CAPITULO 9

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Lago Titicaca, Quito, 1534.

<<La poesía la escribimos los perdedores>>, pensó Pedro Alcazar <<y es una forma de desenvainar palabras para batirte en duelo con la pena y la melancolía. Es como echar cuentas con la vida, tanto me dio, tanto me debe. Son las arrugas del alma, cada marca en la cara de un hombre cuenta algo de él, y los poemas son las arrugas de la piel que recubre el alma de cualquier perdedor. Muchas heridas sin cerrar sangran sonetos en algún papel>>.

Pedro dejó escapar alguna que otra lágrima mientras recordaba a Azaak. Pedro se dió cuenta que la soledad tenía labios de mujer.

Siempre (Adios Dulcinea Parte II)

Como ayer, te busqué

en el doble techo de mi corazón
Y hallé nostalgia de ti... Soledad.

Comencé a llorar

estos versos bañados en canción,

quiero volver a dormir con tu olor.

Desahucié tus besos de mi memoria y digo Adiós,

te déjare marchar...

Duele tanto vivir, duele siempre sin ti
Necesito tu olor, Necesito tu calor
Quiero perfumar mi alma con gotas de ti

y archivar mi dolor

en el doble fondo que hay en mi colchón.

Como ayer, me perdí

en el laberinto de caminar sin ti,

grité mi amor Donde estás, y lloré.

Tú me preguntabas ¿Cuánto te quería yo?
Te Quiero Siempre Amor!

Duele tanto vivir, duele siempre sin ti
Necesito tu olor, Necesito tu calor
Quiero perfumar mi alma con gotas de ti

y archivar mi dolor

en el doble fondo que hay en mi colchón.

Pinto amaneceres sin saber

cual es el color que ahora tiene tu piel
Canto despedidas en papel ,

desechos de tu querer.

Duele tanto vivir, duele siempre sin ti
Necesito tu olor, Necesito tu calor
Quiero perfumar mi alma con gotas de ti

y archivar mi dolor

en el doble fondo que hay ...

Te Quiero Siempre miAmor...


GAIA  ATLANTIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora