Mi problema es que entiendo demasiado

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Martes 12 de septiembre del 1017

No sé si recuerdan a María, bueno, ella me volvió a pedir disculpas, yo de alguna manera se las acepté, es más, fuimos de compras las dos. Pero toda la noche estuve pensando en eso, me creía estúpida por haberle aceptado sus disculpas, fue entonces cuando al día siguiente estábamos en clase, y mientras Victoria leía un cuento que la profesora le había hecho leer en voz alta para todos, me volvió este pensamiento a la mente, no me interesaba mucho ni el budín ni la maleta gigante de la historia, creo que eso no tenía ni la menor relevancia en el momento con respecto a lo que pasaba por mi cabeza, estaba debatiendo si en verdad había sido estúpido disculparla, y si así era, que tan estúpido era, como de costumbre, un pensamiento me lleva al otro y al otro, lo cual lo vuelve interminable, empecé a observar a mi alrededor, todo era tan igual y a la vez distinto que antes, ví abrazadas a María y a Victoria, y recordé cuando María confiaba más en mí que en nadie, cuando me decía lo mal que le caía Victoria, ví lo bien que se llevaban ahora, cuando María me dijo que Victoria la hace reír bastante, ví como yo estaba ausente en sus mentes; posterior a eso pasó frente a mí Clair, recordé que en una de las conversaciones que había tenido con María, había mencionado que Clair me había visto unas cortadas en el estómago, me puse a pensar en lo poco que le preocupaba, en lo bien que antes me llevaba. Poco a poco los ojos se me ponían llorosos, cada pensamiento, cada recuerdo solo me hería, quería llorar pero no quería que nadie viera, no quería que nadie pensará en lo llorona y en lo sensible que soy, aunque es verdad esto, no quería que alguien siquiera lo insinuara. No aguantaba más, mis ojos se llenaban de más y más lágrimas, logré contenerme, pues para mí suerte justo había un descanso; subí al último piso, me metí al baño y me encerré, no quería ser encontrada, me puse a pensar en todo, me puse a tratar de razonar todo mientras mis ojos llovían poco a poco, otra orda de pensamientos me atacó, lo pensé varias veces y aún así no me arrepiento, cogí mi celular y le escribí a María, le dije que no la podía perdonar, ni a ella ni a mí, que no me hablara más. Pues por lo visto eso no la hizo enfadar ya que apesar de todo seguimos hablando.

En una de estas conversaciones con ella, me dí cuenta que la razón por la cual pienso demasiado las cosas es porque tengo miedo a hacerlo mal, a sentir el odio de alguien más; el error que cometí hace un tiempo me sigue afectando en la actualidad.

Cometí una equivocación como cualquier persona, fuí muy estúpida, actué sin pensar y no analicé los problemas que me podía causar todo esto. Pedí perdón muchas veces sin entender realmente nada de lo sucedido, hasta que porfin entendí todo lo que había dicho y hecho, toda la gravedad del asunto, esta ocasión, habiendo entendido realmente todo pedí perdón un millón de veces más, un millón de veces más en las que me rechazaron, me cansé de insistir así que mejor desistí, poco a poco me fuí hundiendo en mis pensamientos y me fuí alejando de ellos, su enojo me dolía y mis pensamientos eran una tortura. Pasé tanto tiempo sola, sintiéndome sola, que me acostumbré, cada noche me preguntaba la razón por la que había echo eso, la razón por la cual había cometido el error. Ya habiendo entendido a la perfección todo lo grave que era, ellos seguían sin perdonarme, entonces comencé a creer que en verdad no lo había entendido, fuí agrandado en mi cabeza todo, mi luz interna se esfumaba.

Hoy, ellos ya me han perdonado, está apunto de terminar el año y recién me han perdonado al cien por ciento, y no los culpo, creo que lo merecía, pero ya no puedo ser la misma, quisieron enseñarme y lo han hecho bastante bien, quisieron que aprendiera y lo he hecho muy bien, tanto, que sin darme cuenta lo aplico en mi día a día. Me equivoqué, actué sin pensar, ahora por eso estoy condenada a nunca más dejarme llevar, no puedo hacer que las cosas fluyan, surjan solas, antes de hacer algo le doy mil vueltas, lo pienso bastante, me tomo mi tiempo, pienso y luego actuo, lo cual es un gigantesco problema para mi, ya que trato de planear todo, que todo salga bien y de acuerdo a como yo lo pensé, talvez alguien crea que eso es algo bueno, pero no lo es, creo que era mejor hacer las cosas y luego analizarlo, porque no trataba de predecir, no trataba de visualizar las cosas, no me llevaba desepciones porque no esperaba nada, pero un error gigante lo arruinó, es parte de mi ahora, no lo puedo evitar aunque quiera, lo aplico en todo, desde asuntos escolares hasta en las relaciones interpersonales, si no salen las cosas tal cual lo previsto simplemente me rindo. Seguramente muy en el fondo tengo miedo a que pase algo igual, a comer un error igual de grande, así que prefiero prevenir. Ni estoy más loca que antes, estoy más cuerda que antes lo cual me lleva al borde.

Al principio del año, María me ayudaba con mis supuestos problemas sentimentales y emocionales, haciendose llamar sicóloga, ahora, le empecé a contar un poco de lo más actual, de mis emociones y sensaciones de ahora, noté como se iba sintiendo nerviosa, fue cuando decidí preguntarle ¿Querés seguir siendo "sicóloga"? No era necesaria una respuesta, pues ya sabía cuál era...

De aquí me vienen muchas cosas a la mente; cuando le empiezo a contar mis problemas a las personas, y aún más mis pensamientos, todos siempre se terminan hartando, terminan huyendo, tal vez transmito demasiada tristeza, pero de ser así, no digo que no escapen, yo seguramente haría lo mismo, pero por lo menos que no se enojen, que me trataran de entender, así como ellos se hartan de estos pensamientos, yo también lo hago, pero a diferencia de ellos yo no puedo huir, ¿Cómo escapar de la mente? ¿Cómo escapar de tus propios pensamientos?

Tal vez no estoy tan loca como creo estarlo, tal vez no esté tan safada como imaginaba, tal vez estoy cuerda, tal vez estoy muy cuerda, quizás, quizás ese sea el problema, que estoy demasiado cuerda, que entiendo el mundo muy bien, tal vez ver el mundo como es realmente sea el problema, tal vez sea mucho más feo de lo que uno esperaría

Pensamientos De Mi Vida🌙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora