La broma

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Desde la perspectiva de Rubius:

Le e dicho que se viniese a mi cuarto, cuando estemos ahí significará que la broma puede empezar.
Cuando llegamos le digo que se siente en la cama y el lo hace, yo me siento alado suya, es mejor que empecemos a hablar para que no sea tan evidente que lo e hecho a posta, cuando llevemos un rato hablando le enviaré el mensaje a Alexby para que venga, a estas hora ya debe estar preparado.
- Bueno, esto es lo que quería enseñarte- señaló una nueva polla de goma que me han regalado mis subscriptores, el obviamente se ríe.
- Está es mucho más larga que la otra- afirma cogiendola.
- No tanto como la mía- le digo con la mejor cara de pervertido que se poner, de nuevo ambos reímos.
- No sabría decirte, tendría que confirmarlo- hecha una pequeña mirada a mi entre pierna- siéntate- me señala de nuevo mi cama y le hago caso entre risas.
Cuando nos sentamos la pequeña broma finaliza, pero el me sigue hablando:
- Oye, sobre lo que has dicho antes- nos miramos, como cualquiera haría cuando alguien le habla, pero esta vez me siento diferente, aún que no se por qué- si que es verdad que llevamos muchos años juntos y quería decirte que tú también significas mucho para mí, sin ti no hubiera podido hacer muchas de las cosas que he hecho, creo que si no nos hubiéramos conocido ahora mi vida sería totalmente distinta- agacha la cabeza unos segundos y luego sigue- se que esto no viene a cuento, pero creo que sería importante decirte lo mucho que significas para mí y que te quiero tío- acto seguido nos damos un abrazo.
El abrazo continúa, pero ninguno de los dos quiere separase, si que había pensado en todos nuestros años de amistad y en como hubiera cambiado mi vida si no le hubiera conocido, pero ninguno de nosotros a hablado nunca de ello en voz alta. Nos separamos y cuando lo hacemos nos quedamos mirándonos con muy pocos centímetros de distancia entre su boca y la mía y con ambas narices tocandose. No puedo evitar ponerle una mano en la cara, en principio para apartarle, pero supongo que el lo capta como una iniciativa para besarme y eso hace, me besa, me quedó atónito con los ojos abiertos, sin poder moverme, notó como Mangel intenta mover mis labios con los suyos para poder acceder al interior de mi boca con su lengua. No puedo evitarlo y cierro los ojos, dejó que Mangel separe mis labios y meta su lengua, empezamos a besarnos apasionadamente, mis manos siguen en su cara, pero no me había percatado de que las suyas estaban en mi cadera, notó como mueve una mano por toda mi espalda y con la otra me mueve hacia el, hago caso a su mano y mi cuerpo se va acercando a el de él. Se tumba y mi cuerpo va con el, nuestras lenguas siguen juntas, en un beso perfecto, como si estuvieran sincronizadas.
Sus manos empiezan a subir hasta mis hombros, con una empieza a bajar desabrochándome la chaqueta y la otra la va metiendo y tocando mi dorso. Mis manos están a cada lado de su cabeza, a si que aún no puedo hacer nada hasta que el acaba.
La chaqueta ahora está en el suelo, pero sus manos se meten a través de mi camiseta y me la quita, empieza a besarme el cuello y luego baja por mi abdomen, saboreando cada centrimeto. Es mi turno, le quitó la sudadera y la camiseta a la vez, estoy ansioso, a si que cuando se lo quitó directamente me lanzo a su barriga, besando la superficie y subiendo hasta su cuello, donde aprovechó, el suele tener cosquillas, a si que se mueve un poco y a la vez se ríe, subo un poco más y me encuentro su boca, nos vamos moviendo hasta ponerme encima suya, pero estoy tan concentrado en sus labios que apenas noto sus manos quitándome los pantalones. Un pequeño impulso me despierta de su beso cuando notó su mano dentro de mis calzoncillos, no puedo evitar desconcentrarme, aún que intento seguir besándole, su mano me lo prohíbe haciendo que mi boca susurre pequeños orgasmos. Cuando saca la mano, sonríe y se quita los pantalones, supongo que a conseguido su objetivo, ya que ahora mismo la tengo erectisima y dura, no puedo evitarlo y la verdad me da algo de vergüenza.
