Capítulo 8

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Ayer empezó mi entrenamiento con mis padres, sabia que podía ser el peor error de mi vida pero esta vez no me echaría para atrás, no quería perder la oportunidad; me levante y me prepare para ir a clases sintiendo las piernas adoloridas a más no poder por el entrenamiento, baje al primer piso y mamá ya me esperaba a un lado de la puerta para irnos.

-Sigues muy lenta.- bromeo ella viendo mi agonía al bajar las escaleras.

-¿Que esperabas? me molieron los músculos tu y Aleksei.-dije sufriendo internamente.

-Vayámonos llorona, que cuando regreses te ira peor.- dijo saliendo en dirección al auto.

Una vez en clases no dejaba de sentir su mirada clavada en mi hombro  derecho, trataba de ignorarlo pero me era difícil si a la vez varios murmuraban eso; pedí permiso de ir al baño al profesor y salí corriendo de ahí con la ansiedad haciéndome sudar. Me eche agua en el rostro y respire profundo evitando que eso me afectara de más, mire mi reflejo donde me veía ojerosa y con las mejillas rosadas haciendo resaltar el verde y el café claro de mis ojos.

extrañamente, no me veía mal. 

Con la autoestima un poco más alta y más calmada, me dirigí a clases notando que el profesor iba saliendo en mi misma dirección, se detuvo a decirme que le pidiera los apuntes a alguien y me integrara a un equipo para el proyecto de la próxima semana y siguió como si nada; di unos cuantos pasos más y entre al salón pensando con quien haría equipo.

¿Shinsou? no, no me quiere cerca.

Aya no es una opción.

...

Debería hacer más amigos.

Me senté en mi pupitre viendo por la ventana desechando nombres de compañeros para formar equipo, no tenia muchas opciones y estaba por resignarme y pedirle al profesor si podía hacer el trabajo sola pero entonces un chico de mi clase se puso de pie al lado mio diciendo mi nombre tímido y apenado, era uno de los tantos que siempre se sentaba atrás y estaba solo; se llamaba Akihiro Hideo.

-Ivanova-san, disculpa por preguntar pero ¿y-ya tienes equipo?.- pregunto Hideo notablemente apenado, sus ojos grises con un ligero color amarillento hacia la pupila resaltaban de su piel blanca y cabello negro azabache, jamás lo había visto de cerca y eso me hacia notar su diferencia de estatura entre nosotros.

-Puedes llamarme Jun, y no, aun no tengo equipo, ¿te gustaría formar equipo conmigo?.-dije con tono animado a lo que el se tranquilizo, creo esperaba fuera tan mala como los demás decían.

-Genial, ¿podríamos hablar de eso en el almuerzo.- volvió a preguntar con una sonrisa en su rostro derrochando amabilidad, ¿debería confiar?.

Pronto entro el profesor de la clase de ingles, solo asentí y el volvió a su lugar y todos sacamos nuestros libros pero al momento de acomodarme y abrir el libro sentí una mirada de nuevo, más profunda y directa, casi como si estuvieran al lado mio viéndome sin perder cada movimiento; voltee y vi a Shinsou como me miraba de reojo hasta que se percato de que lo veía y volvió su vista al frente, solo espero no vaya a tomarse mal que haga equipo con el chico de ojos grises aunque a fin de cuentas, no tiene porque.
Las clases pasaron y llego el almuerzo, subí con Hideo a la azotea y comimos mientras hablábamos de como debíamos organizarnos o si podíamos ir a casa de alguno a hacer el trabajo de una vez, todo estaba calmado y el era un chico muy amable; creo que puedo confiar; sonó el timbre de fin del almuerzo y ambos volvimos a clases platicando, entramos a clases y como no, la clase empezó a molestarlo por estar conmigo.

-Oh así que Jun dejo a Hitoshi por hacerse novia de Akihiro, que perra.- escupió su veneno Ayanawa.

-Supongo que te gustaría irte suspendida de nuevo, ¿no, Aya?.-dije mirándola con molestia, era una desgraciada.

My reasons to be a HERO - Hitoshi Shinsou & OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora