Ya No Soy La De Ayer.

Cap.20

Narra Mauricio:

En medio de la película Line se quedó dormida justo a mi lado, parecía un angelito mientras dormía acorrucada en mi hombro y su rostro hundido en mi cuello, es linda, muy hermosa, su belleza no se compara con ninguna, tiene un corazón noble y lleno de pureza, aunque ahora ese dulce corazón este disfrazado y cubierto de sentimientos que no debería tener.

Su cabello cubría parte de su rostro, con mi mano derecha fui moviendo el cabello que no me permitía mirar a la perfección su rostro, una vez que ningún cabello estaba en rostro pude apreciarlo completamente, me acerque a su rostro y bese su mejía.

Continúe mirando la película que aún no había terminado del todo, al poco rato la puerta se abrió y por ella entraron Matías y Saac.

Matí: ya regresamos- medio grito

Yo: Sshhh-lo mande a callar

Saac: si, si ya entendimos-sonrió-Está dormida ¿verdad?-dijo señalando a Line que dormía a mi lado

Matí: Okay-dijo seriamente mientras tomaba asiento en el sofá junto con Saac-Veo que se divirtieron mucho.

Yo: digamos que algo asiréis

Matí: deberíamos llevarla a su habitación-propuso

Yo: llévala tú-le dije riendo

Saac: Pero no la vallas a tirar-dijo riendo

Matí: Jamás la tiraría estúpidos-gruño mientras se acercaba a Evangeline para cargarla.

Narra Matías:

Cargue a Line con cuidado y me dirigí a las escaleras, se miraba tan tierna e indefensa, era todo un ángel durmiendo, no parecía alguien capaz de ser quien ahora es. Quizás cambio por fuera pero por dentro era la misma niña inmadura y confiada que llego un día a las puertas de nuestra casa.

Entre a su habitación y la recosté despacio para no despertarla, apenas la puse en su cama se dio la media vuelta acomodase en su cama.

Ojala pudiera observar su belleza por siempre

Me senté en la orilla de su cama y pase suavemente mis dedos sobre su rostro, acaricie su cabello, me acerque poco a poco y le di un beso en la frente, después de eso salí de su habitación donde me topé con Saac.

Saac: La amas-aseguro mirándome con cierta ¿tristeza?

Yo: ¿De dónde demonios sacas eso?-dije molesto

Quizás no nos gusta escuchar la realidad-respondió mi subconsciente-porque no podemos cambiarla, pero nosotros lo seguiremos negando una tras otra vez hasta convencernos a nosotros mismos que no es AMOR.

Saac: Deja de fingir-rodo los ojos y con voz fría e indiferente dijo- Si no la vas a perder, no sabes cuantos chicos haya afuera se mueren por ella

Yo: no me importa ella-dije enfadado-tampoco ellos.

Saac: Entonces no te importara que intente conquistarla-agrego con cierto brillo en la mirada

La sangre me hervía, el enojo me subía a la cabeza estaba enfadado y solo por unas cuantas palabras no pude más, lo agarre de la camisa y lo estrelle contra la pared

Yo: no te acerques a ella-grite mirándolo fijamente

Este comenzó a reírse a cargadas para luego soltar-La amas más de lo que piensas-aseguro

Eso no es cierto

Yo: deja de decir tonterías -gruñí- jamás podría amarla

Saac: entonces déjala libre-sentencio-porque solo le harás daño

Yo: no puedo dejarla libre porque-me calle tan pronto me di cuenta de lo que estaba diciendo

Saac: ¿porque qué? Matías-exigió que le dijera-Ha ya sé porque no quieres como tampoco pretendes dejarla aun así le hagas daño

Yo: no le hace daño-grite

Saac: lo veremos cuando tengas a muchas otras a tu alrededor-sentencio

Yo: tú no sabes nada de mí, tampoco puedes asegurar que le hace daño

Saac: puede que no te conozca, incluso que no sepa de tú ni puta madre, pero con solo verte puedo decirte que eres un hijo de puta capaz de dañar sin así desearlo.-grito mientras me empujaba

Cuando se liberó, se dirigió a la habitación que Mauricio le había dado.

Estaba enojado, no podía pensar las cosas con claridad.

Él está mal-intente convencerme a mí mismo

No le haría daño, primero muerto antes que hacerle daño, no soy como el desgraciado de Darren, yo no soy así-grite mientras estampaba mi puño contra la pared una tras otra vez.

En ese momento Mauricio me jalo y me metió un puñetazo en la cara

Mau: Cálmate-pidió-¿Qué demonios te pasa? Para hacer esto-dijo señalando la pared

No dije nada, solo me di la media vuelta e ingrese a mi habitación dando un portazo.

Jamás le haría daño, jamás haría que derramara una sola lágrima por mi culpa, jamás simplemente jamás me permitiría ser el culpable de sus ojitos hinchados y lágrimas rodando cada una de sus lágrimas.
No podría soportarlo, no sería el chico que le hiciera daño. Porque la quiero jamás haría algo que la dañara. Yo no podría, pero El si lo haría sin importarle nada.