22 de febrero de 2017

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2:25 pm

Luhan había dejado el empleo de la cafeteria y acomodado sus clases de manera tal que pudiera estar en la Editorial W&O el mayor tiempo posible sin descuidar la universidad. Su trabajo en el hotel no había cambiado, trabajaba los fines de semana, a partir del viernes por la noche.

Afortunadamente el área donde estaba no requería demasiado contacto con Sehun. Lo veía cuando regresaba de comer. Un 'Hola' y 'Hasta luego' era todo lo que decían y no volvían a verse. Eso estaba funcionando para ambos, ya que la única noche que estuvieron cerca, el pelinegro parecía un cazador. Al menos esa noche, ninguno pudo dormir, sus cuerpos estaban lo suficientemente exitados y las manos no fueron de mucha ayuda.

Con Junmyeon era diferente, a veces tenía que informarle sobre las sesiones programadas para alguna de las revistas 'amigas' o las que tenía con la propia editorial. Si bien, se mantenían cordiales, Junmyeon no dejaba de vigilarlo, lo veía como un peligro latente a cada paso que el rubio daba.

Esa tarde tenían una sesión fotográfica con uno de los modelos mejor pagados de la industria. Sin embargo, llevaban media hora esperándolo y no había rastro del hombre. Sabían que a veces se daba aires de grandeza y esa vez les había tocado ser parte de sus cinco minutos.

— Cancela la sesión.  — Yifan estaba molesto.  — Recojan todo y váyanse. 

Sehun también se encontraba en el set, sentado frente al computador.

— Por qué no le pides a tu asistente que llame nuevamente.

— Luhan ¿Qué te dijeron?

— Que ya debía de haber llegado, lo mandaron desde hace más de una hora.

Yifan apretó la mandíbula y Minho, el fotógrafo de la editorial intervino.

— Yifan, deja de hacer drama, todavía podemos tener la sesión de fotos.

— No estoy para tus bromas, no en este momento. —  Yifan se puso de pie.

— ¿Cuál es tu idea? — Sehun preguntó.

— Luhan, ven. — Llamó el fotógrafo. 

Luhan se acercó cauteloso. Se había hecho amigo de Minho y no le gustaba la forma en la que esa situación se estaba tornado.

— ¿Confían en mi? — Minho les preguntó.

— A menos que tengas a un modelo de repuesto en menos de quince minutos, puedo confiar en ti. — Yifan miró con cara de pocos amigos al fotógrafo y a su asistente.

— Dame treinta minutos y lo tendrás. — Tomó a Luhan del brazo. — Ah, necesito que Luhan venga conmigo, sino te importa.

Sehun alzó las cejas y los miró sarcástico.

— Lo que sea que estés tramando, espero que sea bueno. — Yifan estaba cansado.

— Mejor de lo que crees. — Minho se llevó a Luhan, el cual se mantuvo en silencio. — Wendy, te necesito también y a todo tu kit de maquillaje. Ahora. 

La chica tomó su maletín y los siguió al camerino.

— Wendy, comienza a maquillarlo.

— Mmh... — Wendy observó a Luhan y comenzó a sacar varios lápices y brochas.

— ¿Qué? ¡No! — Luhan se hizo hacia atrás. — Espera, yo no puedo hacer esto.

— Si puedes. — Minho lo sentó sin mucho cuidado.  — Eres mucho más guapo que ese modelo de quinta y por una vez en tu vida deja que el mundo lo vea. Si tu no eres consiente de ello alguien más lo hará. Ahora, vas a sentarte y dejarnos a nosotros hacer nuestro trabajo.

VERDADERO AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora