04| Rick's

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Después de la plática con Stiles, Derek se levantó y se fue de ahí con aires de suficiencia; Stiles sabía que eso no saldría bien para Derek.
«Allá él si quiere salir lastimado» pensó Stiles mientras recibía su café.

—¿Es tu novio?—Leyna se sentó frente a él y sus ojos tenía un brillo que Stiles no pudo identificar.

—Claro que no lo es.—aseguró Stiles. Su voz era tan gélida, tan fría que que Leyna pudo jurar que le quemó los huesos.

—¿Por qué te cierras de esa manera?

—Leyna..., te agradecería si dejaras el tema. Sabes que no me relaciono de esa manera con las personas.—Leyna le dio una mirada de reproche que sólo causó un poco de gracia en el castaño.—ya tengo mi vida planeada, mira; terminaré mi carrera, conseguiré un buen trabajo, adoptaré un par de gatos y un par de cachorros y ya tengo una vida feliz.

—Todos necesitan amor en sus vidas.—repuso la muchacha llevándose a la boca un trozo de pan.

Stilinski rió levemente mientras agachaba un poco la cabeza y negaba con la misma. ¿Por qué nadie entendía que él podría vivir sin pareja? No es algo indispensable para la vida.

Derek no sabia en que se había metido, pero estaba seguro de que saldría ganando el corazón del chico; tal vez dure un poco en lograrlo, pero estaba tan seguro de que lo lograría como que se llamaba Derek Hale.

Caminó por el pasillo que llevaba a la habitación de Stiles. Toco un par de veces la madera de la puerta con sus nudillos y esperó a que abrieran. Era increíble que se haya aprendido el camino tan rápido, usualmente tiene que pasar un par de veces más por el lugar para aprenderse un tramo del camino.

La puerta se abrió un poco y por la abertura se asomó la cabeza de Jackson, quien al verlo le sonrió y abrió más la puerta.

—¿Qué haces aquí, Jackson?

—Pasando el rato con Scott.—se alzó de hombros y después se les unió Scott.

—Stiles no está, Derek.—anunció dando un sorbo a la Coca-Cola que traía Jackson.

—Lo sé, vengo a hablar contigo.

—Bueno, pasa—hizo un ademán hacia el interior empujando a Jackson en el proceso.

Derek entró y vio que otros dos de sus amigos estaban ahí, los miro extrañado pero no le tomó demasiada importancia.
Scott lo miró con ambas cejas alzadas incitándole a hablar, ya que no había dicho nada durante un minuto.

—¿Cuáles son las flores favoritas de Stiles?—soltó sin importarle que sus amigos estuvieran ahí escuchando.

Scott estalló en una sonora carcajada que desconcertó a Derek. Él no había dicho nada gracioso ¿o sí?. No, definitivamente no lo había hecho.

—Perdón, perdón.—dijo limpiándose una lagrima que causó la risa. Suspiró para calmarse y miró a Derek.— Si realmente quieres una oportunidad con Stiles, olvídate de las flores. Invítalo a ver un maratón de Star Wars con mucha, mucha comida, eso seguro te da puntos con él.

—Entendido, pero ¿qué hay de malo con las flores?

—No le gustan—respondió tumbándose en su cama.

—¿Alguna otra cosa que deba saber?

—No lo presiones. Sino terminará  odiándote.

—Está bien, entiendo.

Abrió la puerta y justo cuando se dio la vuelta para salir, Stiles iba a entrar; chocaron y el café que traía Stilinski se derramó sobre su camiseta.

Let me love you| Sterek.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora