Para La Chica Más Bella Del Mundo.

Prólogo

Frunció el ceño, era exasperante, en serio que lo era.

Miró al estúpido de su mejor amigo meterse un dedo en la nariz y sacarse un moco kilométrico por novena vez en media hora ¿Cómo es que no tenía la mínima consideración frente suyo? Entendía que parecía chico y que realmente dudaría de su género si no fuera porque se desangraba una vez al mes pero eso no quitaba el hecho de que fuera mujer y que en este momento estaba asqueada.

Se levantó molesta y se encaminó hacia el baño, porque sí, que mejor lugar para pensar que el jodido baño. Ni siquiera en el espacio tenía un lugar de tranquilidad.

Ya fuera del lugar suspiró y tomó el pomo de la puerta, pero al abrir sus orbes marrones vio como el muchacho de cabello azabache se encontraba sin nada en su torso y bajándose sus pantalones.

-Huuh...¿Pidge?- la muchacha volvió a poner los pies en la tierra y con el rostro ruborizado cerró la puerta de golpe.

-¡Cierra la puerta con pestillo!- dijo antes de irse con el rostro vuelto un tomate ¿Es que el universo no quería que tuviera un momento de paz y tranquilidad?

-¡Pidge!- volteó echa una furia para ver a Hunk con una inocente sonrisa en su rostro.

-¿Qué quieres?- dijo de forma tajante, Hunk la miró confundido.

-¿Pasó algo? O simplemente estás...tu ya sabes...- ahora era el turno de Pidge para mirarlo confundida.

-¿Huh?-

-Ya sabes... Lo que les pasa a ti y a Allura una vez al mes- dijo Hunk un poco incómodo. Pidge se dignó a mirarlo simplemente con una cara de póker que llegaba a ser épica.

-Escúchame, tienes tres putos segundos para desaparecer de mi puta vista antes de que te arranque la puta cabeza ¿entendiste?- dijo sacando su bayard de Dios sabe donde. Sin embargo el muchacho antes de que la chica terminara su amenaza ya había huido.

-¿Pidge?- tenía que ser una broma.

-¿Shirogane? Dime que es algo importante para simplemente ignorarte e irme a encerrar con Green a ver si consigo un poco de tranquilidad- dijo cansada, Shiro sonrió suavemente y acarició el cabello de la menor.

-Lo entiendo Pidge-

-¿Qué?- preguntó ella.

-Estás en tus días ¿verdad?- dijo con su típica sonrisa colgate, pero antes de que si quiera pudiese procesar el grasso error que había cometido la muchacha lo había golpeado con su arma.

-¡QUE NO ESTOY EN MIS PUTOS DÍAS!-

Sinceramente,  a veces le gustaría que los chicos recordaran que en realidad era una chica y no que la trataran como un chico, ella también tenía momentos en los que le gustaría que le dijesen cumplidos o que le hicieran regalos como a Allura o que simplemente a veces la trataran con más delicadeza, quien sabe, hasta le gustaría que alguno sintiese algo por ella, porque ya tenía la edad suficiente para haber dado su primer beso, cosa que no había pasado y tampoco es como si fuera a ver a otro humano en un largo tiempo.

Suspiró y llegó hasta su habitación donde se sentó en su cama. Quizás una pequeña siesta le haría bien, sin embargo a la hora de dejar sus preciadas gafas sobre la mesita de noche algo llamó su atención.

Un papel, el cual no recordaba haberlo dejado allí.

"Eres hermosa, me gustas."

Volvió a leer el papel miles de veces antes de procesar la información. Esto debía ser una broma.

¿O no?
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Okey, algo random que nace antes de acostarme znzjzh ojalá les guste y lamento el OoC :( eso u.u hasta el próximo cap❤❤