Carta V

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Julio 31, 2017

Cariño:

En el incontrolable silencio de aquella noche, escuche tu voz quebrantar, tu garganta arder, y tu cuerpo demoler. Observándote desde adentro, me duele mucho que pases por todo esto. Sin embargo, mirándolo desde el lado positivo mira hasta dónde has llegado en el trayecto! Sé que te sientes sola, sé que aún te sientes vacía. Pero que ganas dándote por vencida? Que me parta un rayo si lo decides algún día, pero mi reina. Por verte vencer yo daría la vida, que te juzguen y que tú les sonrías, que algún día aprendas a valorar tu vida. Siento que desde muy adentro te andas perdiendo... entre ansiedad, depresión, alcohol,   llanto, dolor. Ya no sé ni cuál es peor; aunque odio que el mundo te obligue a ser del montón. Y si tratas de ir contra la corriente, te tiran por un rincón y te humillan hasta que sientas la decepción. Aún así princesa, tienes que levantarte y sacar fortaleza. Por qué no a cualquier santo se le reza, que por más angelical que sean todos tienen cuernos en la cabeza. Mirate al espejo, levántate y pon alto ese cuello. Que la vida es buena, pero a veces da dolor de cabeza. Así que nunca pierdas la certeza y por la juventud date una cerveza.

PD: Te quiero desnuda, quitando toda atadura. Amándote a ti misma, te quiero agria, te quiero pura.

Cartas a mi misma Donde viven las historias. Descúbrelo ahora