguntó Remus en voz baja abriendo sus ojos lentamente.
- El mismísimo - Dijo con una sonrisa.
- ¿Donde estabas anoche? - Preguntó Remus tratando de levantarse pero fue empujado de vuelta a su posición inicial por Sirius.
- Poppy dijo que tomaras esto y que luego puedes irte - Dijo preocupado de que su novio pudiera hacerse daño y entregándole el pequeño frasco al lado de la camilla.
Remus rodó los ojos ante la brusquedad de su novio, aunque sonrió para sus adentros ya que Sirius solo se preocupa por él.
Luego de terminar de tomarse ese pequeño frasco con un contenido no muy agradable, Sirius y Remus caminaron hasta su habitación, y la de James y Peter, en la torre Gryffindor.
Lis y James habían visitado a James y a Remus en la mañana por lo cual habían vuelto a clases, y seguramente estarían en pociones junto a Peter por lo cual la habitación estaba vacía .
A Sirius no le importaba perder clases si era para ayudar a su Lobito. Aunque a Remus si le preocupaba que Sirius perdiera clases.
Luego de que Sirius depositara a Remus en la cama, Remus le había dicho que volviera a clases cosa que Sirius obviamente no obedeció.
- Insisto que deberías volver a clases Sirius, ya perdiste Transformaciones, Historia de la Magia y pociones. - Gruñó Remus cuando Sirius se acurrucó en su cama a su lado.
- Y yo insisto en que me quedaré para cuidar de mi Lobito - Dijo pasando su brazo alrededor de la pequeña cintura de Remus.
Remus se quejó a sus adentros, pero no dijo nada ya que le gustaba como Sirius cuidaba de él.
Luego de un rato entre risas, comentarios pervertidos por parte de Sirius y sonrojos de Parte de Remus, el último mencionado empezó a caer dormido.
Cuando la respiración de Remus se hizo lenta y su cuerpo se relajó, Sirius supo que Remus estaba dormido y trató de apartarse pero la mano de Remus lo impidió.
- No me dejes, por favor - Suplicó Remus.
- Nunca lo haría, mi dulce Lobito.
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Extras de trilogía Generaciones
Random¡Extras de mis querida trilogía Generaciones! La quinta ¿Merodeadora? - Libro 1, primera generación ¡¿Mellizos?! - Libro 2, segunda generación Rivalidad a lo Slytherin - Libro 3, tercera generación