Sonamy - Amantes

Equipo Sonic

Había amanecido y el cielo estaba despejado, con pocas nubes que lo adornaban, una mañana muy hermosa para despertar a dos chicos que compartieron una noche muy agradable, tal vez no en el lugar más elegante, pero eso no importaba en tanto se tuvieran el uno al otro.

La fogata se había extinguido y donde antes estuvo una llama que lo ayudo a mantener el calor solo quedaban cenizas y un inocente humo blanco, sobre la paja estaba el cuerpo de un erizo azul y sobre él una eriza rosa abrazándolo como si fuera su osito de peluche.

Sonic sintió los rayos del sol darle en la cara, su cuerpo esta adormecido por tener encima a Amy quien no lo soltó ni un segundo en toda la noche y acariciaba su pectoral con sus mejillas moviéndolas, el erizo abrió los ojos y solo pudo mover lo único que aun podía sentir, sus brazos.

Sonic: *bostezando* ¿Mm...? Ah cierto, nos dormimos en este granero *trata de moverse* ¡Ay! No siento mis piernas ni mi torso *ve a Amy* Con razón.

El erizo no quería despertarla tan agitadamente, la abrazo y acaricio su espalda y púas, lentamente Amy se movía mientras esbozaba unos pequeños suspiros y comenzó a levantar su cabeza abriendo de a poco sus ojos, vio a Sonic despierto y le sonrió mientras volvía a dejar caer su cabeza en el pecho del erizo.

Sonic: Oye hay que levantarnos, debemos volver a casa.

Amy: Mm... Si lo sé, pero aún tengo sueño, déjame dormir unos minutos más por favor.

Sonic: Pero si notaron que no estuvimos en el reino ayer en todo el día y la noche, estaremos en problemas.

Amy: ¿Qué más da? Tú no eres ningún empleado o esclavo ni mucho menos un objeto para que te tengan controlado y vigilado en ese pueblo.

Sonic pensó por un momento lo que dijo Amy y la verdad es que tenía razón ¿Por qué se preocupa tanto de que noten que no está en él reino? Si sus amigos, ciudadanos y en especial los guarias reales y Sally lo necesitan y no lo encuentran, que esperen a que aparezca, después de todo no es ningún esclavo ni un objeto para que controlen lo que quiera hacer.

Si Sonic quería ausentarse un día al menos, claro que podía hacerlo, después de todo Sally a veces ni siquiera sale de su palacio, han habido días en los que no ha visto a Sonic porque ella está ocupada en sus deberes y si ella podía pasar un día ocupada en sus asuntos, él también podía, pero no había que olvidar que debían ser discretos con lo suyo y evitar levantar sospechas.

Sonic: Lo se Amy y tienes razón, pero no debemos levantar sospechas, si notan que ni tu ni yo estamos, eso podría alertar a muchas personas que le informaría a Sally.

Amy: A veces quisiera huir de ese lugar contigo y no volver nunca más.

Sonic: ¿Y que hay de Tails, Cream y Vainilla?

Amy: Es por ellos que no me eh ido, son personas demasiado especiales para mi *se acerca a la cara de Sonic* Pero tú eres el más importante.

La eriza le dio un beso a Sonic, uno muy dulce y largo, no quería soltarlo aún que les faltaba ya el aliento, él erizo sentía que ese beso le decía muchas cosas por parte de Amy, cosas como "Eres mío" o "Quédate conmigo siempre" y también "No te dejare nunca"

El erizo termino abrazándola mientras ella seguía unida a él por sus labios y su dulce sabor que la hacía única, al final Amy se separó de él se sentó en la paja para mirar a Sonic quien aún no se movía.

Amy: Bien, creo que es hora de irse *se pone de pie* ¿No vamos? *Sonic no se movía* ¿Estas bien?

Sonic: Si, es solo que... Aun no puedo mover mi cuerpo.