OJOS COLOR SOL

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ADAM

¿Cómo saber quién miente cuando te está mintiendo?

¿A caso las mentiras o verdades se leen en el rostro de las personas?

¿Cómo pude hackear un sistema sin ni siquiera saber hacerlo?

Estás preguntas siempre suelen venir al momento de mi ducha, el baño es como el mejor lugar para pensar y ya que no he dormido bien debería ser con agua fría, al parecer estaré listo más temprano de lo común.

Me he pasado las últimas semanas tratando de recopilar que sucedió y como lo hice, pero solo tengo pequeños extractos de cuando llegue al instituto pasado, conocí a Mat, Kryz y Tania el primer año. Luego conocí a Tomy, éramos como un clan, siempre trabajábamos juntos, juegos, concursos, ganamos decatlones y eventos para representar al instituto. Pero trato de recordar cumpleaños y fechas importantes de hace un año y realmente no recuerdo nada, estoy en blanco, como si me hubiesen sacado 2 años de mi vida y solo dejaran los restantes.

Entro en mi habitación veo mi libro de cálculo en la repisa y solo puedo pensar en Jessica, hace dos segundos estaba abrumado por mis propios problemas existenciales, pero al recordarla todo cambio, ella me desenfoca y me enfoca. Necesito explicarle y creo que ella sería la única con la que podría hablar de todo esto que me ocurre, después trataré de hablar con los demás.

Salgo a la sala y encuentro a mi madre sentada en el sillón está leyendo un libro que le he prestado y creo que le ha gustado mucho.

-Mamá, sí que te gustó mi libro ¿no?, Mamá ¿puedo preguntarte algo?

-claro hijo.

-¿Recuerdas que hicieron en mi último cumpleaños?

-Pues no mucho, estuvimos con la familia y te quedaste con tus amigos del antiguo instituto, creo que después salieron al cine y te preste el auto.

-¿Y para los 17?

-Pues ese año te la pasaste en casa de la abuela casi todo el día, y creo que cuando regresaste te cantamos cumpleaños y comimos pizza. ¿Por qué hijo?

-Mamá, qué pasa si por alguna razón hipotética no recuerdo nada de los últimos dos años.

-Pues te diría que estás loco porque es imposible, al menos que te hayas caído y golpeado muy fuerte la cabeza.

-Entiendo mamá.

-Por qué lo preguntas Adam, ¿necesitas hablarme de algo?

-Si mamá creo que -suena la voz de mi hermano haciendo alguna metida de pata en la cocina-

Mi madre sale tras la ayuda de mi hermano y yo quedo con media palabra en la boca.

-Adiós mamá voy saliendo al colegio.

-Hasta luego cariño que tangas buen día- responde mi madre-

Al salir pienso:

Tomy fue el único que me ha contestado desde el incidente del instituto hace ya 2 meses o más. Cuando decidieron traerme a este instituto. Todos mis amigos se desaparecieron fue como si se mudaran de país, insistí tanto en hablarles y no recibir respuesta alguna que decidí mejor dejar de buscarlos, pienso que tal vez se molestaron. Pero ¿cómo no dijeron nada? si ellos al igual que yo no tenían idea, o eso quiero yo creer, quiero creer que también saben que no hicieron nada y que todo fue una trampa o un engaño.

No logro entender por qué si hice tanto daño al instituto ¿por qué me ayudaron?

Ya en el instituto me acerco a Jess y noto algo extraño, no sé qué le sucede, -trataré de sentarme al lado de ella-

-Jess, ¿quieres que te explique cálculo?

-Sí, vamos, necesito salir de aquí.

Al levantarse toma de mi mano, creo que se siente insegura y no me desagrada para nada sentir el roce de su mano con la mía.

De camino por los pasillos del instituto, ella camina frente de mi tal cual ángel, su coleta se mueve al son de sus caderas, no sé si me estoy volviendo loco o si ya estoy curado pero soy tan controlador y tan minucioso con todo lo que hago, pero hay cosas que simplemente no podemos contralar y creo que esta es una de ellas.

Voltea hacia mí y siento el aroma de su perfume.

Me sonrió y creo que me he sonrojado, por un momento olvidé el presenta, pasado y el futuro.

Su voz me saca de mis pensamientos...

-¡Adam! Te llevo hablando media hora y no respondes, ¿estás ahí?

-Sí, ¡si estoy!

No sé como pero ya estamos al frente de las puertas de la biblioteca, creo que es hora de explicar cálculo. Y tal vez de perderme un rato en sus ojos color sol.

¡LISTO! Grita con entusiasmo Jess, porque ya logro entender el problema.

-Me alegro mucho, que ahora sí estés preparada para la prueba, Jess.

-Gracias Adam.

Estaba tan feliz, pero tan feliz, pero luego volví a recordar lo de anoche, esa llamada de Tomy. Tengo que contarle, ella quizás me pueda ayudar.

Antes de poder continuar, noto que lleva entre sus cosas un libro, alcancé a leer la portada decía: Inferno de Dan Brown. Como era de esperarse casi lloro de la alegría...

Hago una pausa y le pregunto

-¿te gusta ese autor?

-Si me encanta, mezcla muchos temas que me encantan. Y pues inferno ya me lo leí -lo hace sacando el libro de su bolsa- lo traje hoy para prestárselo a una compañera.

Me da por reírme, pero no de esas risas de mofa, que denotan burla. Hablo de esa risa que te hace sentir como si encontraras tu lugar en el mundo.

Suena la campana y Jess me dice que debemos ir a clase, asiento con rapidez y la sigo.

Creo que después de clases hablaré con ella.

ForgetWhere stories live. Discover now