La historia Abrahamer♡

La historia Abrahamer♡ Cap.2

Al llegar por fin a Cádiz fui observando atentamente las bonitas calles de San Fernando, era un lugar muy tranquilo y acogedor.

Ángel me dio la señal de que ya habíamos llegado a la casa de mi tía Lucía, donde vivía también mi hermano Borja y al que no veía hace más de tres meses.

Bajé del coche muy entusiasmada y me quedé mirando fijamente la casa. Era grande y bonita, mi tía invirtió todo su dinero en esa casa en la que perfectamente cabía una familia de diez personas, era preciosa.

Bajé de las nubes y toqué al timbre muy nerviosa.

Esperé que alguien me contestara pero a lo lejos vi como mi hermano corría hacia la puerta con una sonrisa de oreja a oreja y muy acelerado.

-Borja: AY DIOS, YA ESTÁS AQUÍ. -dijo con la voz muy alzada y mientras abría la puerta para que Ángel entrara el coche-

Al abrir la puerta salió con mucha rapidez a abrazarme.

-Fati: Borja me haces daño...Borja...-comenzaba a agobiarme- ¡¡BORJA!! -grite riéndome-

Se separó de mi y soltó un largo suspiro de felicidad.

-Borja: Lo siento, perdóname por echarte de menos enana. -reía- ¿Entramos?

Mientras mi hermano saludaba a Ángel yo fui hacía la puerta y observando atentamente el jardín lleno de pequeñas estatuas, macetas de colores y una gran piscina que habían puesto hace poco por lo que veía.

Me adentre en la casa y atentamente observe el gran salón que tenía. Nadie se imaginaria que esta casa es de la famosa pastelera de San Fernando.

Empecé a investigar más las figuras tan extrañas que habían por aquel salón.

-Lucía: CÓMO ME ALEGRO DE VERTE FATI! -dijo mi tía mientras bajaba aquellas escaleras tan bonitas de caracol-

-Fati: ¡Tía Lucía! -dije entusiasmada-

Aceleré el paso para darle un cálido abrazo a mi tía, la persona que a partir de ahora me va a cuidar y dejarme quedar en esta gran casa, pero acogedora.

-Fati: Te veo muy sexy, estas genial en serio, ESTUPENDA, los cuarenta y cinco años los llevas perfectos. -me reí-

-Lucía: No me hagas más la pelota, que te vas a quedar a vivir aquí ya sí o sí. -reía- Tu estas ya muy grandota, y con un cuerpazo increible, ¿Y ESTE PELO? que suave y que marrón claro más bonito. ¿Y esos ojos color canela? Tía estas echa una buenorr....-le interrumpí-

-Fati: Lú, ya basta, que estas exagerando -me reí avergonzada-

-Lucía: Bueno, vale, vale, lo que usted diga. -reía- ¿Quieres ver tu habitación?

-Fati: Me encantaría verla ya -reía- Esta maleta pesa mucho.

Seguí sus pasos por las escaleras hasta llevarme a una habitación grande, espaciosa, acogedora y perfecta para mi.

-Fati: Creo que me he enamorado. -dije sorprendida-

-Lucía: Te dejé unos regalos encima de la mesa. -dijo entusiasmada-

Corriendo me dirigí hacía la cama y cogí la caja que había encima de ella. La abrí cuidadosamente.

-Fati: AAAAAH -pegué un gran grito- ME ENCANTA ESTA CÁMARA....Y...UN BLOC DE DIBUJO, GRACIAS LÚ, NO TENÍAS POR QUE HACERME ESTOS REGA....-me interrumpió-

-Lucía: Tómalo cómo una buena bienvenida. -reía-

Le abracé lo más fuerte que pude.

-Lucía: Ahora con esa cámara y ese bloc podrás seguir con tus hobbies, que ya me dijo tu madre que te robaron la cámara. -rió-