Estamos en calzoncillos, estoy encima suya, pero decido coger la delantera y me pongo rápidamente a la altura de su pene,el me a excitado, ahora me toca a mí, a si que le quito lo que separa su pene de mi boca y empiezo a mover la cabeza de arriba a abajo, saboreando poco a poco, escucho sus pequeños suspiros, aún que el intenta esconderlos, también noto sus leves movimientos y como frunce la cara cada ves que vuelvo a introducirlo dentro de mi boca.
No se cuánto tiempo llevamos pero lo suficiente para que casi se corra, antes de que lo haga me pide que pare y yo lo hago. Entonces me vuelvo a poner encima y le beso, para calmarlo y lo consigo. Baja sus manos por mi espalda y me quita los calzoncillos, (no sé cómo aún los tenía puestos) una de sus manos se dirige a mi pene y la otra al suyo, pero antes de introducirlo me pregunta:
- ¿Estas seguro? ¿Quieres que lo haga?- le respondo con un beso y bajando mi cuerpo hasta que su pene se introduce dentro de mi, un orgasmos sale de nuestras bocas y ninguno podemos disimularlo. Empiezo a moverme arriba a abajo, primero lento y cada vez más rápido, cada vez que elevó la velocidad nuestras bocas emiten orgasmos, cada vez más fuertes, notó golpes el mi pecho y en el de Mangel, cada vez con más fuerza, al igual que su pene cada vez entra con más fuerza y rapidez dentro de mi.
Llegamos a un punto en el que no se nos puede parar y la velocidad es igual a la de los latidos de mi corazón, no creo que pueda aguantas más y no sé cómo el puede, pero entonces me dice:
- Rubius, no puedo, no puedo, voy a correrme- baja un poco sus brazos desde mi cadera hasta su pene, para sacarlo y así no correrse dentro, pero yo le quito las manos y se las vuelvo a poner en mi cintura, el frunce la cara intentando aguantar:
- Hazlo- entonces su cara se relaja y noto una sacudida tanto interna como externa, lo ha hecho, se a corrido dentro de mi.
No puedo evitar gritar un orgasmo y desplomarme encima suya, aún con su pene dentro de mi, notó como su semen me recorre internamente y como gotea encima suya.
Intento relajarme, el ya lo está. Saca su pene, es una sensación rara, como si de repente una parte de mi se hubiera ido, pero aún así yo no me bajo de encima suya. Noto su corazón en el lado derecho de mi cara, cada vez se va ralentizándo al igual que el mío. Nos quedamos así durante bastante rato, aún con la respiración agitada pero el corazón ya normal. Me bajo con cuidado de encima suya y le doy un beso lento, cuando acabo escucho el tono de mensaje, cojo el móvil y veo más de diez mensajes de Alexby diciéndome que si viene ya, se me había olvidado por completo, le contestó y le digo que al final se a cancelado por qué Mangel se a ido, pero el está ahí, con migo, acaba de abrazarme, yo también le abrazo y nos llevamos un rato así, hasta que el se queda dormido.
Le pongo los calzoncillos y le tapó con las sabanas. No me lo puedo creer, acabo de hacerlo con mi mejor amigo, acabo de hacer algo de lo que siempre nos cachondeamos el y yo, algo de lo que siempre sacamos bromas, pero ahora ese algo es real y a pasado.
Siempre había pensado en Mangel como una persona a la que quería mucho, pero esta vez ese amor a pasado a algo más y ya está descubierto y no se puede volver atrás, pero no quiero, quiero que este momento no se borre nunca,quiero recordarlo y revivirlo está noche en mis sueños.
Por fin puedo afirmar lo que siento por Mangel y el también puede.

Me meto en la cama con una sonrisa y abrazando a mangel, le doy un beso en la frente y me duermo pensando en que está noche a sido una de las mejores de mi vida, y las que quedan.

Una broma muy calienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora