PREFACIO

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—¡Grandioso! Comenzarás a trabajar con nosotros desde hoy.

La persona que acababa de ofrecerme empleo no dejaba de reírse con satisfacción. Me había dicho su nombre pero yo no podía recordarlo. Estaba aturdida y la mirada de los bailarines a los que había interrumpido no dejaba de molestarme.

Fruncí el ceño evidentemente incómoda.

Él me miraba de una forma terrible, sus cejas enmarcaban unos ojos absolutamente molestos. Me hacía sentir culpable... al parecer tendré que convivir con él, con ellos... y ninguno tenía pinta de querer ser mi amigo.

Naturalidad. [Michael Jackson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora