Cap.22

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Nada es lo que parece.

Narra Mauricio:

Ha pasado unos meses desde esa noche en que Matías estrello su puño como nunca contra la pared, desquitando todo su enojo, no se la razón por la cual actuó de tal manera Saac dijo que solo le había dicho sus verdades y por eso se había puesto así, si era cierto lo que dijo solo significaba que las cosas que este le dijo fueron las peores...

Matías odia escuchar sus defectos, odia saber lo que él ya sabe más que nadie.

Al día siguiente actuaba como si nada hubiera pasado, unas semanas después intento convencer a Line de dejar su venganza a un lado cosa que casi consigue, cosa que hasta la actualidad intenta hacer.

Saac: La convencerá ¿verdad?-cuestiono Saac mirando la puerta

Yo: no lo sé Isaac-le respondí

Saac: Lo hará -respondió de la nada- y luego no quedara nada de la Evangeline que es ahora.

Yo: ¿De qué hablas?-le pregunte con curiosidad pero al ver que se quedó callado volví a hablarle-respóndeme Saac-pedí

Saac: Nada es lo que parece-esas fueron las únicas palabras que salieron de sus labios, dicho esto se levantó del sofá y salió por puerta dejándome totalmente confundido.

Narradora:

Durante esos meses que había pasado, Evangeline volvió a mirar a los dos primos, sus nombres son Jasón y Johan que fueron sus amigos en su infancia, después de su encuentro platicaron por horas, ella le comento sobre aquel chico que la destruyo, los chicos prestaron atención a cada palabra que salió de la boca de su pequeña Evangeline, ellos solo sentían su sangre hervir, el enojo les recorría el cuerpo. Ambos estaban de igual manera, por primera vez ambos querían partirle a cara a una misma persona.

Pero ninguno hizo nada, se apegaron al plan de su pequeña Line, no estaban de acuerdo a él, pero sabían que si ella comenzaba su plan ya nada ni nadie podría pararla. Ambos la conocían como la que menos piedad podría tener si ella se lo proponía a sí misma.

El plan: Enamorarlo sin siquiera darle alas o motivos.

Enamorarlo solo siendo su amiga, una simple amiga que no buscaba más de lo que ella era.

Mientras Matías no estaba tan contento del todo, pues ahora también tendría que vigilar a dos chicos más, Mauricio por su parte estaba feliz de conocer a quienes cuidaban de Line antes de él.

Saac sabía bien las cosas, había logrado conocer más a Mauricio y a Matías, pero de lo que más estaba seguro era de que...

Las cosas nunca son lo que parecen.

Y ante los ojos de cualquiera Matías podía parecer el típico chico enamorado incapaz de hacer daño pero...quizás nadie podía ver ¿quién era en verdad? Mas sin embargo el si podía mirarlo a la perfección.

Matías en verdad era un chico enamorado, capaz de hacer cualquier cosa y no solo eso, era alguien con doble personalidad, que en cualquier momento podría salir a flote su otro yo.

Narra Matías:

Quizás yo te quiero y te amo más que a nada en el mundo pequeña, pero EL no lo hace, él no es como yo, soy yo, pero a la vez no soy yo, no podría explicarlo, somos como dos personas distintas compartiendo el mismo cuerpo, la misma mente más sin embargo no compartimos los mismos sentimientos.

Somos dos personas distintas en un solo cuerpo, luchando entre nosotros mismos por mantener el control el uno sobre otro y sobre el cuerpo en el que estamos.

No sé cuándo nació el, ¿Quizás siempre estuvo conmigo? O ¿Quizás nació de mi rencor hacia el mundo? El rencor hacia el mundo de mentiras, pero él es solo la personalidad que hace daño para no ser dañado pero tampoco soporta dañar y cuando lo hace es demasiado tarde para cambiar los hechos, en pocas palabras él es mi debilidad.

Y siempre viviré atado a él, con el miedo de perder a quien más Amo en este mundo.

Mi pequeña Evangeline ¿me aceptarías con esta maldición? que sería capaz de dañarte más de mil veces.

No, no lo sé.
Quizás lo harías o quizás te alejarías
Al ver el mostró que soy.

Todos tenían razón, Las cosas no son lo que aparentan y yo no soy lo que crees.

Ya No Soy La De Ayer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora