Una de las experiencias más difíciles para una mujer es crecer en un entorno familiar marcado por el machismo, estas limitaciones me hacían sentir como una mariposa atrapada en una telaraña en medio de todas sus creencias y restricciones.
En un ambiente así, se nos enseña desde una edad temprana que nuestras opiniones y deseos son menospreciados, que nuestra valía está determinada por nuestra relación con un hombre y que nuestro papel principal es servir y complacer a los demás, especialmente a nuestra pareja masculina.
Mi mayor error fue internalizar esas nociones limitantes que me llevaron a creer que mi valía estaba esencialmente ligada a ti, creí erróneamente que te necesitaba para completar mi vida, como si fuera un ave que necesita ser guiada por otra para poder volar, que sin tu presencia a mi lado, mi vida carecería de sentido y propósito.
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Renacer de entre Penumbras y Agonía
Historia CortaDespués de haber compartido cuatro meses de amistad sólida y tres años de un noviazgo lleno de felicidad, me encontré en el altar, diciendo "sí" con toda la confianza y emoción que había sentido hasta ese momento. En ese instante, nuestra relación p...
