Un día más llorando

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(Lunes 31 de julio de 2017)

Bueno, para este primer capítulo, por así decirlo, pensaba escribir algo, si bien no del todo alegre, por lo menos no deprimente; más que nada yo escribo lo que siento de acuerdo a como me siento. Pero pues… la vida da demasiados giros, tantos, que ni la palabra “demasiado” alcanza.
No voy a decir que mi vida es la peor, porque sé que no es así, sé que hay gente que la está pasando mucho peor que yo, y eso en lugar de hacerme sentir mejor, me hace sentir como una chica pelotuda que se queja de problemas insignificantes cuando hay personas con problemas realmente serios. Pero entonces la pregunta es ¿en verdad es el hombre mismo el que se complica solo la vida? La respuesta es si, el hombre mismo se complica la vida, así que tienen razón los que dicen que la vida es fácil, que es el hombre el que la complica. En sí la afirmación es correcta, solo que la entendemos mal, pero igualmente algo de erróneo tiene la cita. Primero que nada, el hombre si es el que se complica la vida, eso no está en duda, no es el hombre como tal, es el hombre en sociedad, en grupos, porque ¿quién provoca las guerras? Grupos de hombres, en los cuales a veces puede que haya cierto personaje que se destaque más, pero la final no es solo él quien hace a la guerra, es él y bastantes hombres más; otro ejemplo más de acorde a la sociedad actual es por ejemplo el cuestionarse ¿por qué hay que trabajar? Yendo un poco más en profundidad ¿por qué hay que ir a la escuela? Muchos dirán que uno va a la escuela para ser alguien en la vida, pero…. Ya somos alguien, así que esa afirmación sería errónea, otros tantos dirán que para tener un futuro, pero… Tenemos un futuro bueno o malo, tenemos un futuro, pues no existe un final como tal, el tiempo sigue avanzando y no lo podemos detener, para lo cual siempre hay futuro, excepto cuan llega el único final existente que es el propio. Entonces ¿por qué tenemos que ir a la escuela? Pues la respuesta es muy sencilla, acudimos desde pequeños para que el sistema nos forme y nos molde de acuerdo a su conveniencia, ¿para qué? Para darle valor a nuestra fuerza de trabajo. Porque el sistema actual, el sistema capitalista, es esclavitud disfrazada de libertad.
En conclusión, es el sistema, y la sociedad que lo sigue, el que hace a la vida más complicada, porque la vida en si es simple y sencillamente difícil a su manera, pero complicada…. Complicada la hace el hombre, la sociedad y principalmente el sistema.

