Del Lado De La Ley

Capitulo 9: No quiero olvidar

-Jackson ármate –La orden de Andres Cortes resonó en la sala

-Si, señor –Kevin se acerco a la mesa y cogió su pistola

-Sigo pensando que esto es pasarse –Alan rodo los ojos señalando la mesa llena de armas

-Dana lo cree necesario y para algo la he traido –Andres guardo el arma en su pantalón y miro a su hijo –Coge tu también un arma

-Solo es una reunión –El obedecio a su padre –Ademas dijiste que nos cedían el territorio

-Eso es lo extraño -.el fruncio el ceño –Según Dana esa gente siempre lucha por lo suyo, cree que es una trampa

-Según Dana –Alan miro a su padre con una sonrisa –Voy a empezar a ponerme celoso, a ver si me va a quitar el puesto de hijo.

-No tendrías que preocuparte de eso si te casaras con ella –y la propuesta de Andres dejo la sala en absoluto silencio

-Casarme –Alan se quedo pensativo –La verdad es que no me importaría tener una esposa así

Kevin que permanecía al otro lado de la sala, quieto, como si fuera un mueble mas de la casa, se tensó y tuvo que apretar sus puños con fuerzas para no contestar a esa estupidez. La puerta de la sala se abrió y Dana entro, no con una sonrisa, como el solia verla, no, ya no. Iba vestida con unas mayas, unas botas altas y una cazadora. Su pelo estaba totalmente recogido en una especie de trenza. Parecia que estuviera lista para meterse en una guerra y quizás era eso lo que estaba haciendo.

-Buenas –camino por la sala con el mismo aire de superioridad de siempre

-Espero durmieras bien –Alan le sonrio divertido

-Dormí bien –Dana le miro y le respondio con otra sonrisa –Pero no tengo el sueño tan profundo como para no darme cuenta que intentan abrir la puerta de mi habitación –se acerco a el -Apuesto a que te sorprendiste al ver que tenia echado el pestillo

-Ganas la apuesta –El se carcajeo

-Pues tuviste suerte –Dana lo miro a los ojos –Podría haberte dejado sin descendencia si te acercas a la cama –y con total tranquilidad saco su navaja de una de sus botas

-Hijo, me parece que aquí nuestra invitada te esta restringiendo cierto área de la casa y te aseguro que si un dia te levantas con un arañacito yo no me meteré –Andres dio una palmada a su hijo en la espalda y la miro a ella –Discúlpale, es un poco impredecible.

-Yo también –Dana respondio y camino hacia la mesa -.Veo que esta preparado

-Adelante, sírvete –Andres señalo las armas –Tus hombres ya están listos –fruncio el ceño por un instante -¿Sabes usarla?

-Apuesto a que mejor que su hijo –Dana cogio el arma y la cargo con maestria y rapidez, después la guardo en la parte trasera de su pantalón. -¿Nos vamos?