En tinta y sangre.

Capítulo I : El Pintor En El Pueblo.

París.

Era un día soleado y lleno de tranquilidad, un joven pintor estaba admirando su última obra, la presento al museo hace días, así que decidió tomarse una vacaciones bien merecidas. Pero pronto sabría que no sería algo fácil ya que en Francia no había quien no conociera su nombre, y el joven pintor tenía demasiadas/os Fans, aunque seguía insistiendo en que su arte no era nada fuera de lo común, todos insistían en que era algo extraordinario lo que hacía este.

Este pequeño pintor se llamaba Encre.
Encre era un pequeño esqueleto con ángulos aféminados. No es que fuera mujer, es que si se Atreviera a ponerse un vestido, probablemente lo confundírian.

Volviendo al presente.

Encre quiso ir de vacaciones a un lugar tranquilo para poder disfrutar de los paisajes. Así que cuando lo decidió, se despidió de los jefes del museo para que no se preocuparan, hizo las maletas y se fue en tren, dejando atrás todo lo que conocía.

Encre: Porfin... Suspiró.

Revisor: Buenas señor. Tiene usted su billete?.

Encre: Um? Oh! Claro, claro déjeme que lo busque. Revolvió sus bolsillos hasta que encontró lo que buscaba. Tenga.

Revisor: Gracias señor..... Espere. Usted es... Chasqueó la lengua, intentando recordar. Usted es el pintor de Francia.

Encre: Si. Soy yo.

Revisor: Vaya. Me alegro mucho de verle señor. Soy un gran admirador de sus obras.

Encre: Avec plaisir et merci.

Revisor: Pero está usted saliendo de Francia. Porqué?

Encre: A relajarme. Estresa bastante tener a media Francia detrás de ti.

Revisor: Media Francia? Medio mundo mejor dicho.

Encre: Y por eso me tomo un descanso, para alejarme de todo eso.

Revisor: Entiendo. Bueno, a sido una agradable charla. Gracias por su atención señor Encre.

Encre: Au revoir.

Encre miró por la ventana, estuvo contemplando el paisaje, era árido y silencioso por la noche pero por el día era algo digno de ver. Y eso era lo que estaba contemplando. Le venía la inspiración con tan solo ver las nubes.
Cuando llegaron a la estación, Encre hecho un último vistazo al tren antes de mirar hacia el pueblo, cargó con su equipaje y caminó hasta allí, todos le recibieron con los brazos abiertos ya que todos conocían al pintor. Este les saludó con una amplia sonrisa y se dirigió hacia su apartamento (había alquilado uno antes de venir) para relajarse. Cuando se tumbó en la cama pensó: ''Creo que este sitio me va a gustar.''
Se durmió para despertar poco después. Llamaban a la puerta.

Encre: Voy! Se dirigió a la puerta. Sí? Que desea?

???: Quiero un cuadro. Era un Esqueleto varón encapuchado, la capucha le tapaba media cara del lado izquierdo. Aunque se le veía una marca que hiba del nacimiento del ojo hacia el costado del craneo.

Encre: A Encre no le gustaba su tono, aunque su sonrisa era agradable, pero siguió siendo cortés Claro. Cuál le gustaría obtener.?

???: Me gustaría comprar uno que quede bien encima de la chimenea, que contraste con el colo de los ladrillos sabe?.

Encre: Que le parece este? Le enseñó un cuadro de un bosque que había llevado consigo.

???: Um.... Me lo llevo. Metió la mano en uno de sus bolsillos, sacando varias monedas. Cuanto?

Encre: Se lo regalo. No estoy trabajando, así que es gratis.

???: Vende gratis sus cuadros?

Encre: Frunció el ceño al notar el tono de burla en la voz de aquel esqueleto. Señor. No los vendo. Yo dibujo porque me gusta, si a usted le gusta el cuadro no veo inconveniente en que se lo lleve. Sonrío ampliamente.

???: Lo miró fijamente, sorprendido de la inocencia de aquel esqueleto. Entonces que tenga un buen día señor Encre. Coje el cuadro y sale por la puerta.

Encre: Se da cuenta de algo y sale para preguntarle una cosa. Espere! Como se sabe mi no- El desconocido se había esfumado. ........ Este se sintió triste sin saber porqué.

No te preocupes Encre.

''Volverás a verle muy pronto.''

Me encanta el Fallacy x Encre, así que decidí escribir sobre estos dos. Nos vemos en el siguiente capítulo.

Con cariño: Alekandra 17🐺