Los opuestos realmente se atraen

Capitulo 46:

Desde la última vez que Jonathan llego borracho y vómito todo el suelo (no es como si fuera la primera vez) le tuve prohibido salir hasta tarde con Lorely o con quien fuera, más tardar 10:00, no me llamen exagerado pero es que no podía seguir así. Tengo a veces que ser estricto con él.

Me había terminada de duchar y baje las escaleras hasta la cocina para prepara algo de almuerzo, me fije en la sala que ahora era el centro de atención en ese momento ya que Jonathan sostenía con una mano una almohada mientras Jessabelle la golpeaba con toda la fuerza que podía.

-Que creen que hacen.
-Le enseño boxeo a Jessabelle.
-Porque le enseñas eso a una niña.
-Para que sea más fuerte ¿no es obvio? Esta mejorando cada vez más. Y mañana le enseñare tiro al blanco con dardos y una pistola de juguete.

Me fije que en unos 5 golpes más ella logro tirar la almohada al suelo casi sacándole las plumas, me miro sonriendo con una inocente mirada de niña buena y dulce. ¿Que es en lo que la esta convirtiendo Jonathan? ¿acaso en su doble en miniatura?

Sólo suspire de resignación y volví a la cocina como si no hubiera visto nada. Jessabelle sigue siendo la niña amable que siempre ha sido, eso no ha cambiado en nada, juega con muñecas, peluches y todo con lo que una nena normal de 9 años podría jugar, pero también ahora lleva su parte intensa e hiperactiva que Jonathan ha despertado en ella. Realmente tiene un método extraño de criar a un niño.

Escuche el teléfono resonar por toda la casa, como Jonathan y Jessabelle están ocupados no lo pensé dos veces para contestar yo.

-¿Sí?
-¿Hola? Que tal cariño.
-Hola mamá, ¿que hay de nuevo?
-Por aquí no mucho, pero estamos bien.
-Eso es un alivio. Los extraño, quizás pronto vaya a visitarte.
-Eso sería encantador, he remodelado un poco la decoración en la casa, también plante unas amapolas en el patio, creo que quedaron bien.
-Ya hacia falta algo de color en el patio.
-Exacto. ¿Cómo esta Jessabelle?
-Ella está bien, excelente creo, ya sabes como es ella.
-¿Y como la esta cuidando Jonathan?
-Eh...

Eche un vistazo hacia la sala, en donde Jesabelle estaba prácticamente destrozando  la almohada, si que era una niña fuerte y de vez en cuando intensa. Jonathan la miraba sonriendo muy orgulloso.

-Él... Es... excelente cuidandola.
-¿Y como se siente con ustedes? ¿es muy tímida?
-Para nada, es como si viviera aquí desde hace años, se memorizo las habitación más rápido que Jonathan cuando nos mudamos aquí.
-Eso está bien. ¿Y ustedes no le han dicho nada sobre... Ya sabes, Jonathan y tú? ¿No les ha echo preguntas?
-Oh, no, aún no sabe nada, y no es como si lo tomara tanto en cuenta.
-Deberías de decirle, va a pensar que le han mentido.
-Es que... Aún no estoy listo, quiero esperar un par de años más, no quiero que lo sepa. Aún.
-David... Tarde o temprano se va a dar cuenta ella sola.
-Lo se... Sólo... Quiero que aún piense de este modo, no quiero que por eso nos odie o algo, no se como pueda reaccionar o...
-David, conoces a Jessabelle, y estoy 100% segura que a ella no le molestará.
-Bien, pero aún quiero esperar un par de años más, prometo que después de sus 12.
-Bien cariño, respeto tu decisión.
-Y ya que estamos hablando de Jonathan y yo, quiero decirte algo...
-¿Jonathan está embarazado?
-¿Que? ¡No!, espera ¿que? ¡Mamá! ¡Sabes que eso no se puede! Además... Olvídalo.
-Lo se, je je, siempre quise hacer ese chiste, continúa amor.
-Yo... Bueno, es que Jonathan... Me pidió ser... su esposo.
-Él... ¿Qué? ¿Enserio?
-Así es. Estamos comprometidos.

La vergüenza que tenía en este momento era increíble, debo estar rojo hasta las orejas y no quiero ni pensar en las muecas que estoy haciendo.

-Estoy... Muy feliz por ambos.
-¿en verdad lo dices?
-Claro que sí, si te soy sincera, cuando descubrí que eran pareja, no creí que pudieran durar más de 2 meses. Eran, y siguen siendo muy distintos.
-Eso no te lo voy a negar.
-Y mira, han estado juntos mucho tiempo y ahora me dices que están comprometidos, es increíble. ¿A ti... Te gusta la idea verdad?
-Claro que si, aunque no es algo que le grite a los cuatro vientos por la vergüenza, pero claro que quiero.
-Mi pequeño David... Cuando eras niño pensaba que nunca te ibas a comprometer e ibas a vivir siempre con mamá.
-Oye... ya no soy un niño... Pero se que siempre seré tu niño mimado quiera o no.
-Claro que lo serás siempre querido. Sabes, quisiera... Poder llevarme mejor con Jonathan, aunque me cueste decirlo, él es quien hace feliz a mi hijo, quisiera tener el honor de poder llamarlo algún día... Mi yerno.
-...Claro, eso suena... estupendo.

Esa cálida sensación de felicidad extrema recorría todo mi cuerpo. Cuando empece a salir con Jonathan, no pensé que mi vida cambiaría tanto, y eso que durante varios años, antes era de regular a peor, después se convirtió de regular a bien, y ahora va de bien a mejor.

-Hablamos más tarde mamá, le daré de almorzar a Jessabelle.
-Adiós cariño, te amo.
-Y yo a ti.

Colgué con una sonrisa en mi cara, nunca pensé que mi madre le diría algún día yerno a Jonathan, supongo que eso es una gran paso para los dos. Espero que también me llamen yerno alguna vez... Y ahora que lo pienso, llevo 4 años con Jonathan y aún no conozco a la mujer que se supone que es mi suegra, la mujer que dio a luz a Jonathan, o más bien, como fue primeramente conocido: Todd. ¿Porque Jonathan aún no me ha llevado a conocer sus padres? Su hermano apenas lo conocí y no fue una primera impresión muy buena, pero aún no conozco a nadie de su familia, y se ve, que por las pocas veces que me habla de ellos, no les tiene mucho afecto como yo a mi familia. Debería de ir persistiendo en el tema si realmente quiero conocer todo de Jonathan, empezando por su pasado.