Entre Lágrimas y Risas [Luaggie] [Terminada]

Fruto Prohibido

Un Fanfic de The Loud House

"Entre Lágrimas y Risas"

Capítulo 5: "Fruto Prohibido"

—Y entonces le dije a Bobby, literalmente, quiero que dejes de frecuentarte con esa chica de tu trabajo llamada Dana... —Dijo Lori sentada al extremo de una larga mesa sobre un banco alto, dándole un sorbo a su soda burbujeante sabor naranja—. Hay algo en ella que me da muy mala espina. Siento como si coqueteara contigo a mis espaldas.

—¡Oye! ¿Qué no habíamos solucionado ya ese problema? —Luna acentuó desde la misma mesa, en un punto opuesto al de Lori—. Creo que nos quedó lo bastante claro luego del numerito que montamos en aquél restaurante que Bobby jamás te traicionaría. Además, ¿Qué no fue ella la que los ayudó a elegir el vestido que elegiste para esa ocasión?

—Eso ya lo sé, es solo que no me gusta que nadie lo mire con otros ojos. Solo yo poseo ese privilegio.

—No la culpo... —Opinó Lynn—. Si yo tuviera novio tampoco me gustaría que otras chicas se fijaran en él. Lo único que Lori hace es asegurarse de que en un futuro Bobby no adquiera un gusto por comprar tiempos compartidos. —Se hizo reír a sí misma, no así sucedió con el resto de sus hermanas y Lincoln, quienes de manera inmediata y simultánea, demostraron su evidente malestar ante el intento de broma—. ¿Entienden? ¿Entienden?

—Y yo que pensaba que los chistes de Luan eran absurdos. —Dijo Lola, dirigiéndole una mirada asesina—. Al menos ella contaba algunos con los que nos hacía reír de vez en cuando. En cambio, los tuyos son enfermizos.

—¡Oigan! Alguien tiene que cubrir el lugar de Luan mientras no se encuentre con nosotras. —Decretó la chica deportista, dándole una mordida al Brötchen que tenía sobre su plato—. Y creo que esto de contar chistes me está comenzando a gustar. Creo que he descubierto mi segunda vocación.

Por su parte, mientras que sus hermanas se dedicaban a discutir acerca de lo ridícula que sonaba la nueva idea de Lynn, Lincoln había preferido comer en silencio, escuchando ocasionalmente la charla que sostenían las chicas a su alrededor. Sin embargo, el pedazo de carne que se encontraba masticando en ese momento estuvo a punto de quedársele atorado en la garganta, cuando repentinamente, luego de mirar despreocupadamente por la ventana para asegurarse de que Luan y Maggie aún se hallaban en las inmediaciones del restaurante de comida rápida, se dio cuenta de que junto a ellas, se encontraba nada más y nada menos que la madre de la joven de ropas opacas y tétricas, ocasionándole un vuelco en el estómago, siendo este acompañado por un susto tan terrible, que por breves momentos pensó seriamente en colocar aquella situación por encima de los sustos que Lucy le provocaba.

—Chicas... Más les vale que vayan pidiendo la cuenta... Creo que tenemos un problema...

-o-

—¿Mamá? ¿Qué estás haciendo aquí...? —Preguntó Maggie, temerosa de establecer contacto visual con su madre quien se encontraba frente al cubículo dónde hasta hacía apenas unos segundos, ella y Luan se encontraban cómodamente conversando y degustando de una hamburguesa.

—Lo mismo quisiera saber yo de ti, jovencita. ¿Acaso una madre no puede complacer a su hija de vez en cuando comprándole comida chatarra? —Contestó la señora, cruzándose de brazos y resaltando su molestia en cada una de sus palabras—. Ahora dime... ¿Qué significa esto y por qué te estabas besando con esa chica?

—Yo... Puedo explicarlo... Mamá... Verás...

—No existe una explicación racional, ni mucho menos una justificación para la atrocidad que acabas de cometer. ¡Estoy muy decepcionada de ti, Maggie! ¿De nada sirvió la educación que te impartí? —Pese a que Maggie trató de buscar una rápida excusa, la altisonante voz de su madre la obligó a guardar silencio y a encogerse de hombros—. ¿Una mujer besando a otra mujer? ¡El mundo se ha vuelto loco! Tan solo piensa en lo que diría dios nuestro señor ante esta aberración. ¡Vendrás conmigo en este instante a casa y te obligaré a que te laves esa boca con una barra de jabón! A ver sí así aprendes a comportarte de una buena vez. No volverás a ver a esa chica.