Hoy a la mañana, mi padre me levantó para ir al colegio, era el primer día de clases después del receso escolar de invierno; ya había desayunado, ya me había alistado, el día anterior había arreglado mi mochila y todo lo que tenía que llevar a la escuela, la tarea, los libros, la carpeta, el cuaderno de comunicados, la cartuchera, había puesto todo lo que había que llevar al día siguiente, o eso creí yo…. Antes, no sé porque no me di cuenta antes, justo en el momento cuando estaba por salir, justo en ese mismo momento, se me ocurre revisar que tuviera todas las tarjetas de transportes necesarias para viajar, ya que yo vivo en gran buenos aires y mi escuela está en capital, entonces por ese motivo tengo diversas tarjetas de transportes, la del tren, la sube y otras cuantas más de diversos colectivos, capaz no todas las utilice el mismo día, pero puedo ir y venir a y de la escuela de distintas maneras, para lo cual tengo una carterita donde guardo todas las tarjetas. Yendo al punto, revisé y no estaba la sube, lo cual me extrañó ya que yo casi nunca las saco más que en el momento justo en el que las tengo que utilizar, o cuando, por ejemplo, en el caso de la sube que la tengo que recargar. Para mi mala suerte, como he dicho, me di cuenta en el momento exacto en el que ya estaba por salir. Mi padre lógicamente me re cagó a pedo, y con justa razón. Y no me voy a tratar de justificar, no voy a tratar de meter excusas, ¿para qué? Si en el fondo sé que es mi culpa, sé que soy muy tonta, muy tarada, muy pelotuda, muy estúpida; y no es por hacerme la inocente, pero es la verdad, pierdo todo y no es una exageración, perdí una tarjeta de un colectivo y nunca jamás la encontré, y eso habrá sido hace un mes y medio o dos meses, perdí la sube ya dos veces anteriormente, aunque la encontré después las dos veces, el otro día había perdido el tablero dentro de mi propia casa, también el jueves perdí la guitarra mientras habla por teléfono, soy demasiado despistada. Estas y más razones más hacen que la gente se aleje de mí, con excepción de mis padres, que yo sé que ellos piensan igual, no soy la hija que ellos esperan, soy solo un estorbo y un gasto en la familia, sé que ellos y todos me odian o por lo menos mal les caigo, y a los que no, es porque no les importo tres carajos, fingen ser mis amigos, pero en realidad son personas muy falsas, o me quieren, pero todavía no me han conocido del todo bien.
Entonces, falté a la escuela, y mañana, mañana seguro muchos me van a preguntar porque falté hoy; conozco a casi media escuela, y no es una exageración, son diecisiete primeros y dieciséis segundos, más los de tercero, cuarto, quinto y sexto (por si no lo mencioné voy a una escuela secundaria técnica). Retomando lo que decía; siempre que cuento historias así, cuando pierdo cosas, o como la ves que me dio sueño en clase de educación física por lo vaga que soy, suelo darle un toque de gracia para no sentirme tan mal conmigo misma, aunque en el fondo siento como si se burlaran de mí, no como si se rieran de la acción o cosa que estoy contando, pero esta vez no tengo ganas de eso, no tengo ganas del teatro de risa, así como tampoco tengo ganas del disfraz de la “chica alegría” que a todos les gusta, por que sé que no quieren ver mi otra realidad, mi otra yo, sé que no tienen ganas y no están dispuestos a escuchar a mi lado REALISTA, es por eso que simplemente les voy a decir “Estaba yendo a la escuela, me bajé del segundo colectivo y un par de chicos me robaron el celular, entonces decidí volverme a mi casa por el susto, para lo cual no fui a la escuela”. Considero que eso es más fácil a decirles todo este discurso largo en el cual se que se van a aburrir, no van a prestar atención y mucho menos entender. Mejor lo escribo y lo subo acá, y quien me quiera escuchar, lo va leer en sus tiempos y en sus momentos.
Todas estas razones son las que me llevan a pensar en la vida y en la muerte, en lo que son, y de repente me viene una pregunta, ¿por qué cuando estamos en peligro rogamos por nuestra vida? Por ejemplo, en las guerras, los militares que siguen las ordenes de sus superiores, por ejemplo, matar a alguien, aun sabiendo que eso está mal, pero ¿por qué lo hacen? Fácil, para que ellos no sean los ejecutados, lo cual no tiene sentido, ya que para qué quieren vivir si van a ser esclavos de sus comandantes, lo mismo pasa ahora, no es necesaria una guerra, es solo para ejemplificar, para que trabajar, para que vivir si voy a seguir siendo esclava del sistema; no digo que trabajar sea malo, pero ser explotado por alguien más, eso si lo es.
Y no podemos vivir el resto de nuestra vida esperando que cambien las cosas por si solas, porque nada se hace sin hacer esfuerzo; pero eso es algo que la sociedad no entiende. Y yo, yo no voy a cambiar nada sola, yo no puedo hacer que el mundo cambie, yo no puedo hacer que la gente comprenda, yo no puedo hacer diferente esto; o por lo menos no sola. Apenas soy una chica de trece años, con su propio criterio de lo que es el mundo visto desde lo poco que he vivido.

Y bueno, estaba yo ahí, un día más llorando, no solo por lo estúpida, tonta e ingenua que soy, si no por frustración, de este mundo, de que no lo voy a lograr cambiar mi en un millón de años, el sistema, los políticos, las grandes empresas y grupos económicos no me lo van a permitir, no voy a lograr nada.

Por el momento me despido, y si alguien que en verdad quiera, puediera acercarse a hablar conmigo, talvez pueda darme algún consejo o no sé…. Y muchas gracias a quién en verdad se tomó la molestia y el tiempo de leerlo todo, en verdad muchas gracias, se lo agradezco de todo corazón. Voy a estar subiendo cada determinado tiempo textos, escritos, o no sé que sea esto, yo lo tomo como un diario personal público de mí y de vida, que lo hago para los que quieran conocerme un poco más, quieran saber y entender a mi mente y a mi forma de pensar; y si nadie lo lee, y si a nadie le gusta, igual voy a seguir escribiendo porqué como ya lo he dicho, lo hago para desahogarme, creo que me hace sentir mejor.

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