19 de julio (Parte 2)

19 5 0
                                    

—Dime
—Si, es lo mejor, tú tienes que estudiar, ya vas a entender que esto es lo mejor ,esto está decidido no me puedo echar para atrás
—¿Ya no vamos a hablar entonces?
—No Dulce, ya no
—Tuviste  oportunidad para eso

—Mi orgullo ya está por los suelos, al rogarte y al decir para intentarlo tal vez no ahora pero sï lo único que podías hacer era dejarla
—No puedo simplemente—
—Ay Zye, no se que quien es más tonto tú que no te vas o yo que espero a que me detengas...
¿Zye? ¿Estas seguro de que nos vamos a dejar de hablar?
—Es lo mejor, me duele bastante
—Y qué hay cuando me sienta sola y quiera hablar con alguien
—Yo ya te dije, tantas veces te he hablado de eso
—Es que esta vez lo tienes determinado y estás decidiendo alejarme de ti, eso jamás lo había hecho, ¿Lo haces por ella cierto?
—No lo hago por ella y lo sabes Dulce—

(Tose nuevamente)
—Estás muy mal—
—Ah si pues—
—Te estaba diciendo que ahora te vas a alejar de mí en verdad no quiero eso... Pero sabes cuando sienta que te necesito o cuando yo te hable de que quiero saber de ti o algo así no me hagas caso, solo fíjate en lo que pasó la ultima vez, ya no sabíamos nada del otro y por esa copita de vino te busqué nuevamente y me hiciste caso.
—No, ten por seguro que esta vez no será así—
—Voy a seguir con ese resentimiento de hace tres meses para que nos olvidemos mutuamente más fácil...
Te vas a ir y me vas a dejar otra vez?—
—No quiero que te confundas gorda, tienes que hacer tu vida, sé feliz—
—¿En qué me voy a confundir?
—No sé... En que algo pueda pasar entre los dos y bien sabes que eso no puede ser así yo quiero que seas feliz y verte feliz también eso deseo.
—Bueno... Que te puedo decir lo importante es que estás bien,
Es raro que no esté llorando y que no esté haciendo un mar de lágrimas es porque tal vez ya me lo esperaba, de alguna u otra manera esto tenía que llegar, hace tiempo que esto se acabó...—
—Ya no vuelvas ¿Si?—
—Ya no voy a volver, no te preocupes—
—Así veas que aún te quiero ya no vuelvas, yo sinceramente ya no quiero que me rompan el corazón otra vez, ya lo hiciste y eso ya fue suficiente, eso me hace daño, nos hace daño.

(No sabe que responder supongo, se queda callado y no dice nada, yo quiero seguir hablando con él así que le cambio el tema de conversación)

—Oyee... Mi cuaderno—digo casi gritándole con una sonrisa
—Es mío— dice tiernamente
—Quiero mi cuaderno ¿Tii?, aunque sea mándame las fotos, yo lo hice, me pertenece, si eso te recuerda a mí y quieres saber de mí ya sabes donde me puedes encontrar...
Te quiero mucho—
—Yo tambien mucho mucho, ¿y tú mucho?
—Mucho, mucho, mucho—
—Me extrañas—digo temiéndo su respuesga
—Jamás te voy a dejar de amar—dice Zye rápidamente
—No digas jamás—
—De verdad jamás lo voy a dejar de hacer—
—Vas a ver que encontrarás a alguien que te hara cambiar las expactativas que tú te has metido en la cabeza, y la la vas a querer como a mí e inclusive hasta más.
—Yo no necesito a alguien te tengo a ti—dice Zye
—Sabes qué? Te quiero, te quiero, simplemente te quiero tonto.





Simplemente al escribir esto me hizo hizo derramar un par de lágrimas, aún no me imagino a ella y a ti en una cama poseyéndola mientras que yo aquí deseándote de una manera que ya no me deseas, te quiero, y obviamente te extraño Zye.

Días Sin ZyeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora