Bad Day (Yoonseok)

Uno

El día de Min YoonGi empezó  demasiado temprano en comparación a los otros y a sus expectativas.
El reloj en su mesita de noche marcaban las cuatro de la mañana, ni siquiera su alarma estaba cerca de sonar por lo que volvió a cerrar sus ojos para poder volver a dormir y por obra del destino la puerta se abrió, dejando ver una silueta bajita entrar a la habitación, Yoongi ni siquiera se movió de su lugar y esperó a que se acercara un poco más, mientras se acercaba pudo notar que la silueta se dirigía a él; soltó un bufido y tomó el cuerpo que estaba picándole las costillas para que despertase, al llevarlo pudo ver a Jimin con grandes ojeras adornando sus ojos acompañadas de una sonrisa de oreja a oreja.

-Terminé mi canción-. Habló tan bajo como pudo por la hora, pero se notaba como reprimía las ganas de gritarlo a los cuatro vientos.

- ¿Y?.

-Me gustaría que me dieras una opinión-. El chico se intentaba mostrar lo más sereno posible ante su hyung tratando de borrar la sonrisa que llevaba.

Detrás de su espalda apareció una hoja arrugada de papel llena de manchones de tintas de colores, tan manchada como las manos del que la portaba, Yoongi no pudo negarle ese favor viendo todo el esfuerzo que había hecho Jimin sacrificando una de las pocas noches en las que pudo haber aprovechado para  dormir tranquilamente. Él sabía lo que se sentía no poder conciliar el sueño por la inconformidad de no escribir algo que rondaba constantemente en su cabeza.

-Vamos a mi estudio-. Yoongi tomó el papel y se dirigió al estudio con Jimin dando saltitos detrás de él.

En cuanto Yoongi abrió la puerta se tiró en un sofá de utilería que aún no le encontraban un lugar para guardarlo; empezó a leer la letra atentamente, pero el sueño que tenía sumado con los borrones de la tinta rosa y azul con aroma a chicle no dejaba de molestarle sus ojos y nariz, por lo que los cerraba al bajar un poco la guardia. De cierto modo terminó de leerlo, dobló el papel y se lo dio a Jimin, el cual lo veía con ancias por saber su opinión.

-La canción es buena. Queda con tu personalidad, no esperaba menos de ti-. Le dio una palmadita en sus hombros en señal de felicitación. Alguien bastante cercano le pidió que intentara ser menos frío con sus dongsaeng, así que era una meta en desarrollo.

Los ojos de Jimin se llenaron de lágrimas y apretó la hoja contra su pecho, Yoongi esperaba algunas palabras como "eres lo mejor" o un simple "gracias" pero no. El chico comenzó a golpearle el pecho varias veces, murmurando varias cosas con su labio temblándole.

-Sé que soy malo en esto de la música pero, ¿porqué eres así conmigo?

Yoongi se quedó con la boca abierta,  ¿acaso ahora dar un cumplido es sinónimo de ofensa?, Yonngi estuvo a poco de hacer una rabieta pero se detuvo, ya que los golpes se detuvieron y solo se escuchaban sollozos.

-¿Porqué no sólo dices que mi canción está mal?, no soy tan débil como antes y puedo escuchar una fuerte crítica proveniente de Min Yoongi. En serio, dime la verdad, no me trates como si fuera sensible así nunca...

-¿Tan poca fe te tienes?-. Yoongi seguía en blanco por la escenita que acababa de ver. Lo comprendía todo ahora; el efecto de no dormir y recibir una opinión positiva de su canción afectaron a Jimin de manera catastrófica.

Yoongi aguantó las ganas de reír por mero respeto. Tomó aire y separó a Jimin de su pecho, el cual ya estaba hecho un mar de lágrimas.

-Nadie dijo que fuera mala tu canción,  ¿crees que alguien como yo elogiaría una mierda? Por algo me pediste opinión a mi primero, porque sabías que yo no andaría con rodeos y palabras diplomáticas, ¿quieres saber la cruda verdad? Tu canción es buena, en serio, ahora carga con eso y déjame dormir de una buena vez-. Yoongi quitó los brazos de Jimin que seguían amarrados en sus hombros y lo separó de la manera mas sutil posible que su genio le permitía. Tenía en claro que hacerse pasar por un tipo frío y directo lo salvaba la mayoría del tiempo de hacer una estupidez.

Jimin abrió sus ojos incrédulo por lo que acababa de pasar; casi al instante se levantó del lugar y se dirigió a la puerta, esperando a que su hyung saliera o mínimo lo sacara de su estudio.
Caminaron de vuelta a las habitaciones en silencio, Yoongi esperaba no ser tan incómodo pero no tenía energía ni para reírse en sus adentros por lo pasado; cuando llegaron a la habitación de Jimin éste se dio una vuelta rápidamente y quedó cara a cara con Yoongi, no hizo ningún movimiento y dejó al menor hablar.

-Gracias por la opinión hyung, creo que no esperaba un buen comentario viniendo de ti-. Aunque no estuvieran muy acostumbrados a ser cortés entre ellos, Jimin hizo una leve reverencia ante su hyung, más que nada por el haber hecho algo tan vergonzoso delante de el.
Yoongi sonrió de lado y le dio leves palmaditas en su cabelleras.

-Ahora ve a dormir enano, te resfriarás y sabes quien será 'culpable'-. Se señaló dramáticamente a sí mismo.

Jimin entendió que tanto el como Yoongi debían volver a dormir, a lo que el solo le dijo un buenas noches y se encerró en su habitación. Dejando a su hyung solo en el pasillo.
Pronto dejó el lugar y se encaminó a su habitación; haciendo cuentas aún tenía unas horas para dormir placidamente como se lo merecía.

Entró sin hacer mucho ruido al abrir y cerrar la puerta, en pocos pasos llegó a su cama y se cubrió hasta la cabeza con sus cobijas que soltaban un aroma a limpio que lo relajaban. No necesitó contar ovejas o que leyeran un cuento, porque el sueño llegó sin haber pedido permiso, sentía sus párpados pesados y su respiración comenzaba a ser más tranquila como los latidos de su corazón.
Lástima que su compañero de habitación no entendía el arte que era dormir para otros.
Yoongi mandó el sueño al carajo y se levantó ruidosamente de su cama, acercandose a la otra sin necesidad de encender la luz.

Hoy había descubierto dos cosas sobre dos de sus dongsaengs:
1.-Jimin era más sensible que las nalgas de un bebé cuando no dormía
2.-Tae conversaba, se reía y se enojaba dormido. Y no era tan silencioso para su mala suerte.

Y como cereza del pastel... Su alarma sonó como todos los días a las seis y media. Indicándole que un nuevo día llegaba. 

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No acostumbro a hacer notas al final de los capítulos, pero es necesario.
Va a ser un capítulo dedicado a cada integrante, antes de llegar a Hoseok (obviamente :v)
Sin más me despido y espero que disfruten la lectura tanto como yo lo estoy haciendo al escribirla C: