¿Can You Hear Me? | Vkook |

Es una promesa

Un año, un largo año paso desde lo ocurrido. Desde ese día hubo algo que cambió.....Jungkook ya no era tan cercano a mí, aunque de vez en cuando hablamos. Siempre llevo conmigo ese cordón rojo como pulsera. No recuerdo muy bien su rostro, tampoco sé su nombre, pero siento que esto me hace tener un tipo de cercanía con ella.

-¿Estás listo Tae?- preguntó Suga hyung terminando de alistarce para salir al escenario. Como siempre solo asentí y todos nos preparamos y nos pusimos en nuestros lugares.

El concierto al fin terminó. Nos fuimos del escenario no sin antes despedirnos de todas las personas que fueron a vernos con alegría . Al salir sentí una mano en mi hombo, giré para toparme con el rostro de Jungkook. Sus ojos miraban hacia abajo mientras sostenía algo en su mano.

-Toma, se te cayó- dijo con voz baja. Me extendió el cordón rojo el cual tomé un poco rápido. Confundido solo asentí ante su acción, él simplemente no me vio en el corto tiempo que hablo conmigo y se fue siguiendo a Jimin, mostrando una sonrisa tan familiar......Así sonreía conmigo.

No quería seguir con la duda del porqué él se comportaba de esa manera tan distante conmigo, así que esperé hasta llegar al hotel donde nos hospedábamos. Fui a su habitación y toqué dos veces. Abrió la puerta y al verme puede ver sorpresa en su rostro, haciendo que enseguida bajara su mirada.

-¿Podemos hablar?- trataba de no sonar nervioso, pues sí lo estaba, lo estaba porque tenía miedo de lo que pudiera decirme en cualquier momento. El es uno de mis mejores amigos-. Claro.. .- susurró apenas audible kook.

Una vez estando en su habitación, tomé valor para poder formular mi pregunta, una que he querido hacer desde hace casi un año-. kook ¿Tu me odias?- al decir esto el menor alzó con rapidez su mirada, abriendo sus ojos de para en par mientras negaba. Mi palpitacion estaba acelerada y mi cabeza empezaba a dar vueltas. Tenía miedo, realmente tenía mucho miedo de perder a una amistad como la suya-¡Yo no te odio Tae! Es solo que ...- se detuvo y observó mi muñeca, justo donde tenía la pulsera con el cordón rojo-, solo pensaba que si me alejaba, podría ser que quizá seas mas feliz. Encontraste al fín a esa chica, solo basta con buscarla en la ciudad donde apareció y ya. Mis consejos solo te causaron daño. Así que....-una sonrisa boba se dibujo en mis labios.

Sin pensarlo ya estaba rodeando a Jungkook con mis brazos, formando un abrazo del cuál se sorprendió. Sentí como mi hombro poco a poco se iba humedeciendo, así que solo pase mi mano por la espalda del chico acariciándola, tratando de confortarlo-. Lo siento ...lo siento tanto, por todo . Sólo quería lo mejor para mi hyung- su voz entrecortada hacia que un nudo en mi garganta comenzara a nacer-. Lo sé -respondí -, y es por eso que no debes disculparte. Y al contrario que tú, yo te doy las gracias por preocuparte por mí, por ver mi felicidad, aunque...no podría ser feliz sin ti- me separé de él limpiando tiernamente sus lágrimas. El menor apenado terminó de limpiarlas él sólo.

Di un gran suspiro bastante aliviado. Jungkook veía el suelo mientras jugaba con sus dedos. Tomé sus manos de manera algo brusca haciendo que ete alzara la mirada sorprendido y confundido. Sonreí y le miré a los ojos por unos instantes-. Prometeme algo, que nuestra amistad nunca se acabará, que nosotros siempre seremos amigos- Jungkook me veía con ojos brillosos y labios entre abiertos. Bajó de nuevo la mirada con una sonrisa serena y asintió-.¡Promesa de meñique!- dije con entusiasmo, a lo cual el menor rió divertido y volvió a asentir. unimos nuestros meñiques formando asi la promesa.

-Es una promesa- sonrió como suele hacerlo, así que igualmente lo hice. Mostré mi sonrisa cuadrada mientras cerraba mis ojos de manera alegre. Me alegra el saber al fin que mi mejor amigo no me odia, o sucede algo malo entre nostros.

Lo único que va mal, es no saber dónde puede estar ella...Quizá me preocupo demasiado, pues ella ya es alguien que pudo olvidarce de una persona que esta siempre en diferentes lugares, alguien que tiene miles chicas que lo "aman", alguien que al parecer ya no busco jamás, sin pensar que posiblemente...estaba dañando a quien más me ha querido.