Arco 2: ¡Los dragones también pueden amar!
Después de ser abandonado por una entidad semejante a un dios en un misterioso mundo, junto con otros 10 millones de habitantes del planeta Tierra, Alkelios Yatagai (renombrado por esta sospechosa entidad)...
Ohayō minna-san ~~♫♫ Por fin después de mas de 1 mes, llego de nuevo mi droga para seguir viviendo.
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Y como yo soy muy gentil, aquí les traigo la de ustedes. Por cierto, ya casi alcanzamos al autor... Que va, si apenas llevo como el 60% de la traducción. Asi que tranquilos, que todavía les queda mucho por ver.
Las noticias que la princesa Elleyzabelle me trajo fueron devastadoras. Cuando cerré la puerta detrás de mí, me sentí como si no tuviera la fuerza para soportarlo, pero como caballero, no podía permitirme sucumbir a mi situación actual. No se me permitió demostrar tal debilidad...
Traté de pensar de una manera positiva, que tal vez de alguna manera en algún lugar todavía había una pequeña luz de esperanza. Si ahora mismo luchaba en una campaña de guerra y me encontraba atrapado en una fortaleza rodeada de tropas enemigas, renunciar o sucumbir a la desesperación sólo reduciría la moral de mis tropas. Así, tenía que mantenerme fuerte y luchar hasta el final, porque nunca podría saber cuándo aparecería ese rayo de ayuda.
[¿O suerte?]
Tomando una respiración profunda y con una mirada tranquila en mi cara, trace mi camino a través del palacio real hasta que alcancé la salida posterior. Desde allí, se trataba de un camino directo a la gran herrería junto a la pared, donde los mejores herreros del reino forjaban sus armas y armaduras.
